NANKURUNAISA

ㅐ-9

El tiempo pasaba muy rápido, tenía diecinueve años ahora, había ingresado a la Univeraidad de Arte de mi propia cuidad, así era todo fácil, no debía viajar muy lejos, me quedaba cerca y había sacado licencia de conducir que hacía mejor las cosas. Hace unos meses me había cogido una especie de melancolía que me hacía extrañarlo y pensarlo a cada segundo, dudaba mucho en poder superarlo. Mark dejó de hablar de él también en casa, evadió siempre las preguntas de mis padres acerca de él, siempre decía "El está ocupado terminando la universidad y haciéndose cargo de la empresa, ni siquiera lo veo mucho". Sabía que ellos todavía seguían siendo los mejores amigos, y quizá sabía la razón por la que dejó de venir y por la cual Mark no quiere hablarnos de él. Quise dejar de hacerme preguntas estupidas como: ¿Estarán juntos? ¿Mark le correspondió? ¿Por qué se acostó conmigo si era a él a quien amaba?. Y un millón de cosas que no tenían respuesta para mí. Con el pasar de los días dejé de cuestionarme todo y empecé a distraerme en otras cosas, me hice mejor pintor y todas mis obras estaban siendo bastante reconocidas, la gente empezaba a cuestionarse ¿Quien era el creador? Y yo no sabía si era buena idea salir del anonimato, siempre me gustó la vida tranquila y no sabía si al darme a conocer la gente empezaría a acosarme o algo, estaba un poco temeroso de eso. Jimin decía que ya era tiempo de decirle a la gente quien era yo. Vendí muchas de mis pinturas, casi siempre se vendían todas y ese dinero lo utilizaba para pagar la universidad, incluso me compré mi auto. Jimin también ingresó a la misma universidad a estudiar baile. Mis demás amigos también estaban haciendo algo con sus vidas pero nos manteníamos en contacto. Recientemente supe que a Yoongi lo contrataron como compositor en una empresa bastante reconocida y trabajado junto a Namjoon. Jin estaba incursionando en la actuación y también seguía gastronomía y Hoseok también era instructor de baile de algunos Idols famaosos.

Cuando terminé mi segundo semestre decidí dar la cara ante la prensa, todo esto estaba alborotado a la gente, fue como algo novedoso. Cuando se llevó a cabo la gente decía que era demasiado joven y nuevamente me llamaban un prodigio, al principio habían reporteros tratando de saber algo de mi vida y empecé a tener fans. Luego todo se volvió tranquilo y llevadero a decir verdad.

-¡Deberías salir con alguien! ¡Se te va a pasar el tren!.- decía Hoseok mientras estábamos conversando, habíamos hecho una reunión de amigos, salimos a comer y pasar el rato.

-Al menos deberías intentarlo.- le apoyó Namjoon mientras dejaba un dulce beso en la cabeza de Jin. Sentí un poco de envidia.

-Quiza no, ya sabes, la vida de soltero a veces es un lujo.- respondió Yoongi pasando un brazo sobre mis hombros de manera amistosa.

-¿Qué dijiste?.- le retó Jimin un poco molesto, Yoongi lo besó diciendo que era broma y todos reímos.

Fue una buena noche de amigos, con el tiempo decidí dejar de esperarlo. Quería continuar con mi vida, me dije que era mejor conocer nueva gente, quizá enamorarme de alguien más, al menos intentarlo. Fue cuando iba a cumplir veintiún años cuando conocí a Minho, él era agradable y una buena persona, sabía que yo le gustaba, me lo había dicho un par se veces, pero mi corazón y mente siempre estaban en otra persona. Estaba tan enojado conmigo mismo, ¿por qué no puedo avanzar?. Entonces después de un par de citas el se me declaró y yo dije que sí. Hoseok me mandó a la mierda cuando supo que yo no lo quería, así que le dije que quizá con el tiempo. Yoongi dijo que no era sano para mí ni para él, pero si yo creía que era la mejor forma de continuar él me apoyaba. Todos estaban apoyándome nuevamente. Y yo no quería que me vieran mal otra vez.

Con los meses sentía que podía llegar a quererlo, a Minho, me sentía bien a su lado y todos parecían dar el visto bueno, también creía que estaba mejorando. A penas nos habíamos besado, por alguna razón yo no podía avanzar más que eso, pero estaba bien, estaba saliendo del hoyo poco a poco, me sentía feliz por eso. Él era bastante comprensivo también.