Mi mirada se concentraba en los árboles que iban pasando por la ventana del coche de mis padres, dos semanas de vacaciones, era increíble el cambio de clima que estaba aquí y al de la playa en la que estaba, llegamos a mi casa, ayude a papá a bajar el equipaje, después de desempacar todo me recosté en mi cama, la luz de la luna pasaba por mi ventana, la veía mientras pensaba en todo lo que había pasado en ese viaje, al recordar sonreí un poco, después de un rato la luz de la luna ya era molesta, me puse de pie y cerré las cortinas de la habitación, me quedé dormida, al pasar de los minutos, al día siguiente baje a el comedor donde ya estaba mi papá con el periódico en sus manos y una taza de café en la mesa, mi mamá estaba en la cocina preparando el desayuno, así que me fui con ella a la cocina para ver en qué le podía ayudar, y bueno solo le ayude a preparar el jugo de naranja, El huevo y los dos pedazos de tocino ya estaban en la mesa, me dirijo con el jugo de naranja y lo puse en medio de la mesa. Papá se había servido más café, así que el jugo solo era para mí y para mi madre, en dos días volvía a la universidad, estaba cerca de mi casa.
(...)
Los dos días que sobraban para ir a la universidad no hice nada más que estar en mi casa, viendo lo que me faltaba para que el día de el segundo grado de la universidad no me faltará nada, camine por los pasillos de la universidad y vi a mis amigos a lo lejos, Ricky y Freddy, saludé a los dos, después de casi un mes sin vernos, caminaba por los pasillos hasta que vi al que menos quería ver... Shawn, el me había hecho sufrir hace unos tres meses, el y yo tuvimos una relación de casi dos años, lo cual es mucho para mí, el se me quedó mirando y se fue con sus amigos.
—Es un idiota— Hablo Fred. —No lo mires, se te pega lo idiota.
Me dijo haciendo que riera un poco.
—Creo que ya se lo pego— Opino Ricky.
Freddy y Ricky, son dos chicos que miden casi dos metros de altura, mientras yo era muy pequeña a su lado y bueno eso también era burla hacia mi de parte de ellos, su pelo café y cuerpo flaco lo habían tenido desde que yo los conozco, eran casi idénticos, eran hermanos, gemelos, ellos dos y yo hemos sido amigos desde preescolar, lo único que se distinguía de ellos, era que Fred tenía los ojos azules y Ricky verdes.
Caminamos rumbo a qué nos dieran el horario, afortunadamente quedamos juntos en casi todas las clases, no me gustaba estar sin ellos dos, a decir verdad me sentía protegida junto a ellos, no de la manera en que ellos golpearían al que sea que me molestará si no que si alguna maestra me mandaba a detención, ellos hacian lo posible para ir conmigo, seis de ocho clases me había tocado con ellos, la primera del día de hoy no me había tocado con ellos, así que partimos en dos direcciones diferentes, yo fui a mi clase. Eran cuatro clases al día de una hora y media, y un descanso de treinta minutos entre la segunda y tercera clase.
Me adentre al salón que todavía estaba vacío, pero un minuto más tarde había entrado Shawn, el se sento lado mio.
—Hola...
Dijo mientras yo sacaba mis libros.
—Hola.
Respondí con muy poca importancia.
—¿Cómo te la pasaste en vacaciones?
—Excelente— Volteé al frente —¿Cómo te la pasaste tu?
—No tan excelente.
—Que lastima.
Dije aún si voltearlo a ver.
—¿Puedo hablar contigo hoy?
—Ya lo estás haciendo.
—Me refiero a que si podemos salir hoy.
—No creo que pueda, estaré ocupada.
—Es algo importante— habló insistiendo —Solo será esta vez.
Suspiré y lo volteé a mirar...
—¿En el café de siempre?— El solo asintió. —Te veo ahí a las cinco en punto ni un minuto mas ni un minuto menos.
Me di la vuelta hacia el pizarrón de nuevo y vi su sonrisa de satisfacción, pasaron las dos horas de clase, no podía pensar en lo que me iba a decir Shawn, sabía que me veía muy pensativa, al ver la cara de mis mejores amigos al ver que estaba muy despistada, en el descanso nos sentamos en la misma mesa de siempre.
—¿Cómo les fue en vacaciones?
Pregunté dando una mordida a mi lonche.
—Las vacaciones a las cabañas no fueron tan emocionantes como creímos, el mismos clima de aquí, rodeados por árboles, era como vivir aquí, solo que en una casa vieja— Respondió Ricky —¿A ti como te fue en la playa?
—¡Genial! Les contaré lo que me pasó...
—Entonces ¡Tuviste un amor de verano!— Dijo emocionado Fred. —¿Cómo era?
—Era muuuuy lindo— dije alargando la U —Se llama Cole Sprouse, me ayudó mucho con lo de Shawn, cuando estuve con el, Shawn simplemente desapareció para mí, ahora que veo a Shawn, ya no siento la misma tristeza que sentía antes.
(...)
Eran exactamente las cinco y Shawn se estaba sentando frente a mi en la cafetería que habíamos quedado, su chaqueta negra le quedaba igual de bien que cuando le dije que se probará la de mi padre, mi mirada estaba en el café que había pedido.
—¿Que es lo que quieres?
Pregunté dándole un sorbo al café.
—E estado pensando estas semanas, ______ te necesito.
—Vaya Shawn— sonreí —Es la cosa más idiota que e escuchado.
—Se que e estado mal todo este tiempo, perdón, perdón por todo lo que te hice.
—¡¿Tu crees que yo no te necesite?! Dos meses llorando sin parar y ahora quieres volver, te perdone un engaño y luego me terminaste haciéndome sentir poca cosa, ahora estás aquí queriendo regresar, no Shawn, yo ya te supere.
Me puse de pie, pague mi pedido y me fui haciendo caso omiso a los llamados de Shawn.
(...)
Ha pasado tiempo, nunca volví a saber de aquel chico Cole, pero le doy gracias que me ayudó a superar a un idiota como Shawn.
