NANKURUNAISA

ㅇ-13

Recuerdo haber llegado exaltado, haberme pasado cemaforos en rojo, recuerdo casi atropellar a alguien, recuerdo avanzar sin detenerme. Y gritar, necesito verlo, necesito besarlo, necesito decirle lo mucho que lo amo, las veces que se lo dije no parecen ser suficientes ahora.

Cuando llegué alterado, las enfermeras tratan de tranquilizarme en la búsqueda de mi esposo, entonces me dicen que él está siento atendido, está delicado y que necesito ser fuerte.¡No puedo ser fuerte en una situación como esta! No quiero pensar lo peor, no, él no es débil, el saldrá de esto.

-Conducía su auto cuando fue interceptado por una camioneta que iba a exceso de velocidad, al parecer el conductor estaba ebrio porque se encontró botellas abiertas, él se dio a la fuga y la policía esta tratando de localizarlo.- me explicaba la enfermera.- llamaron inmediatamente a una ambulancia, tenía una fuerte contusión en la cabeza y había perdido la conciencia por el golpe, necesitó una vía para suministrarle sangre, por suerte su esposo llevaba consigo en su cartera la identificación y el tipo de sangre. Ahora mismo le están realizando una operación, tenía un brazo fracturado y raspones leves en el rostro y otras partes del cuerpo. Al parecer ningún otro órgano salió lesionado, llevaba el cinturón de seguridad, eso fue lo que salvó su vida, pero el movimiento fue tan brusco que hizo que su cabeza se estrellara contra algo en el auto que desconocemos. Su estado es crítico.

No quería seguir escuchando, no mientras mi corazón se rompía. ¿Por qué no pude protegerle? ¿Por qué no estuve ahí cuando me necesitó? ¿Por qué no estuve en su lugar?. Me culpaba de todo.

Cuando llegaron Mark y los otros me abrazaron y trataron de consolarme, pero yo me rompí, estaba roto, hecho añicos. Lloré, lloré con todas mis fuerzas porque estaba tan malditamente asustado de perderlo. Ellos decían "Él estará bien" pero yo no podía escucharlos, quería estar ahí, con el amor de mi vida. No me hagas esto, Tae, no porfavor. Entonces recé con todas mis fuerzas, aunque no era tan devoto, pedí que no me lo quitara, que haría todo, todo por tenerlo en mi vida, le entregaba mi Alma, lo que sea, pero esperaba que él se quedara conmigo. Recé entre lágrimas pidiendo a Dios que me escuchara, que no me importaba lo que pase conmigo mientras él estuviera con vida y pareció escuchar.

-Él salió de la operación, lo mantenemos estable, pero el golpe fue demasiado intenso. Lamento decirle que entró en estado de coma, no sabemos cuándo despierte.

No pude hablar, me quedé petrificado ahí, sin poder decir algo útil. Mis amigos hablaron por mí cuando vieron que yo no estaba más que perdido en mi mundo, no podía. Luego fueron horas y charlas intensas, sufrimiento y desesperación. Pasaron unos días antes de que me permitieran verlo.

Siguieron pasando las semanas y él seguía ahí dormido, recuperándose lentamente de sus heridas, yo le decía, aunque quizá no me escuchaba, que estaba hermoso, incluso si tenía un par de cicatrices, él siempre sería lo más hermoso para mí. Traté de no llorar, a veces no podía evitarlo, le rogaba que despertara y que me dijera que no se iba a ningún lado, que siempre estaría para mí.

-Me prometiste que siempre ibas a regresar a mí, sin importar cuánto tiempo de tome, vuelve a mi por favor.

Fue a mediados de febrero que recibí la llamada del hospital mientras estaba verificando que las pinturas del taller no se llenaran de polvo.

-Despertó.- joder, esa fue la noticia más feliz que había recibido jamás. Cuando me di cuenta yo estaba todo desesperado abriendo la puerta de la habitación del hospital en la que él estaba.

Lo miré y el me miró. Parecía un poco confundido. Quería lanzarme a sus brazos y decirle lo mucho que lo había extrañado durante esos meses que estuvo aquí. Pero el lugar parecía sombrío. Cuando intente acercarme el doctor me detuvo. Pero yo no hice caso, me acerqué de todos modos.

-¿Tae?.-dije con mi voz rota y llena de felicidad de verlo despierto, con sus hermoso ojos mirándome. Y cuando apenas dijo.

-¿Q-ué? ¿Quién soy?.-él miro al médico y a mí confundido y yo supuse que era normal que no recordara, que era algo pasajero, entonces el médico me pidió hablar a solas.

-Señor Jeon.- después de todo lo que había pasado yo ya tenía una idea de lo que venía, sabía por el tono de voz que no eran cosas buenas. Pero me dije que pase lo que pase sería fuerte.- Le realizamos una Tomografía Computarizada y comprobamos que un área del cerebro que es importante para la memoria resultó bastante afectada. No sabemos hasta dónde podrá recordar o si realmente lo ha olvidado todo, el cerebro es demasiado complicado y lo único que podemos hacer ahora es monitorizar su avance y observar si luego de un tiempo pueda recordar algo. Sin embargo, hay veces en que los pacientes no vuelven a recordar nada de su pasado o lo hacen a largo plazo. Le recomendamos que luego del alta hospitalaria, este usted pendiente de que realice la misma rutina diaria de su vida. También vamos a recomendarle que asista con nuestros profesionales que tratarán de ayudarle con su pérdida de memoria.

Esta bien, me dije, aunque me dolía. No perdería mis esperanzas. Yo haré todo los posible para ser una persona optimista. Lo importante es que el estaba con vida. Estaba despierto. Él mejoraría, yo estaría a su lado, pase lo que pase. Si era posible crearía nuevos recuerdos junto a él. Trabajaría noche y día para recuperarlo, lo enamoraría de nuevo. Ahora mismo quería decirle lo mucho que lo amo y que saldríamos de esta juntos, como siempre, pero tenía claro que el no podía recordarme, esperaba que lo hiciera en su debido momento. Yo esperaría, esperaría todo lo necesario, porque el era el amor de mi vida. No me importaba perderlo todo si lo tenía a él conmigo.

Entonces suspiré y avancé hacia él, quería alcanzarlo de nuevo.