Hojas de Otoño (camren)

Invierno - 7

Llevaba algunos minutos estacionada al frente de la casa de Camila, había seguridad y ellos estaban buscando mi nombre en la lista de invitados. Se me hacia un poco chistoso, jamás pensé que a Camila le gustasen las residencias, aunque claro, ahora ella era una cantante muy famosa, podía darse todos los lujos que quisiera, pero me sorprendía, pensaba que ella vivía sola, con su gato.

" Señorita Jauregui, puede pasar. " Escuché al vigilante y le di una suave sonrisa antes de subir el vidrio nuevamente y pasar hacia dentro de la residencia. Simplemente seguí el camino y cuando divisé la casa, me reí suavemente.

Definitivamente, esto si era Camila Cabello.

Era una residencia similar a la mía, extensa y con áreas verdes cubiertas por la nieve rodeando el hogar, pero la casa, era una casa pequeña, de dos plantas, se miraba hermosa y acogedora y lo importante, tenía la esencia de la cantante en cada parte de ella. Cada cosa que iba descubriendo acerca de Camila era algo que guardaba mentalmente, me gustaba saber más acerca de ella, de quien era ahora. Sonreí cuando me di cuenta de que ella había abierto la puerta y se encontraba recostada del umbral de la puerta de su casa. Llevaba jeans claros y una camisa de mangas largas y cuello alto color blanco, su cabello rizado lucía encantador, seductor, sinceramente me provocaba enredar las manos en el, eso no estaba mal, ¿cierto?

Estaba preciosa simplemente, pero bueno, es Camila Cabello...

" ¡Hey! " Saludé cuando estuve fuera de la camioneta. Ella solo me quedo mirando durante algunos segundos, solo siendo ella, Camila.

" Hola... " Dijo finalmente antes de comenzar a bajar suavemente los escalones y caminar cuidadosamente en frente de mi.

" ¿Todo está bien? Vine lo más rápido que pude. " No me contuve de quitar un mechón rizado de su rostro para colocarselo detrás de la oreja. Estaba nerviosa, lo sabía por su cara, por como estaba tragando saliva. Sus ojos cristalinos sin embargo, me asustaban, no tenía ni una sola idea de que podría estar pasando. " Camz... " La llamé para que reaccionase.

" Hm... ¿Donde está Bruno? " Me pregunto cuidadosamente.

" Bueno, no sabía si iba a ser apropiado que lo trajera. Digo, por el tono en el que me hablaste pensé que a lo mejor algo no andaba bien. " Le contesté y ella asintió suavemente. La mirada nerviosa seguía presente en ella, preocupándome un poco. " Camila... " La llamé otra vez, me estaba poniendo nerviosa solo mirándome de esa forma sin decirme nada.

" Lauren... sé que debo invitarte a pasar, pero lo que te quiero decir tiene que ser ahora porque si no, voy a arruinarlo o no lo sé, voy a vomitar. Además si lo dejo pasar estaría mal porque te estaría ocultando algo y ya he hecho suficientemente las cosas más, además es importante para ti y yo- " Empezó a divagar.

" Camz, tranquilizate por favor. " Coloqué mi mano suavemente encima de su hombro " Respira, ¿si? Todo va a estar bien, vamos con calma. " Le sonreí. La miré temblorosa y acaricié sus brazos con mis dos manos tratando de darle calor. " ¿Tienes frío? " Le pregunté. Ella suspiró.

" Estoy nerviosa eso es. " Admitió antes de respirar profundamente con los ojos cerrados. La miré tan bonita como siempre, incluso mucho más, más mujer. Le acaricié la mejilla de forma tranquilizadora entonces su mirada subió para conectarse con la mía, le sonreí cuando sus mejillas se colorearon y su mano atrapó la mía por encima de su mejillas, tratando de mantener la caricia.

A ella le hacía falta que le dieran amor y yo lo sabía.

" Tranquila... " Susurré acercando mi cara a la suya para dar un beso suave en su frente.

Mi conexión con Camila sobrepasaba cualquier cosa. Pasaban los años y todavía se sentía tan natural las muestras de afecto. Aunque era yo quien se las proporcionaba, Camila parecía tener miedo de acercarse a mi y no sé por qué. Sin embargo, ella no se aleja de mi, no se incomoda, parece ansiosa. Me preguntó si se comporta así porque tengo pareja, quizás ella piensa que no puede darme afecto porque estoy con alguien más o tal vez, ella simplemente ya no es igual de afectiva que antes.