¿Me das un beso?

1.1K 91 27
                                    


—Si... De echo, ¿Recuerdas al chico que veíamos en el autobús y que tú siempre me empujabas contra el para que le hablara?

—Sí, pero solo susurrabas un lo siento y te ibas —Incluso ella hace la cosa de rodar sus ojos.

—Pues supongo que mi lo siento le gustaba porque el me confesó el otro día que también hablaba de mi con su padre.

Mi madre ríe y entonces me doy cuenta que quizás es raro estar hablando en el hall de la entrada.

—¿Bajamos a la cocina? —Pregunto, aún cuando el hablar de Luke ha roto un poco el hielo estoy igual de nerviosa.

—Esto... —ella parece muy nerviosa— mejor no. Tu hermano me dijo que pasara por ti y fuéramos a su apartamento.

—Podemos bajar para hablar mejor sen...—

—O podemos ir a un bar —me interrumpe—, ¿El bar de Peter sigue abierto?

—Si...

—¡Genial! —contesta rápido— Iremos ahí entonces.

—Voy a avisar a Luke de que salgo, ya vuelvo —Contesto extrañada con su comportamiento.

—Te espero fuera.

Y de seguido a eso abre la puerta y se va. Quizás estar en esta casa le recuerda lo que pudo ser y no fue, o quizás Rosie no quiere que ella esté aquí. Aunque la segunda me parece una opción muy cruel por parte de Rosie.

Si es así tiene sentido que está mañana temprano haya despertado a Leslie para irse a hacer unos recados importantes.

Cuando llego a la habitación sonrío al ver a Luke dormido, me acerco a él y dejo un beso un mejilla para después moverle suavemente.

—Amor... —solo recibo un ronroneo por parte de Luke así que insisto un poco.

—¿Que pasa? —pregunta adormilado y con los ojos entre cerrados.

—Nada cariño, que voy a salir con mi madre —me pongo de cunclillas para que el siga tumbado boca abajo—, te quedas solo. Puedes quedarte el tiempo que quieras durmiendo —asiente—. Y si quieres irte y no hay nadie no pasa nada porque todos tenemos llaves.

—Iría a saludar a tu madre pero necesito una ducha —dice.

—No pasa nada, luego te la presento —dejo un beso rápido en sus labios y me levanto—. Abajo tienes comida si quieres.

Abro la puerta de la habitación pero me giro cuando escucho que me llama, lo encuentro tumbado boca arriba y con una sonrisa.

—Suerte con tu madre.

—Gracias —le doy una sonrisa y vuelvo a girarme para irme.

—Ky.

—¿Que? —vuelvo a girarme.

—Estas preciosa.

¿Cómo puede ser que esa tontería me haga sonrojar y sonreír de esta manera?

—Gracias, tu también —digo haciéndole reír.

De nuevo vuelvo a girarme para irme así que me giro riendo cuando vuelve a llamarme.

—¿Que pasa ahora?

—¿Me das un beso? —pregunta con un puchero.

Me es imposible no reír antes de prácticamente ir corriendo y tirarme encima de él besandole, sonrío en mitad del beso porque el me está besando con el mismo entusiasmo con el que yo le beso. Cuando ambos necesitamos cortar el beso para respirar me alejo unos centímetros de el sonriendo.

The bad girlWhere stories live. Discover now