Capítulo #45:

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Misión #13:

Vanessa:

Termino de fregar secándome las manos. No creo que mi padre haya tenido tanto coraje de invitar al imbécil de Antonio a cenar. Esto traerá consecuencias nosotros siempre celebramos su cumpleaños juntos y ahora esto. Lo peor de todo fue el cinismo con el que nos tratamos el rato. Ni siquiera bien probé los alimentos. Esos dos pasaron la velada entra contándose sobre la guerra, misiones complejas y estrategias. Estuve cerca de sacar mi celular para jugar a algo o leer, pero cuando lo traté de hacer mi padre me lanzó esa mirada fulminante la que prefiero borrar de mi cabeza. No deseaba incomodarlo ni nada por el estilo. Juro que al irse Antonio le voy a hacer pedir cuentas a mi padre. Tengo claro que algo sabe jamás en la vida invitaría a alguien a la casa cuando yo estoy a menos que conozca lo más mínimo.

Antonio tampoco se veía confortable en los momentos en que le lanzaba ojeadas asesinas. No es para menos le pedí mantenernos alejados. Cada vez que nos reunimos terminamos besándonos y eso se vuelve incómodo. Puede que él no le vea facilidad al hecho de poder traducir sus papeles por medio de la tecnología, pero yo sí que lo hago y mayormente todo depende de mí así que más le vale entrar por el aro. Seco mis manos con un paño de cocina para después ponerlo sobre la meseta. Ellos fueron a la sala porque mi padre quería mostrarle unas fotos que guardaba de la guerra en Vietnam. Me siento tan molesta que creo que terminaré bebiendo yo el licor que compré. ¡Es que ni he podido darle el regalo! No lo haré delante de alguien que es un completo extraño para ambos.

Sí, estoy enfadada hasta la piel. Esto no se quedará así hablaré con Derek en cuanto el día termine de todas formas tenía pensando quedarme a dormir aquí. Esos dos estarán teniendo la velada más encantadora del universo. Por lo visto no voy a encajar en ningún lugar en la vida. Ya me estoy hartando de la locura. Le pasaré un mensaje al ginecólogo agilizando el proceso de inseminación. Además, los papeles están en mi celular solo me hacen falta sus respuestas en un día terminamos con esto. Lástima que siempre hay un pero que nos impide traducir con tranquilidad. Salgo de la cocina sintiendo las carcajadas de mi padre y de Antonio, no sé para donde iré eso sí aquí no me quedo ni dos segundos más.

Me excusaré con la educación que mi madre me dio, pondré el regalo sobre su cama y cuando termine de reír con su amiguito entonces puede revisarlo. Me pasé horas en el salón de belleza, rato largo escogiendo un presente ideal y soporté las preguntas más embarazosas de Mía Baker para que el energúmeno de mierda que es Antonio Ross lo esté arruinando.

Con los tacones que me han estado matando toda la noche camino hasta la entrada de la casa. No puedo engañar a nadie con mi ceño fruncido. Para mi suerte Alan Mackenzie no es una persona que sea de mostrar fotos de su familia, hablar de mamá le llega demasiado profundo. Hoy es una fecha importante al menos para mí lo era así que no ambiciono martirizarlo sigue siendo mi padre, aunque se haya portado como un completo idiota. La cabeza de Antonio sobresale en el sofá al igual que la de su acompañante. El primero va vestido con un pantalón de mezclilla que ya ha llevado a otros encuentros conmigo a juego con una camisa de gala a cuadros blanco y negros que se le ajusta al cuerpo de modo que bien pudiera decir que es un stripper o algo de eso.

Peinó sus cabellos hacia atrás además de dejar desabotonado el primer cierre de la camiseta. Mi padre por su parte decidió como ya esperaba ir de militar 100% con los zapatos de andar en casa. Mi mamá lo mataría si lo ve, no puedo negar que luce apuesto. Es de familia cuando los Mackenzie nos vestimos de gala somos verdaderos modelos, buenos genes, como él mismo me dice cada vez que me ve elegante. Como la primera vergüenza de la noche que fue celebrar el buen organismo que poseo con este vestido.

─Te dije que podía lavar la vajilla más tarde ─Informa mi padre cuando me siento en otro mueble de la sala bien apartada de Antonio. Sus ojos han estado fijos en el escote bastante tiempo. Es normal que las mire soy mujer y... ¡OK YA NO PIENSO NORMALIZAR NADA MÁS CON ESTE LOCO DE MIERDA!

Mackenzie [✓] EN EDICIÓNWhere stories live. Discover now