Capítulo XXXII (Pasado De Yelica Parte - VIII)

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***PASADO DE YELICA ***

Capítulo VIII

Seryna cabalgaba junto a sus hermanos por la ciudad en busca de Will.

- ¿Qué te garantiza que tenga los mismos objetivos que nosotros? - Le preguntó uno de los jóvenes que la acompañaba.

Ella mantenía la mirada fija en nada en particular.

- Kassir, lo pude ver en sus ojos - Le aseguró.

- Espero que no te equivoques - La miro serio el otro joven.

Ella frunció el ceño y se detuvo.  Los jóvenes se detuvieron extrañados.

- Kassir, Gafet - respiro profundo - Posee una gran fuerza y además lo siguen los guerreros del reino, es evidente que es importante para ellos, si él sabe sobre algo que podamos usar en contra de los reyes nos será útil tenerlo de nuestro lado.

Los jóvenes decidieron creer en su presentimiento.

***

Will a penas pudo abrir los ojos sintió el dolor de aquel ataque pero a pesar de lo desagradable de la herida solo pensó en Yelica.  Se intentó levantar para saber donde estaba ella y fue entonces que logró ver a aquel niño sanando sus heridas.

- Gracias - Logró emitir Will.

El niño se giro sorprendido.

- Tranquilo, te debía un favor - Se giro para terminar de vendar a Yelica.

- Si te refieres a lo que ocurrió ayer no necesitas arriesgarte por nosotros - Se puso de pie tambaleando - Nos marcharemos.

El niño se acercó a él para ayudarlo a apoyarse ya que sus heridas fueron graves.

- Aún estas herido - Intentó convencerlo de descansar.

Will sabía que en su condición no podría protegerse ni el mismo por lo que se sentó nuevamente. El niño corrió a un estante de madera y tomó un pan largo que troceo en 3 pedazos, se acercó a Will y le extendió uno de los trozos.

Will lo miró conmovido de ver que le ofrecía todo lo que tenía.

- ¿Cómo te llamas? - Sentía curiosidad por el niño.

El desvío la mirada.

- Me llaman de tantas formas que ya he olvidado mi verdadero nombre - Le reveló dándole un mordisco al trozo de pan.

Will dejó de respirar unos segundos sintiendo pena por el joven y en ese momento sintió que le debía su vida.

- Una persona tan valiente tiene derecho a un nombre, supongo que puedes elegir uno - Dio un primer mordisco al trozo de pan.

El niño sonrió.

- Deberé pensarlo muy bien, deberá ser un gran nombre - fantaseo pensando en tantos posibles nombres para elegir.

- Will - Susurro Yelica despertando.

Will se apresuró a levantarse y soportando el dolor se apoyó en su rodilla para bajar al nivel de ella que se encontraba recostada en una cama de paja.  La acarició en la frente y retiro el cabello húmedo que se le pegaba al rostro.

Libro 2 - Los Elementales - ♨El secreto de los espíritus❄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora