40 ¿Eres ciego o tonto?

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Chen Yu no asintió ni negó con la cabeza, ¿qué importaba eso ahora?

"¿Por qué no me lo dijiste antes?" La voz del rey estaba cargada de enojo.

¿Por qué?

Chen Yu sonrió miserablemente, ¿cómo se atrevería a decirle al rey?

"Porque no crees en este rey." El rey le preguntó. "Si no crees en mí, te perdono. Si no crees que me gustes tanto, no se me ocurre que más hacer para que lo entiendas."

Chen Yu se sentía amargo desde la boca hasta su corazón, ¿cómo se atrevería a tener tal lujo?

Sus manos estaban apoyadas en la nieve, las heladas habían llegado a la región del norte antes de lo esperado y durante el severo invierno, las orejas y los dedos podían congelarse. Sus extremidades estaban congeladas y entumidas, cualquier movimiento se sentía como miles de agujas.

"¿Por qué piensas que lo que le gusta a este rey es el disfraz de mujer que llevas puesto? ¿Crees que este rey te ama por la identidad que usas?"

¿No... era así?

"Dormimos en la misma cama por tantos días, ¿piensas que este rey es ciego o tonto?"

Con el sonido de ropas moviéndose, el rey cubrió a Chen Yu con sus pieles, sintiendo como el calor del cuerpo del rey lo envolvía.

Chen Yu estaba sorprendido, levantó la cabeza y se quedó congelado.

El rey lo cubrió con su propio cuerpo, sus enormes manos lo envolvieron, cubriendo su cuerpo expuesto, de manera que el aire y el viento helado no lo siguieran invadiendo.

¿Por qué?

¿Por qué lo trataba de esa manera? La mente de Chen Yu estaba llena de confusión por el calor, ¿no debería matarlo para desahogar su enojo?

Incluso la princesa que estaba parada a un lado, estaba sorprendida y sin habla, y tardó un rato en reaccionar.

"¡Su Alteza!" La princesa gritó con ansias. "¡Es un hombre! ¡Es un esclavo inferior! Has sido engañado por tanto tiempo, ¿no lo vas a matar?"

"Engañarme, ¿quién podría mentirme a mí? De hecho, si no fuera por ti, este rey no sabría aún por que últimamente se había resistido a mí."

La voz del rey era tranquila, pero también era extrañamente baja, como un lago sin olas y la muerte estaba escondida debajo de esa agua profunda.

La princesa seguía intentando convencerlo. "Él..."

"¡Cállate!"

El rey se enojó inmediatamente y la princesa sintió que su corazón se hundía.

"Dairou, ¿de verdad crees que este rey no se atreve a hacer algo contra ti? Este rey tolera que seas arrogante y orgullosa en el palacio. ¿Cuántas personas han sido asesinadas por este rey? Nunca me has importado, solamente tengo consideración por tu hermano. Él y este rey somos hermanos del campo de batalla y, ahora, ¡haz agotado la paciencia de este venerable rey!"

La princesa estaba tan aturdida que solamente contestó con voz ronca. "Es sólo que te amo muchísimo."

"¡Suficiente!" No quería escuchar sus excusas. "De hoy en adelante, la princesa tiene prohibido poner un píe fuera de la Residencia Liqing. Cuando llegue tu hermano, deja que te lleve de regreso a la capital."

"¡No!"

La princesa se abalanzó y abrazó al rey. "Su Alteza, ¿vas a dejarme? ¡No me iré, quiero quedarme contigo!"

El rey le torció la mano. "¡Regresa a la Residencia Liqing!"

"¡Mi Señor! ¡Soy la Princesa Imperial! ¡Con que cara vivirás después de divorciarte de tu esposa! ¡Daría lo mismo que me mataras! Su Alteza."

El rey la ignoró. Perdonarle la vida, era en sí la mayor bondad que le podría demostrar a su hermano.

El rey se inclinó y levantó a Chen Yu con gentileza, viendo como lo miraba lleno de incredulidad.

"Jade tonto, crees que le gustas al rey por todas esas cosas exteriores, ¿por eso quería hacerte la segunda concubina?" El rey estaba enojado y angustiado. "Este Rey se regocija contigo, sólo porque eres el Yu-er de este rey."

El Amante Mudo (Parte 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora