Ariadna, ¿Qué Hiciste?

Capítulo 15

Narra Ariadna

Tiré el celular contra la cama.

"Te han etiquetado en un vídeo" era la notificación que me llegaba todo el rato.

Tobías y yo cantando la canción, hablando y acercándonos para darnos ese "beso" que nunca surgió era el video trending topic en twitter.

Me quiero morir. — Dije en alto y me lancé boca arriba en mi cama.

Todo me pasaba a mí.

Necesitaba aire en estos momentos. Lo más probable es que al salir por la puerta de mi habitación me encontrara a Tobías intentando hablar conmigo y en la puerta de detrás de él, a mi hermano con su sonrisa mientras escuchaba nuestra conversación, por lo que necesitaba aire con urgencia.

Si intentaba marcharme de casa lo más probable es que John apareciera para interrogarme y recordarme que estaba en peligro.

Ya sé que estoy en peligro, pero cuanto más me quede bajo su mismo techo más rápido dejaré de odiarle.

Sus cosas estaban por todos lados, solía cocinar él, sin camiseta, un dato importante. Se turnaba para pasar la aspiradora, hacía ejercicio en el jardín, incluso su perfume se comenzó a quedar en el sofá. Su champú estaba al lado del mío y más de una vez me había confundido al no verlo bien y terminaba oliendo mi pelo como el suyo durante días y días. Entraba a la habitación de mi hermano y su olor me inundaba por completo.

No había ni un solo lugar en esta casa donde no hubiera una parte de Tobías.

Miré al techo durante una eternidad hasta que se me ocurrió una solución.

Lo siento, Ari. Hoy hay una fiesta en casa de Vane, ya sabes a lo que me refiero. —me hablaba Bianca desde el otro lado.

Estuve en silencio un rato.

Diles que también voy. —dije.

¿Qué? No, no, no y mil veces no. —me gritó. —Tu tío sale mañana y quieres irte de fiesta. Quien te entendiera.

Por favor, Bi. —le supliqué. —Necesito salir de esta casa.

Oye, sé que has vivido un momento intenso con Tobías, lo vi en Instagram, pero eso no es una excusa para volver a uno de los lugares donde te has distanciado. No puedes volver a esas fiestas, Ari. —me regañó.

Conecté a Cayetana a la llamada.

Eso no vale. —se quejó Bianca.

¿Qué ocurre mis amores? Estoy haciéndome las uñas. —habló nuestra amiga.

Ariadna quiere venir a la fiesta de esta noche y yo la he dicho que no debería. —dijo primero Bi.

Y yo digo que debería de ir porque os echo de menos y pasar un buen rato con mis amigas es divertido. —sonreí aunque no me vieran.

Y para nada es por Tobías. —terminó Cayetana. —Ya, bueno, no. Problema solucionado, adiós.

¡Cayetana! —grité a la pantalla. —Por favor chicas, quiero ir.

Sabes lo que pasan en esas fiestas. Saben todos quien eres, saben lo que "haces" y en cuanto cruces la puerta de esa casa todos los hombres con patas se acercaran a vos. Luego aceptarás, te pondrás a jugar y acabaras a saber dónde con a saber quién. —habló Caye y Bi la apoyó.

Os prometo que no haré eso. —ambas se rieron.

¿Tan poca fe tenían en mí?

Discutí con ellas toda la tarde hasta que mi hermano me avisó para la cena.