One shots

Asher Angel.

Me gustaba este ambiente, el tiempo frío y húmedo era lindo, para pocas personas lo es, pero a mí realmente me gustaba, mi suéter grande que perteneció mi hermana mayor era perfecto para estos tiempos, iba caminando con la mochila rumbo a mi escuela, tengo quince años de edad, me gustaba en donde vivía, era una casa vieja pero inmensa en mitad de el bosque, muchos de los que pasaban ahí creían que en esa casa habitaban brujos o algo por el estilo, pero lo cierto es que esa casa es de mi familia durante muchas generaciones, la mayoría de mis amigos temían venir a esta casa, excepto para las fiestas de Halloween, mi casa siempre era la primera opción, mi grupo de amigos, solo eran de cinco personas, pero la que realmente veo como mi mejor amiga era Mildred, una chica bajita, con un pelo espantosamente esponjado y unos ojos tan azules que te podrías perder en ellos, para la escuela siempre tomaba mis prendas, la mayoría no era pensada, pero casi siempre era negra, eso subía más los rumores de que yo era una bruja. Caminaba feliz con mochila vieja colgada en un hombro, el suéter negro de mi hermana, unos jeans desgastados y unos vans viejos era mi vestimenta de hoy, a veces me levantaba un poco demasiado tarde para pensar en como me iba a vestir, caminaba es dirección para mi clase cuando me encontré a Mildred.

—A llegado un alumnos nuevo hoy— habló sin saludarme, a decir verdad éramos amantes del chisme. —La mayoría dice que es muy lindo.

—¿Lo has visto?— Pregunté.

—La verdad no, debe estar en la dirección, ya sabes... Viendo en qué grupo va a quedar y todo eso.

—Si, es cierto— Le conteste. —Vamos a el salón, llegaremos tarde otra vez.

—Tienes razon.

Las dos caminamos hacia el salón, cada una nos sentamos en el banco, saque mis libros y esperemos a que la maestra llegará, pasaron apenas dos minutos y ella llego, después de un chico lindo, era el, era el nuevo, tenía un estatura alta, sonrisa linda y ojos verdes, volteé a ver a Mildred con los ojos muy abiertos, el de verdad era lindo.

—Buenos días alumnos, aquí su nuevo compañero Asher Angel— El chico sonrío. —Puede pasar a sentarse donde usted quiera.

El chico se fue a sentar en uno de los asientos de en frente, todo el salón se convirtió en susurros, algunos no sabían que había un estudiante nuevo y otros simplemente estaban hablando de su aspecto.

—Bien chicos creo que es mucha plática— Habló la maestra. —Vamos a comenzar la clase.

(...)

Después de eso, no me pude concentrar en las clases, parecía que aquel chico de verdad me había llamado la atención, queria saber todo de el, pero era mi penosa para hacer eso, ahora estaba en el descanso con el grupo de mis amigos, a decir verdad Mildred y yo éramos las únicas mujeres, así que escuchábamos hablar a los demás de videojuegos o de fútbol, pero ahora fue diferente, Mildred y yo les hablamos de aquel alumno nuevo.

—¿Asi que te gustó?— Pregunto uno de ellos.

—No me gustó, es solo que es muy lindo— Alguien me interrumpió.

—Hola— Sonrío, era el, Asher. —¿Puedo unirme a ustedes?— Mildred y yo nos quedamos calladas viéndolo.

—¡Claro!— hablo uno de nuestros amores —Sientate, hay mucho espacio.

—Bueno ¿Y que decías _______?

—Ahora nada, es momento de que hablen de videojuegos— Se pasaron todo el descanso hablando de los nuevos y los próximos estrenos de videojuegos.

(...)

La hora de la salida estaba con Mildred caminando a casa, Mildred era la única que no le temía a mi casa, la verdad es que ella ya vivía ahí, no nos separamos por nada, si se va a mi casa siempre se queda, ya que mi casa está muy separada a la suya, y ella se va muy noche. Veníamos platicando sobre aquel chico, era igual que nuestros amigos, hablaba cosas que no entendíamos sobre videojuegos, es muy probable que nos la pasemos hablando de él toda la tarde.

(...)

Los días pasaban, el chico seguía estando con nosotros, a decir verdad el yo hablábamos muy pocas veces, Mildred ya lo a superado, pero yo no, me e obsesionado un poco con su sonrisa, les e dicho a mis amigos, ellos dicen que le hable, pero la verdad no me atrevo, estábamos en un restaurante, mis ahora cuatro amigos, Mildred y yo, hablábamos de los exámenes de la próxima semana, estaba tomando de mi licuado poniendo atención a cada una de las facciones de Asher mientras el hablaba, era tan lindo. Después de esa salida de amigos, nos fuimos antes de que anocheciera, cuando nos estábamos despidiendo Asher me habló.

—¡_____!— Grito el. —¿Podemos hablar?

—Claro— Volteé a ver a Mildred.

—Ire a dentro por otro licuado, mientras hablan— Ella se fue de nuevo al restaurante.

—Oye, se que los exámenes están cerca y todo eso pero— Se aclaró la garganta. —Habra un baile después de eso... ¿Quieres ir conmigo?

—Oh... Pues... Si, claro, creí que no te acordarías de ese baile.

—Pues lo hice— rió —Queria decirte antes de que alguien más te lo pida, eres una chica realmente hermosa.