NANKURUNAISA

ㄷ-3

Saltos en el tiempo

Mi hermano y yo siempre fuimos muy unidos, la verdad son pocas las veces en las que estábamos en desacuerdo o peleábamos, él era cariñoso conmigo y me cuidaba mucho. Nuestros padres trabajaban bastante y casi no los veníamos, pero cuando estaban en casa todo estaba bien, nos llevábamos genial. Fue cuando yo tenía cinco años cuando lo conocí. Cuando mi hermano entró al último nivel de primaria.

Las ventanas de la casa están abiertas y dejan entrar una ligera brisa, el olor hogareño entra en mi nariz y hace que me acostumbre al ambiente, es cálido y reconfortante para mi corazón, me hace sentir tranquilo, mantengo mi cabeza fuera de la ventana de mi habitación mientras cierro los ojos y dejo que la brisa golpee mi rostro.

Cuando llega la hora de la cena, mamá me pide que lave mis manos antes de comer.

-Hoy en la escuela se presentó un nuevo estudiante, dijo que venía de Busan, tuvo que sentarse conmigo porque era el único con un asiento vacío a lado. Pensé que era callado, pero al parecer no lo es. Habla mucho y es divertido, la verdad me ha caído muy bien. -habló Mark durante la cena, mi hermano solía ser muy parlanchín a diferencia de mí, yo era demasiado tímido. -Se llama Kim Taehyung y es mi nuevo compañero. ¿No es genial?

-Claro hijo, es bueno que lo integres, es duro venir a un lugar nuevo, sólo trata de no asustarlo mucho. - dice mi padre de manera comprensiva y jocosa.

- ¡No haría eso! -reclamó mi hermano alegre, mamá comentó que la ascendieron en el trabajo y papá dijo que deberíamos salir a celebrar. Yo estaba bien con eso, me gustaba nuestra pequeña vida sencilla y familiar.

Una semana después mi hermano trajo a su nuevo amigo a casa, Taehyung tenía 10 años al igual que Mark, y era realmente muy extraño, hablaba mucho y me ponía nervioso cuando intentaba conversar conmigo. Me escondía detrás de mi hermano tratando de que no me alcanzara a ver, siempre me preguntaba cosas raras. "¿Crees en los extraterrestres Kookie?", "¿Qué harías si existiesen los Zoombies?", yo no entendía nada de eso. No sabía que eran los extraterrestres o si los zoombies comían cerebros. Me asustaban sus charlas a veces, y trataba de mantenerme muy alejado de él cuándo veía su cara sonriente, pero era imposible, era demasiado insistente.

-Mark. - dije entrando un día al cuarto de mi hermano, este estaba sentado en el escritorio haciendo la tarea. Alzó a verme y me pidió que me acercara.

- ¿Que pasó Kookie? -dijo prestándome atención.

- ¿Tu amigo Taehyung es algún monstruo con cuerpo de humano? - pensaba que él quería hacerme algo debido a las cosas que preguntaba, constantemente me cuestionaba que si me gustan los chocolates y luego cambiaba y decía algo de los zoombies que comen cerebro ¿está tratando de endulzarme para luego comerme? Tengo miedo, no pude evitar que mis ojos se aguaran, de verdad estaba asustado. Pero Mark se río mucho, incluso lloró de la risa, él se estaba burlando y yo estaba hablando en serio. Entonces me enojé y le grité que dejara de reír.

-Lo siento, lo siento. -dijo secándose las lágrimas y trabado de ponerse serio. - no es eso, solamente quiere llevarse bien contigo, es su forma de ser, aunque sea extraño, es sólo que no sabe cómo llevarse contigo porque eres muy tímido así que pregunta eso para sacar conversación, no te preocupes.

- ¿Por qué quiere llevarse bien conmigo? -pregunté despacio sin entender bien al extraño muchacho.

-Porque eres mi hermano y eres adorable.

Entonces Taehyung empezó a ser una constante en mi vida. Él y mi hermano eran bastante unidos, a veces pensaba que eran más hermanos ellos dos que yo con Mark. Me sentía celoso, pero Tae siempre me incluía en todo, así que dejé los celos tontos con el paso del tiempo.

Años después entré a la escuela, mi hermano y Tae estaban en el colegio a unas cuadras, así que siempre pasaban por mi cuando terminaba la jornada. Yo seguía siendo muy tímido y casi no tenía amigos, me costaba mucho y era bastante llorón, empezaron a molestarme por eso, ni si quiera era bueno defendiéndome, a veces estaba aterrado de ir a la escuela y que empezaran a molestarme otra vez.

