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Narrador universal

Jueves 30 de diciembre de 1999

—¡Rápido, Benjamín! no tengo todo el día— dijo Felipe

Él estaba terminando de colocar unas flores en la bandeja que había preparado, mientras que Benjamín buscaba una taza para servir la chocolatada.

—¿Para quién es esto? ¿para los más chiquitos?— preguntó confundido —¿Es el cumpleaños de María o de Tali y me olvidé?—

—No es el cumpleaños de nadie, y que tenga una chocolatada no significa que sea para una niña— se encogió de hombros —Ayúdame, ya te vas a enterar—

—Hasta flores compraste, no entiendo nada— insistió el rubio

—Sígueme— dijo terminando de colocar lo último en la bandeja

Felipe tomó todo entre sus manos, mientras que Benjamín lo seguía. Subieron las escaleras hasta la habitación de Luisana y Camila, y se pararon frente a la puerta.

—No me digas que esto es para Camila— dijo asombrado el rubio

—Cállate— ordenó

Benjamín abrió la puerta, y Felipe se acercó hasta la cama de Luisana. Ambas chicas dormían plácidamente. Él colocó la bandeja en la mesita de noche, y dejó las flores sobre la cama. Comenzó a acariciar el cabello de la rubia, y sus mejillas, hasta que ella poco a poco abrió los ojos

—Buenos días, mi reina— le susurró

—Buen día, angelito— sonrió ella, con los ojos entreabiertos —¿Qué haces acá?—

—Vine a traerte un regalito— le enseñó las flores y el desayuno —siéntate—

Ella lo hizo, así que el le dio la bandeja para que desayune.

—No entiendo nada— dijo Benjamín desde la puerta

—Desperta a Cami, tenemos que decirles algo— contesto Luisana 

— ¿No la pueden despertar ustedes?— preguntó incómodo 

—Despiértala tu ¿o le tienes miedo?— rió Felipe, sentándose junto a su novia

—Obvio que no le tengo miedo— fue hacía la cama de la castaña y se sentó —Camila despertate— dijo sacudiendo su hombro —¡CAMILA DESPERTATE!— la sacudió mas fuerte

—Espera bestia ¿Qué pasa?— preguntó ella a penas se despertó

—No se, Felipe y Luisana nos quieren decir algo— se encogió de hombros

Camila se acomodo y se sentó junto a Benjamín. Las camas quedaban una frente a la otra, así que los cuatro estaban cerca. 

—Tenemos una noticia para darles— dijo Felipe —ayer estuvimos hablando mucho, y queríamos que ustedes fueran los primeros en enterarse, porque al fin y al cabo son nuestros mejores amigos—

—¿Qué pasa?— pregunto Camila

—Felipe y yo...—

—¡¿Se amigaron?!—dijeron los dos a la vez, sonriendo entusiasmados

—Algo más que eso— hablo Felipe

—¡Nos pusimos de novios!— chilló Luisana

—¿Qué?— volvieron a hablar a la vez, sorprendidos

—Yo sabía que se gustaban— río Benjamín —Se los dije, a los dos—

—No entiendo, me perdí una parte ¿desde cuando están de novios?— dijo sin creerlo Camila —¡Hasta ayer estaban peleados!—

Prohibido enamorarse de élKde žijí příběhy. Začni objevovat