Cicatrices

XV

      Ya era jueves por la mañana, el otoño traía un clima realmente agradable. Estaba algo fresco, el cielo estaba gris y amenazaba con romper en llanto en cualquier momento.

      Law se encontraba sentado en la cafetería, hablando con Vivi. Desde que la conoció en la librería, había estado hablando ocasionalmente con ella.

-Vivi-ya, desde que llegaste al instituto tienes cientos de miradas sobre ti - rió Law.

-Oh, sí, bueno, no lo he notado - sonrió la chica en cuestión.

-¿Ya has hecho algún amigo?

-Hmm.. No en verdad. No soy muy amistosa.

-La profesora Hancock preguntó por ti, no has asistido a ninguna de sus clases.

-Oh, dile que no se lo tome personal, he estado faltando a muchas asignaturas desde que llegué - rió la rubia.

-Se lo dices tú, tenemos ahora con ella.

-Oh - rió la chica - qué pena, el destino no querrá que la conozca o algo, tengo chequeos médicos ahora - suspiró.

-¿Médicos? ¿De qué tipo? - preguntó Law curioso

-Confío en ti, no me decepciones. - dijo Vivi mirándolo a los ojos, seria, para luego seguir - son ginecológicos. He estado faltando mucho por eso mismo... Cometí el error de acostarme con un idiota y... - miró al suelo.

-Oh, lo siento mucho. - hizo una pausa, para luego preguntar con duda - ¿De cuántos meses estás?

-¿Qué? Oh, no. Me tomé la pastilla de emergencia, no te preocupes. - rió amargamente.

-Oh, ¿Entonces es una ETS? Realmente lo siento, yo - habló Law torpemente, se sentía avergonzado.

-Sí. Es mejor que un niño al menos - suspiró. - Bueno, dejemos este tema tan triste, ¿Por qué no estás con tu amigo de siempre? - sonrió Vivi

-Oh, sobre él... No lo sé, ha estado actuando raro desde que llegó. - suspiró molesto Law. - Realmente no sé qué le pasa a ese idiota.

      Entonces, vio pasar a cierto pelirrojo por el pasillo, seguido de un chico rubio y otro con un peinado extraño, nunca los había visto. Detrás de todos vio al director. <Ese imbécil... Ya está causando problemas> pensó para sí mismo.

      Dejó a Vivi para acercarse a la sala del director, pero fue interrumpido por Nami.

-¡Torao! Oye, espera. - lo detuvo la pelinaranja

-¿Qué quieres, Nami-ya? - suspiró el moreno.

-Es que no he sabido nada de Sanji y me preguntaba...

-No lo sé. - alzó los hombros. Ahora que lo pensaba, no había visto ni a Zoro ni a Sanji en todo el día. Había estado en otro mundo desde que Kid comenzó a actuar extraño cuando llegaron al colegio.

-¡Torao! ¡Hace tiempo no te veía! - escuchó la voz chilona de Luffy correr hacia él.

-Esa es la idea - suspiró el azabache. -¿Y su amigo de nariz larga? - preguntó al percatarse de su ausencia.

-¿No te enteraste? El martes apareció el cuerpo del amor de su vida, Kaya, en la comisaría.

-Oh, ahora que lo mencionas... - recordó a Corazón increpando a Doflamingo porque alguien había muerto.

      Luego recordó las palabras de Shanks "sospechamos que el asesino puede ser un estudiante", eso le heló la sangre.

-¡Y puedes creer que la policía no le da el cuerpo a la familia! Se supone que está en una investigación... - contaba Nami angustiada.