Toda Una Eternidad (Lawliet y Tú)

Capítulo 43

—¿Qué fue lo que dijiste Ryuzaki?— inquirió el jefe al levantarse del sofá con la sorpresa e histeria que sin duda L ya esperaba.

—Exacto, ¿de qué estás hablando?— intervino Matsuda tan conmocionado como el jefe.

—Si algo me sucediera le pedí a Watari que estuviera disponible, así que cuento con el equipo— anunció L con toda la calma que en la sala ya no había.

—Ryuzaki, dijiste que no era culpable, ¿y ahora esto? honestamente ¿cuánto sospechas de mi hijo?— cuestionó el jefe con una voz más tranquila.

—Ah...la verdad es que ya no sé qué pensar, nunca he estado en una situación así, si Kira y el segundo Kira trabajan juntos las cosas no lucen bien para mi, por eso...puedo no estar pensando con claridad, puedo estar equivocado, tal vez lo considero un sospechoso porque no hay alguien más,  aún así...si muero pronto, por favor asuman que su hijo es Kira— el silencio se apoderó de la sala mientras todos seguían las acciones de L.

Sabía que él le dijo aquello para no inquirir una sospecha tan fuerte sin tener pruebas que nos antecedan y nos den la razón, pero aún así, muy dentro de mí sentía que él no estaba del todo convencido, sabía que él necesitaba algo más para poder proceder como se debía contra Light, pero aún así le agradecía que se moviera un poco a ciegas confiando en mí.

"No me queda más que atacar por sorpresa, esta es una apuesta" escuché a L por pensamientos.

Una apuesta que te haré ganar, te lo prometo...

***

—Jaja, yo no diría eso, sé cómo trabajar, es todo— comentó Light con un todo bastante agradable y cómodo.

Mi vista están fija en ellos a varios metros de distancia en donde yo vigilaba toda la situación, L por otro lado de había posicionado en una banca del campus de la universidad, ambos esperábamos a que Light apareciera y cuando él se dio cuenta de la presencia de mi compañero el cuál estaba leyendo para matar el tiempo, no pudo evitar detener sus pasos fijando la vista y total atención en L.

—Oye, ¿que sucede?— llamó la chica que lo acompañaba al verlo distraerse de su conversación tan repentinamente.

—Ah, hola Light ¿cómo estás?— saludó L de manera extraña al ver que Light había aparecido, cambiando de una leve emoción por ver a Light, a un rostro neutro e inexpresivo, no pude evitar sonreír, por alguna razón ese tipo de cambios en él me entretenían en gran manera.

—Kiyomi, ¿nos vemos después? necesito un momento a solas con él— le pidió Light a la chica que lo acompañara para después caminar hacia L, dejándola atrás.

La idea de que una chica podía pasar a segundo plano para él tan fácil me hizo desconfiar en su apego real hacia los demás.

—Ah, está bien— fue lo último que pudo decir ella antes de que Light la dejara totalmente atrás en más de un sentido.

—Ojalá no se haya molestado— comentó L cuando Light llegó hasta él.

—Ah, no importa ¿es seguro que estés aquí? ