128. |Lluvia de balas y estruendos |

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A diestra y siniestra las balas y golpes flotaban alrededor, era difícil decir realmente si estábamos ganando algo, no hasta que tuviéramos todas las gemas y las hubiéramos destruido. Entonces en el medio de la nada vi un portal abrirse, uno de los portales de Strange a juzgar y Thor lo atraversó enseguida junto a Rocket y Natasha. Debían estar lejos en el satélite que Quill mencionó pero ahora estaba aquí abriéndose paso en medio de nosotros.

-Traje refuerzos-. Nos anunció Strange por los auriculares a todos y bastante que hacían falta porque en cuestión de un abrir y cerrar de ojos, todo el poder de Thor se estaba expandiendo por el campo de batalla, las armas de Rocket no dejaban a ninguna criatura viva a su paso y Natasha iba casi volando por los aires con agilidad cortando cabezas por doquier.

Un pequeño hilo de felicidad y esperanza me invadió, aunque éste se desvaneció de inmediato cuando un grito de dolor se escuchó a unos cuántos metros de distancia en medio del bosque, conocía esa voz... me heló la sangre de inmediato pensar que algo pudiera pasarle.

Corrí sin pensarlo hasta la espesura del bosque, no demasiado lejos de la entrada estaba Tony en el piso casi retorciéndose de dolor, con lo que parecía ser una red de ojetos filosos a su alrededor. Había una criatura horrible frente a él causándolo todo, de piel grisácea con aspecto repugnante, con cabello gris solo en la parte posterior de su cabeza y una sonrisa diabólica plantada en su expresión.

-Maldito calamardo...-. Escuché a Tony murmurar en un intento de disparar en la dirección del ser que lo evadió sin esfuerzo.

Aproveché entonces el hecho de que no me hubiera visto, estar a un par de metros de distancia y tomé mi mejor oportunidad al dispararle, pero éste disparo fue evadido sin esfuerzo también. El horror llenó el rostro de Tony al verme ahí, sabía que estaba molesto porque no me hubiera quedado detrás de los muros.

-¿Qué tenemos aquí?...-. Preguntó la cosa dándo un paso en mi dirección y volví a dispararle, pero ésta vez una roca flotó como si nada y se interpuso entre él y el disparo protegiéndolo.

-No dejes que juegue con tu mente...-. Dijo Tony retorciéndose en una especia de estado de incapacidad y dolor que me revolvía el estómago y el corazón al mismo tiempo.

-¿Así que éste era tu más grande temor Stark?-. Preguntó el ser dando un paso más en mi dirección, mientras que yo daba otro hacia atrás, no tenía la menor idea de qué podía hacer, pero hasta el momento la telequinesis y aparentemente jugar con la mente de las personas era parte de ello. Sea lo que fuera, no iba a dejar que me manipulara, no sin antes entrar yo en la mente de él.

Antes de que lograra acercarse más, entré en sus pensamientos, en sus recuerdos, eran demasiados y más de lo que me hubiera querido gustar ver o sentir en ese instante, todo lleno de caos y de terror, todo lleno de angustia que por lo visto no podía usar en su contra como había hecho con todos los demás, no podía aturdirlo con la miseria que yacía en su mente porque de hecho la disfrutaba y se regocijaba en ella.

-Interesante...-. Dijo al ver lo que estaba haciendo sin éxito alguno, al notar mi expresión de horror y decepción al no poder manipularlo. Entonces de la nada otra roca vino también en mi dirección y salí de su mente solo a tiempo para estallarla con mi mano derecha antes de que llegara a mí.

-Su mente... no puedo...-. Le dije a Tony en un hilo de voz cuando otra cosa vino en mi dirección y no pude evadirla, me envió directo al suelo con un golpe fuerte en el hombro izquierdo.

-______________-. Escuché la voz de Tony inmóvil, muriendo por no poder hacer nada al respecto, sumido en una especie de trance de tortura sin capacidad de salir de él.

La criatura se acercó a mí con paso lento y decidido mientras que yo me ponía de pie del suelo, él estaba dispuesto a acabarme en ese instante ante los ojos de Stark pero no me iba a ir sin dar pelea o al menos eso pensé. Porque en ese momento una nube de color extraño y oscuro nos rodeó, voces y susurros llenaron el lugar sacando por completo a todos de concentración y cuando apenas tuve tiempo de procesar si lo que estaba pasando era si quiera real, un par de filos plateados atravesaron a la criatura igual de desconcertada que yo, que cayó al suelo sin tiempo de hacer algo más al respecto contra quién lo había atrapado.

-Me tomo dos segundos de vacaciones y ya mandan todo a la mierda-. Escuché la voz de Loki al momento que la ilusión de alrededor se desvanecía, había sido solo un truco para distraernos a todos mientras que atacaba, y apareció del otro lado con media sonrisa en su rostro que intentaba batallar con su expresión de molestia por haber tenido que volver hasta acá.

-Oh por Dios Loki... ¿Qué demonios haces aquí?-. Le pregunté abrazándolo, claramente feliz de verlo aunque no demasiado de que estuviera ahora involucrado en el medio de todo el caos.

-¿Qué demonios? salvar sus vidas bola e inútiles-. Me respondió con una mueca, al instante en el que la trampa que tenía a Tony sujeto se desvanecía y los objetos afilados caían al suelo.

-Tony...-. Dije corriendo en su dirección, cayendo de rodillas de inmediato en el cesped para tomar su rostro entre mis manos y ver que estuviera bien, a parte de la obvia tortura no parecía tener heridas serias además de un par de cortadas que estaba segura no eran parte de ésto -¿Estás bien?-. Le pregunté haciendo que me mirara a los ojos.

-Si... no fue nada... la cosa esa se metió en mi cabeza y cuando me di cuenta estaba rodeado de eso-. Me explicó, no demasiado seguro de lo que había pasado -Gracias cuernitos, te debo una-. Le dijo Tony a Loki que extendió la mano para ayudarlo a levantarse del suelo -Aunque no te aproveches de ello-. Agregó con una mueca.

-Claro que me aprovecharé-. Le respondió el Dios.

Una explosión más grande que todo lo demás que estaba ocurriendo llenó el lado norte del campo, seguida de una luz cegadora que iluminó todo por unos cuantos segundos haciéndonos imposible ver de dónde había venido. El silencio fue lo único que siguió la explosión a la vez que la luz se iba volviendo más tenue y los alrededores recobraban su visibilidad.

-Vino del palacio...-. Dijo Loki al ver el lugar de origen de la explosión, en la parte superior, antes rodeado por ventanas que ahora estaban hechas pedazos, el salón dónde había estado hacía un rato. Entonces, supe perfectamente lo que significaba esa explosión.

-Wanda le quitó la gema-. Dije con la voz un tanto quebrantada.

-Tenemos que sacarla de aquí y terminar esto de una vez-. Sentenció Stark junto a mí.

|Prohibido| Tony Stark / Iron Man y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora