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Me había convertido en un pintor bastante reconocido y Tae un empresario exitoso. Todo estaba bien. Tenia veintitrés ahora y Taehyung veintiocho, aunque él era mayor siempre fue el más infantil de los dos. Decidimos mudarnos juntos hace unos meses, adoptamos un perrito y él lo llamó Yeotan.

Nos casamos hace un año atrás, aunque todo parecía muy apresurado, es como ambos lo quisimos. Hicimos mucho planes juntos, yo lo seguía amando cada día más. Jamás podría amar a alguien como lo amo a él, entregué mi vida a Tae, y él sabía que yo le pertenecía, casarnos solo hizo más legal las cosas, no era necesario para confirmar nuestro amor, pero quise complacerlo cuando me dijo que quería que yo fuera suyo por la eternidad. Él no necesita hacer nada para tenerme de esa manera, yo ya le pertenecía desde hace mucho tiempo atrás, de todas las maneras posibles, era absolutamente suyo.

Decidí comprar un pequeño lugar para poder trabajar en mis pinturas, propuse que sería un lugar abierto a las visitas, coloqué algunos cuadros hechos por mí, y tenía mi propio espacio secreto para seguir pintando. La pintura más preciosa para mí estaba en la mitad de todo, el hermoso retrato de mi amado esposo, era una motivación tenerlo ahí, todos podrían apreciar lo hermoso que él era. Tae solía venir casi siempre, me abrazaba por detrás y me veía pintar en silencio, a veces hacíamos el amor en un pequeño mueble que había puesto en el lugar. Amaba que hiciera eso, que me abracé y me susurre lo mucho que me extraña y lo mucho que me ama. Decía lo orgulloso que estaba de haberse casado conmigo, lo mucho que me amaría por la eternidad.

A veces se quedaba dormido en el sillón esperando a que acabe mi trabajo, él casi no pasaba en la empresa porque tenía gente competente que se podría hacer cargo sin que él este constantemente ahí.

Su padre había fallecido hace un tiempo atrás, él estaba muy triste, estuve a su lado todo el tiempo, incluso dejé el trabajo de lado para estar con él, era su única familia, la madre de Tae había muerto cuando era un niño, la familia de su padre y su madre no querían ver a sus hijos debido a que no deseaban que ellos estuvieran juntos, hací que al final sólo eran su Padre y él, nadie más, entonces me convertí en su familia y él estaba bien con eso, mientras yo este presente él siempre sería feliz, él lo sabía.

-Entonces Mark decidió casarse en la playa, así que hoy iremos a resolver y averiguar algunas cosas.-me decía mientras nos abrazábamos en el sillón de mi taller, yo le daba besitos en su nariz, consintiendole, era mi niño consentido y mimado.

-Pero trata de volver pronto a casa, sabes que odio llegar y no verte ahí, te amo tanto que no puedo existir si tú no estás a mi lado.-le dije despacito.

-Te dijera que estas exagerando pero sé que no es así porque yo tampoco puedo vivir sin ti.

-Mejor quédate aquí conmigo, por siempre, no vayas a ningún lado.- le dije besando su frente y oliendo su cabello, el siempre tenía una fragancia que me encantaba.- Quiero tener a mi esposo a mi lado por siempre.- Juntamos nuestras manos que tenían puesto el anillo de compromiso. Cada uno tenía escrito en el interior. "Te amaré por siempre". La verdad es que era lo correcto.

-Sabes que no puedo quedarme, amor. Aunque quiera, tengo que ir, pero te tendré presente en todo lo que queda del día.- respondió basándome dulcemente.- Te amo tanto, Esposito, soy tan feliz.












Jamás me había arrepentido de haberlo dejado ir. Debí sostenerlo por siempre.

-¿Usted es el señor Jeon JungKook?.

-¿Si? ¿Qué pasó?

-El señor Jeon Taehyung tuvo un accidente y está en cuidado intensivos.















Mi mundo cayó de nuevo y no sé si podré levantarme esta vez.



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Me inspiré en una película que amo demasiado ¿adivinen cuál es?

NANKURUNAISA Where stories live. Discover now