Capítulo XXVII (Pasado De Yelica - Parte III)

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*** PASADO DE YELICA ***

CAPÍTULO III

Terma se acerco al joven que tras la crisis quedo nuevamente inconsciente.

-¿qué te sucede? - susurro con preocupación mientras posaba su mano sobre la frente del elemental.

Se alarmó al sentir la terrorífica variación de temperatura que estaba sufriendo su cuerpo, sabía que aún para un elemental aquél fenómeno podría ser letal.

Se alejo del joven para acercarse a su hija que no dejaba de temblar de miedo. La sostuvo suavemente de sus hombros.

-Yelica te pediré un favor muy importante - Emitió manteniendo la calma - Necesito que busques al alquimista y lo traigas de inmediato.

Yelica se petrifico tras la petición de su madre. Nunca se había visto envuelta en una situación tan peligrosa y arriesgada pero sin importar el miedo era por sobre todo muy obediente.

Terma corrio a la chimenea y tomo un saco empolvado, metió dentro un troso de pan y algunos frutos secos ademas de una manzana.

Yelica la observaba a una distancia prudente mientras se hacía la idea de que tendría que salir al bosque a buscar al antiguo alquimista que habitaba cerca del bosque del Norte. Su madre habitualmente se topaba con el para que este le proporcionara herramientas mágicas para la práctica de sus habilidades, pero, nunca había tenido que ir sola.

Terma terminó de empacarle un pequeño saco para Yelica con lo necesario para el trayecto. Se acercó a su hija y saco de su bota su vara y se la extendió.

-Mamá te ha enseñado a usarla -Le susurro mientras colocaba la vara en su mano - Sabes que cuentas con una gran habilidad si te topas con elementales de hielo inmunes a tus ataques.

-¿Crees que algo me pueda suceder? - Preguntó asustada.

Terma la abrazo con fuerzas y tras soltarla tomo unas cuantas monedas de plata y las guardo en una capa que luego le colocó a su hija.

-Sabes que el alquimista es algo testarudo - le menciono con una pequeña sonrisa - Si se niega a seguirte muéstrale las monedas pero no se las des hasta que acepte acompañarte.

Yelica asintió tras las indicaciones de su madre.

-Te esperare justo acá mi amor - le añadió conteniendo el llanto.

Terma presentía que algo sucedería, sentiría mas calma si Yelica se alejaba mas de esas tierras, sabía que conocía bien el norte y sería un lugar donde no la encontrarían.

Con miedo Yelica se encaminó al bosque del norte.

Junto a sus padres habían estudiado mucho aquellas tierras y conocían bien los lugares seguros, si obedecía a su madre y seguía las instrucciones sabia que nada malo le pasaría.

Artus se encontraba en medio del mercado central y pudo notar rápidamente la conmoción de los soldados del congreso. Corrían de un lado al otro y el ambiente estaba tenso, debía encontrar información sobre lo ocurrido para saber que decisión tomar respecto al joven elemental.

***

La Reina Martha convocó una reunión privada entre los Reyes, debía informarles lo que acechaba su mente.

Libro 2 - Los Elementales - ♨El secreto de los espíritus❄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora