De todos los colores, ROJO tenía que ser (Akabane Karma x Oc)

Capítulo 101: Tiempo del error

Pov normal

Con el Festival Deportivo ya finalizado, algo que ninguna clase podía evitar se estaba acercando. El tiempo de descanso y diversión se les había acabado y ahora su concentración debía estar en esto si no querían venirse abajo.

—Muy bien todos, tendremos los exámenes de mitad de segundo semestre en dos semanas— anunció su profesor más entusiasmado que nadie. Y eso era fácil notarlo, no sólo por la sonrisa emocionada acompañada de un leve sonrojo, sino que también se reflejaba en la velocidad a la que hacia clones los cuales en un parpadeo aumentaban en número— ¡Finalmente ha llegado el momento de sobrepasar a la Clase A! ¡Aumentemos la temperatura! ¡Ardamos!— animó a los chicos que estaban concentrados en sus cuadernos pero al mismo tiempo su mente estaba distraída con algo que no eran los temas o las formulas.

Llegados a finales de septiembre, casi rozando octubre y ya siendo habiendo pasado la mitad del segundo semestre todos estaban conscientes de algo. El tiempo límite para asesinar a su profesor disminuía cada vez más y ahora que miraban hacia adelante los 5 meses restantes parecían muy poco tiempo.

Ciertamente la duda, impaciencia y nervios estaban empezando a aparecerse en ellos.

—¡Ahh! Estoy cansado— suspiró Sugino una vez ya había puesto un pie fuera del edificio mientras se estiraba. Ya había llegado la hora de la vuelta a casa y todos estaban saliendo sintiéndose más livianos ahora que no estaban sentados con su cabeza pegada al pupitre.

—Koro-sensei en verdad que usa todos los métodos que se le ocurran para enseñarnos.

—Sí, pero... ¿en verdad está bien?— la pregunta de Yada llamó la atención de varios sus compañeros que voltearon a verle— Quiero decir ¿Deberíamos estar concentrados en nuestros estudios justo ahora? Solo nos quedan 5 meses ¿no es así? ¿No es más importante mejorar nuestras habilidades de asesinato?— ella fue la primera en revelar y soltar en voz alta lo que la mayoría estaba estaba pensando en esos momentos y, aunque no había recibido una respuesta definitiva por parte de nadie, sabía que como compañeros estando en la misma situación estarían pensando algo parecido.

—... No podemos hacer nada. Si no nos ocupamos de nuestros estudios, ese pulpo no se mostrara más— respondió Yoshida algo inseguro.

—Fufufu~ no se preocupen mucho por eso chicos— para sorpresa de todos, quien había roto el pesado silencio con un consuelo había sido nada más ni nada menos que Okajima, quien parecía muy confiado por alguna extraña razón— Dejenmelo a mi. Se me ocurrió una pequeña y genial idea.

Y con esa declaración, todos siguieron un poco desconfiados a su amigo rapado. Su nombre junto con las palabras "genial idea" por lo general no solían ir juntos en una oración pero no perdían nada con seguirle y saciar su curiosidad.

No tardaron más de 5 minutos en llegar al destino que el rapado les llevaba el cual se encontraba en la parte trasera de la montaña. Casi llegando al pie de esta, podían ver los edificios del vecindario casi estando a la altura del techo de ellos. En el pie claramente tenía una cerca que delimitaba el territorio de la montaña sin embargo no era tan alta como para llegar a igualar la altura de los edificios cercanos.

—¿Qué es aquí...?— preguntó Fuwa al ver como su compañero saltaba desde la montaña hasta el techo del edificio que tenía en frente sin ningún problema.

—Exploré una increíble ruta hacia la escuela— comenzó a explicar Okajima con una sonrisa emocionada— Si usamos el freerunning para movernos a través de los edificios desde aquí, podremos llegar a la siguiente estación de tren sin que necesariamente toquemos el suelo— las miradas de los chicos vacilaban entre inseguros y curiosas. Algunos se les notaba más la duda en el rostro mientras que otros de tan solo escuchar la idea sonrieron interesados— Podemos entrenar tan solo yendo a casa. Sigamos este camino desde hoy.