|Prohibido| Tony Stark / Iron Man y tú

89. |Sobreprotección|

|Sobreprotección|

Ahora sentía que mi cerebro estaba partido en dos, no solo mi cerebro creo sino también lo que sentía... me sentía horrible por el hecho de que Tony estuviera preocupado, por el hecho de que se creyera culpable cuando él no hubiera tenido manera alguna de evitar algo, no es tampoco que algo malo hubiera pasado... lo que me llevaba a la otra parte de mis sentimientos, estaba segura de que Loki no tenía malas intenciones y no importaba cuantas veces el mundo intentara decirme que iba a matarnos apenas nos diéramos la vuelta. Tenía una mezcla de preocupación, rabia e incredulidad dentro y solo esperaba que todo se aclarara para que éste nudo en el estómago pudiera desaparecer.

-Hola...-. Dijo Peter lanzando su mochila al suelo y tirándose en el sofá de manera dramática.

-¿Qué tal tu examen?-. Le pregunté sentándome a su lado.

-Horrible... ¿qué tal el tuyo?-. Preguntó él y yo me encogí de hombros.

-Creo que nada mal pero uno nunca sabe...-. Le aseguré porque quizá pensaba que lo había hecho de maravilla y luego me entregaban un enorme 0 como nota final.

-¿Han matado ya a alguien?-. Preguntó refiriéndose a lo obvio y yo negué con la cabeza.

-Aún no...-. Le respondí con media sonrisa, no tenía demasiados ánimos ahora de entrar en detalles, pero Peter me miró de reojos con una sonrisa extraña -¿Qué?-. Le pregunté a la rara expresión del chico.

-Eres como un imán para criminales y gente peligrosa...-. Aseguró burlándose de mí.

-¿¡Qué!?-. Le grité ofendida al chico que se rió.

-Stark no es nada inofensivo... luego Barnes... ahora Loki, te pondremos en medio de la calle y a cualquiera que te salude lo metemos en la cárcel, nos ahorrarías el 90% del trabajo de los Vengadores-. Me dijo rompiendo a reírse mientras que lo le lanzaba uno de los almohadones que estaba sobre el sillón.

-¡Claro que no!-. Le grité riendo también.

-Apuesto a que Jessie es una espía y tendremos que investigar algo de ese chico Eddie que vive en tu edificio... es raro-. Aseguró él siendo un completo exagerado e iba a responderle pero escuchamos un estruendo en la cocina seguido de la voz de Loki.

-¡Máquina midgardiana del demonio!-. Se escuchó mientras que Peter y yo nos levantamos para ir a ver qué rayos estaba pasando. Al llegar al lugar nos encontramos a Loki dándole golpes a la cafetera.

-¿Sr. Loki?-. Lo llamó Peter al ver que no se había dado cuenta de que estábamos ahí -¿Todo bien?-. Inquirió.

-No me dejan salir a tomar un café y ...éste...aparato...-. Insistió golpeando la pobre máquina repetidamente.

-Okay... calma...calma...-. Le dije acercándome enseguida -Vas a romperla, aléjate, -. Insistí apartándolo antes de que fuera a dañar la cafetera de cientos de dólares que tenían en este lugar.

-En Asgard teníamos sirvientes-. Aseguró molesto -Incluso en Sakaar tenía sirvientes-. Agregó y Peter me miró igual de perdido que yo en todo esto.

-Esta es la tierra... aquí no tienes sirvientes será mejor que te acostumbres-. Le dije mirándolo con una ceja alzada y acercándome a la máquina mientras lo llamaba en mi dirección para que viniera a ver lo que hacía -Tienes que aprender....-. Insistí enseñándole cómo se usaba el aparato -Para el tipo que café que tomabas en Luke's necesitas dos de estas y presionas aquí...-. Le comencé a decir mientras el hombre me seguía con la mirada atentamente.