Era viernes y la campana de salida sonó, recogí mis cosas y salí del aula despidiéndome de la maestra. Siempre esperaba sentado cerca de la pileta, era el lugar más cercano a la entrada. Cuando Choi, mi compañero, se acercó, me sentí nervioso, últimamente él me hacía llorar mucho con sus burlas, me hace sentir incómodo y dolido.

-Hola, lloroncito. - dijo parándose frente de mí y tratando de llamar mi atención, lo ignoré. No quería hablarle, seguramente empezaría a molestar. - mi padre dice que los niños que lloran son unos maricas. - mis ojos se empañaron, yo no sabía cómo defenderme o detenerlo, ni siquiera sabía muy bien que significaban sus insultos, pero entendía que no eran nada buenos. - Eres marica ¿cierto? - seguía burlándose incluso otros niños empezaron a corear con él que yo era eso que decía. Yo estaba llorando tapando mis ojos con mis manos para que no se notara, hasta que Choi me sujetó de la muñeca con fuerza e intentó lanzarme al suelo, pero no alcanzo hacerlo porque alguien lo había empujado y ahora era él quien miraba desde el suelo. Para mi sorpresa mi defensor era Taehyung, muy enojado y viendo a mi compañero con cara de pocos amigos.

-Si lo vuelves a tocar o hacerlo llorar lo pagarás muy caro, no me importará que seas un mocoso. - jamás le había visto enojado ¿era el mismo Tae adorable y amistoso? Los niños que me molestaban salieron corriendo y yo me quedé ahí, tenía siente años cuando me di cuenta que Tae era increíble y era mi héroe. Entonces nos volvimos más unidos que antes. Me abrí ante él, mostrándole confianza y dejando mi timidez a un lado en su compañía, él se convirtió en mi lugar seguro.

Taehyung solía ser muy cariñoso conmigo y casi siempre intentaba darme dulces. Mark le regañaba diciendo que por su culpa tuvieron que calzarme un diente. Decía que Tae era demasiado blando conmigo y me tenía demasiado consentido y eso sería un problema a futuro si yo me volvía un niño mimando por su culpa, él no era así con los demás o eso era lo que decía mi hermano, pero para mí, Tae siempre fue un chico amable con las personas en general.

Era diciembre y hacía mucho frío, habíamos quedado en ir a jugar con la nieve pero me resfrié. De verdad quería ir, mis padres estaban de viaje, deberían haber llegado pero tuvieron que quedarse en otro país debido a la tormenta de nieve. Así que quedé al cuidado de mi hermano. Él sabía cómo hacerlo, además era una simple gripe, yo tenía ya doce años y ellos cumplían diecisiete.

Me dolía mucho el cuerpo y tenía fiebre, el medicamente que me dieron seguramente me mandaría a dormir durante mucho tiempo luego de unas horas, nuestro médico familiar había dejado las indicaciones a mi hermano. Tae se había quedado también a cuidarme, él siempre se preocupaba por mí, se los agradecía a ambos, por estar a mi lado.

- ¿Tienes sed Kookie? ¿Necesitas algo? - era de noche, no sé que hora, pero todo estaba oscuro, quizá sea de madrugada, no sabía porque él estaba despierto todavía.

-Hyung. - dije a penitas, mi garganta dolía. - deberías irte a dormir, no es necesario que estés pendiente a todas horas. Estaré bien.

-Me preocupo por ti-se acercó a la cama y se sentó al pie de esta. La oscuridad no me dejaba verlo bien. Últimamente me gustaba verlo mucho. Yo no entendía la razón de aquello. Pero, Tae era muy bonito.

-No deberías estar aquí, te podrías enfermar. -tosí un poco. - No quiero que enfermes por mi culpa.

-Tranquilo, estaré bien. - yo tenía mucho frío y estaba temblando. Incluso si habían muchas cobijas y al parecer él se dio cuenta. No sé cómo pasó, pero él estaba abrazándome y yo estaba recostado mi cabeza en su brazo. Tae siempre olía tan bien. Tengo fuertes palpitaciones ahora mismo y no sé si esto es normal, sin embargo, no puedo entender esta situación, soy a penas un niño.

-Dormiré contigo para que no tengas tanto frío. -dice Tae despacito y yo me quedé dormido pensando que él era muy cálido.