The bad girl

Morena ardiente

Me despierto por el ruido de la música fuera, tardo un poco en ubicarme y darme cuenta que estoy en la habitación de Keisi y que Liam está dando una fiesta.

Me giro y veo a Keisi tumbada a mi lado con el ordenador.

Me quedo observándola y me doy cuenta que somos totalmente diferentes físicamente.

Creo que Keisi nota mi mirada por qué baja su cabeza para mirarme.

—Despertaste

Me estiro.

—Tengo hambre.

Fija su mirada en la pared y asiente. —Yo también.

Nos quedamos en silencio unos segundos mirando a la nada, yo en concreto, en un zapato.

—¿Vamos a McDonald's?

—Si por favor, mi cuerpo pide a gritos unas patatas grasientas

Me levanto y me pongo mis Vans negras.

—Abajo está lleno de gente, creo que deberíamos al menos peinarnos.

Me miro en el espejo y hago una mueca —Tienes razón.

Bueno la verdad es que tampoco estamos que damos asco, pero tenemos las mejillas rosas por dormir, tenemos bolitas de rimmel por la cara,  en mi caso, noto la ropa muy pegada a mi cuerpo y tengo el pelo suelto enredado, mientras que Keisi sola lleva una camiseta de Liam y un moño bajo.

Keisi se pone a mi lado para verse también en el espejo y se acerca mucho para ver su rostro de cerca, me tiro a la cama boca abajo y pienso en Bridget y Alison, desde que salen con los amigos de Fran, están más tiempo con ellos y con sus amigos —entre ellos Leslie— que conmigo. Menos que Keisi apareció en mi vida como un regalo, si no ahora mismo, estaría sola.

Escucho a Keisi trastear por la habitación mientras afuera estoy segura que es un descontrol, se escucha música, gente gritando, y gente haciendo el típico "Eh, eh, eh" que se hace cuando alguien está bebiendo o bailando.

Me levanto de nuevo y me hago un moño que no ocupa mucho, ya que recorte mi cabello, y me miro en el espejo de cuerpo entero mientras Keisi me cuenta que encuentra muy atractivo a alguien que conoció el otro día en la biblioteca.

Doy media vuelta para ver cómo me queda por atrás este pantalón blanco, me doy la vuelta complacida y coloco mi top negro. Me desmaquillo y Keisi entra diciendo que ya está.

Nos hacemos una foto en el espejo del baño y pongo la pongo de historia.

—¿Cómo estoy?

La miro, lleva un vaquero tejano de tiro alto, una camiseta de Liam de super héroes y unas Vans igual que las mías. Si bien sería algo que yo no me podria poner, básicamente por qué no es mi estilo y me quería mal, a ella le queda bien y está guapísima en su estilo casual.

—Horrible, ¿Y yo?

—Espantosa.

—¿Me dejas una chaqueta?

—Hay tienes el armario.

Abro el armario y río al ver que tenemos casi todo igual, en este mes me he vuelto muy cercana a ella, básicamente si ella no duerme en mi casa, yo duermo en la suya —Quiero aclarar que no he visto a Liam por qué cuando el llega nosotras ya estamos en la habitación y cuando se va yo aún estoy durmiendo. —, conclusión, que su madre me ha cogido como a una hija, por lo que si le compra algo a Keisi me compra lo mismo para mí, y mi padre hace lo mismo con ella.

Cojo una simple chaqueta vaquera, me la pongo y me giro, voy a la puerta y tiendo la mano hacia atrás.

—Bien, dame la mano y no te separes de mí