Capítulo XXVI (Pasado De Yelica - Parte II)

Start from the beginning
                                    

Terma deshizo el escudo mágico para luego acercarse al muchacho. Sintió su pulso y era muy débil. Apresurada comenzó a revivir al joven que amenazaba con morir.

Yelica observaba la escena aterrorizada.

....

El congreso se reunió por segunda vez tras recibir noticias del joven elemental.

Un informante del congreso pidió la palabra para revelar lo que los guerreros habían descubierto tras seguir el rastro del joven prófugo.

-Según los escuadrones de rastreo su pista es confusa y es posible que no este en el bosque del norte y aquel rastro haya sido para despistarnos.

El rey Salomón se exaltó.

-Se los advertí - Emitió molesto - No debimos subestimarlo, conoce la manera en la que operan nuestros escuadrones, es evidente que supo cómo engañarnos.

La reina Martha poso su mano sobre el hombro del rey para intentar calmarlo.

-¿Saben si quiera dónde podría estar? - Preguntó el Rey Pool.

-Es posible que se encuentre en los límites del reino su Majestad - Respondió el informante.

El Rey Salomón se levantó de su asiento con exaltación.

-¡debemos resguardar nuestras fronteras no podemos permitir que ese elemental se acerque al reino! - Ordeno sin siquiera ponerlo a discusión.

El rey Pool elevo una ceja.

-Es evidente que el tema te preocupa así qué solo esta vez te dejaré la última palabra.

Salomón no pudo evitar enseriar sus gestos ante aquél comentario.

A pesar de que el congreso llevara siglos unificado no siempre fue de esa manera ya que se conoce que en el pasado cuando los elementales cruzaron a Telca comenzaron las disputas por el poder, poniéndose en discusión ¿Cuál elemento era superior? Por lo que comenzaron a ocurrir violentas guerras por tierras. La unión llego cuando las criaturas místicas se revelaron y elementales de hielo y elementales de fuego debieron unir fuerzas para vencerlos.

Pasaron los siglos y esta unión se volvió un símbolo que representaba el poder de los elementos pero aún hay elementales que aseguran que su elemento es el único con derecho a gobernar el mundo elemental. En cada reunión del congreso se podía sentir la rivalidad entre ambos Reyes pero había sido un tema que estaban dispuestos a sobrellevar.

Tras la reunión las órdenes se pusieron en marcha. Escuadrones de elementales rodearon el reino entero creando una barrera impenetrable. En cuestión de horas el reino ubicado en la región central se encontraba aislado, ningún elemental, alquimista o mago podría cruzar sin ser previamente chequeado por guardias elementales de alto nivel.

En ese momento Artus se dirigía al reino desde las afueras de este. A la distancia visualizo la primera barrera de guerreros, se encontraban deteniendo el tráfico y pidiendo a todo aquel que cruzara una prueba de elementos, o de su habilidad.

Artus comenzó a ponerse nervioso a medida que avanzaba.

-Informe su habilidad dentro de las únicas existentes en Telca. ¿elemental de hielo o fuego, mago o alquimista? - Preguntó uno de los guardias.

Artus trago saliva antes de responder.

-Elemental de fuego - Respondió.

-Su brazo derecho por favor - Ordeno uno de los guardias.

Artus tembloroso lo extendió, seguido otro guardia emitió palabra.

-Su brazo izquierdo por favor - ordenó el otro guardia.

Artus quedo con ambos brazos extendidos y sujetos por los guardias. Los nervios eran incontrolables.

El guardia de fuego prosiguió a emitir una llamarada a través del brazo de Artus y este no se inmutó ni dio señales de dolor aparentes por lo que el guardia dio la señal a su compañero.

El siguiente guardia solo colocó su dedo sobre la mano de Artus y lentamente comenzó a esparcir una escarcha que se volvió mas helada hasta el punto de congelar la pequeña zona donde su dedo apuntaba. Artus emitió un terrible quejido tras el dolor y sin poder evitarlo su brazo cayó sin poderlo mover.

Los guardias parecían conformes y el guardia de hielo volvió a sujetar el brazo izquierdo y absorbió el hielo que había producido. Artus se sujeto el brazo con desesperación ya que había sido solo una pequeña invocación del magnífico poder de los elementales de élite.

-Puede avanzar - Le ordenaron - Siguiente - añadió el guardia haciendo avanzar la fila.

Artus había quedado en shock tras aquella barrera de seguridad ya que era la primera vez en su vida que sentía que ser elemental era algo malo.

Siguió su camino hasta el centro pensando en su familia y pidiéndole a los Dioses que estuvieran bien, aún presentía que algo malo ocurriría.

Libro 2 - Los Elementales - ♨El secreto de los espíritus❄Where stories live. Discover now