Capítulo 25.

1.8K 256 154
                                    

Joshua me entregó el botiquín que había adquirido con el capitán Kenzo, y dió unos pasos hacia atrás para quedar fuera de la habitación por completo.

— ¿Estás segura de que no se enfadará si me voy? —preguntó, inseguro, mirando por encima de mi hombro, en dirección a donde se encontraba el príncipe Taehyung sentado en la mini sala.

— No creo que pueda enfadarse más de lo que ya está —dí un vistazo rápido hacia atrás también. El príncipe Taehyung se mantenía ocupado limpiando cuidadosamente las heridas de su boca.

Después del horrible escenario presenciado en la primera planta del palacio y del repentino anuncio del rey Eunsung, los príncipes se insultaron un rato más, pero ya no hubo ningún contacto físico gracias a los guardias.

Incluso Zaila lucía muy consternada, ya ni siquiera nos hizo algún caso, sólo entró a la habitación del comedor siguiendo al rey. Ella parecía igual de molesta que los príncipes.

Cada servidor se encargó de alejar a su príncipe de sus demás hermanos. Joshua y yo con más razón, ya que el príncipe Taehyung fue uno de los más heridos.

No le cuestionamos nada de camino acá, no lo creíamos pertinente. Además, admito que me daba miedo hacerlo.

Le dije a Joshua que yo podía encargarme de curar al príncipe, y es que, a pesar de que no dijo palabra durante todo el rato, se notaba lo enojado que estaba, y entre menos personas invadan su espacio, más probabilidades había de que su coraje no se extendiera hacia los demás y pronto hubiera calma. Pero también, Joshua dijo que el capitán Kenzo planeaba mostrarles las secciones del palacio para que estuvieran lo suficiente familiarizados con ella, por cualquier emergencia. Claro, todo esto antes de la pelea que hubo entre los príncipes.

Él dijo que si era necesario se quedaba, pero creo que nos sería más útil el que conociera bien cada espacio del palacio. Y es que, algo me decía que nos sería de mucha ayuda.

— Bien —contestó—. Si te aleja o no quiere que te le acerques, hazlo. No quisiera que se desquitará contigo.

— No te preocupes —afirmé—. Tengo algo de experiencia tratando al príncipe enojado, pero si esto es diferente, improvisaré.

— Está bien —él estaba a punto de irse, pero parecía que algo lo detenía. Pensó durante unos segundos, y luego se acercó a darme un beso en la mejilla— Te veo después —dijo, y se fue de prisa, sin permitirme decir más.

Me desconcertó un poco. Joshua siempre ha sido cariñoso, pero esta ocasión actuó bastante extraño. No me preocupé por que el príncipe Taehyung nos viera, él estaba muy inmerso en sus pensamientos como para considerar la existencia de alguien más. En realidad, era raro que me preocupara por eso, pero creo que a él le molestaría.

Cerré la puerta y me dirigí hasta el príncipe, quien seguía ocupado limpiando la sangre. Me senté a su lado y abrí el botiquín. De entre tantas cosas pude reconocer algo. Habían las mismas pastillas milagrosas que la señora Sun Won me había dado en el palacio oeste, esas que realizan una sanación increíblemente rápido, de la noche a la mañana. Antes de cualquier cosa preferí darle la pastilla primero.

En cuanto me acerqué para curarle el rostro cooperó sin reproche.

Quería saber qué fue lo que pasó. ¿Se lo pregunto directamente?

— Quise ayudar en cuanto ví lo que pasó —comencé a decir—, pero Zaila me detuvo. Fue bueno que llegaran los guardias —daba pequeños golpecitos con una solución de limpieza sobre la herida de su ceja.

— Te hubiera tocado un puñetazo si te acercabas —cerró sus ojos, sintiendo alivio por la sensación fresca de la solución que aplicaba—. Yoongi tiene un mal temperamento, y es muy violento.

The Election of the Prince [Taehyung] ; EN PAUSAKde žijí příběhy. Začni objevovat