|Prohibido| Tony Stark / Iron Man y tú

124. |La decisión correcta|

-Gracias Steve-. Le respondí y no dudé un segundo en precipitarme fuera de ahí para ir a donde se encontraba el doctor, tenía que saber que había decidido con respecto a la gema.

Llegué al lugar donde Strange había decidido alejarse, era una terraza en el ala oeste del complejo y ahí estaba luciendo completamente apacible mientras que yo era un manojo de nervios ¿y si decía que no?, nos quedaría nada más esperar a que llegara Thanos a quitarnos todas las gemas que amablemente ahora habíamos reunido en un solo planeta para él.

-Doctor-. Llamé su atención acercándome -Steve dijo que quería hablarme-. Agregué y él asintió e hizo señas de que me sentara a su lado -¿Ya sabe en que posible escenario muere menos gente?-. Pregunté sin poder aguantarme las dudas.

-Algo así...-. Respondió aún pensando. ¡¿Algo así?! se supone que tenía que saber estas cosas, un algo así no era suficiente y estaba a punto de gritárselo al hombre que me tenía los nervios de punta pero me contuve cuando siguió hablando -Hay una posibilidad donde mueren miles... hay otra donde no te doy la gema y solo se pierde una vida-. Comentó con mirada sombría y con algo de incertidumbre, nunca había visto a este tal Thanos pero si lo que iba a hacer infringía tanto pesar en alguien como Strange creo que lo mejor era estar aterrados de lo que nos esperaba.

-Pues una comparada con miles...-. Dije sin comprender la duda cuando parecía haber una decisión clara en él, algo me decia que eso no era lo peor.

-Si esa sola persona pudiera proteger al mundo de muchas otras cosas en el futuro ¿que tanto vale entonces?-. Preguntó confundiéndome aunque no me gustaba hacia donde iba ésto, lo único que podía pasar por mi mente era uno de nosotros, nosotros, ahora extrañamente yo incluída, éramos los que técnicamente estábamos protegiendo a la humanidad en este momento.

-Strange... ¿Por qué quería hablar solo conmigo?-. Pregunté pensando entonces que esa vida tal vez podría ser la mía solamente, en ese caso...sacrificarme a cambio de que el resto estuviera bien... -Si soy yo la persona que...-. Iba a decir pero él negó con la cabeza.

-No eres tú-. Aseguró mirándome a los ojos y el terror me llenó por completo en ese momento al pensar en la otra posibilidad.

-No...-. Le dije con la voz temblorosa aunque no estaba segura de que estuviera diciendo lo que yo creía que era y sin pensarlo simplemente puse mi mano en su rostro y accedí a sus recuerdos para ver lo que él había visto.

.....

Destrucción... caos... mis ojos parecían estar presenciando un mundo post apocalíptico y la escena de lo que a simple vista era un campo de batalla, cenizas y escombros rodeaban todo el lugar mientras un silencio sepulcral le daba un aire tenebroso, comencé a ver rostros, personas heridas, voces distantes pero entonces mis ojos se centraron en alguien en el suelo, a un lado recostado de una pila de cosas...

Mi corazón se detuvo y sentí un vacío en el estómago como nunca antes lo había sentido al ver el cuerpo de Tony ahí en su último aliento en medio de los brazos de lo que era mi posible futuro... se había sacrificado por todos, después de todo este tiempo y ahora batallaba siquiera para poder respirar. No contuve las lágrimas, los gritos, el dolor que me invadió al pensar en el hecho de perderlo de esta manera... no pude soportarlo, no podía verlo en ese estado por un segundo más

......

Salí de la mente de Strange igual de consternada, llorando sin poder parar sin querer aceptar que esa fuera una realidad para nosotros, para él... no iba a dejar que nada le pasara y entonces la tristeza se convirtió en rabia, en amenazadora cólera que miró a Strange como mi última salida.

-No vas a dejar que eso pase-. Le advertí secándome las lágrimas -No me importa si tengo que matarte a tí primero, vas a darme la gema-. Le aseguré sin miedo a enfrentarme a alguien como él.

-Te he visto intentarlo-. Me dijo con calma -Te he visto hacerlo en muchos futuros...-. Continuó -Pero en éste no será necesario-. Aclaró alzando sus manos para que yo calmara mi actitud a la defensiva -Sé lo que significa Tony no solo para tí... sino para el mundo entero y por lo tanto sé, que sin alguien como él para protegerlo, serían cientos de miles los que sufrirían en un futuro -. Me dijo llevándose las manos al cuello para quitarse el medallón que contenía el ojo de Agamotto y la gema adentro de éste -Me dieron ésto para proteger a la tierra... creo que ahora la manera de protegerla es salvando a quién siempre ha sido su protector y evitando que caiga en manos de Thanos-. Terminó de decir al fin pasándome el medallón ante mi mirada atónita.

Después de lo que había visto, después de pensar que Strange iba a sacrificar la vida de Tony así nada más, el aire por fin pareció volver a mi cuerpo, junto con la calma que había perdido.

-Gracias... gracias, gracias Strange-. Le dije al hombre que había amenazado de muerte apenas hacía unos segundos acercándome para darle un pequeño abrazo.

-Espero estar tomando la decisión adecuada-. Confesó aún con algo de dudas.

-Te prometo que haremos todo lo posible porque las cosas salgan bien-. Aseguré para que estuviera más tranquilo y él asintió en silencio, para así retirarse.

Me quedé unos minutos en la terraza, observando el medallón en forma de ojo con el pequeño brillo verde en la parte interior, pensando en que una decisión afecta nuestra vida en miles de formas que no entendemos, en miles de manera de las que no nos hemos dado cuenta, ahora solo esperaba yo también que ésta decisión, asegurara un futuro mejor para todos nosotros.

-Linda... ¿Qué pasó con Strange...?-. Preguntó Tony apareciendo y viendo mi rostro con algo de preocupación.

No dudé en correr en su dirección y abrazarlo fuertemente, sentirlo junto a mí como nunca antes luego de haber visto el terror y el dolor que su pérdida significaba, no imaginaba una vida sin él a mi lado, ni un futuro en el que eso fuera posible.

-Hey... ¿todo está bien?-. Inquirió de nuevo extrañado por mi reacción, tomando mi mentón entre sus manos para alzar mi rostro y que pudiera verlo a los ojos.

-Ahora sí lo está-.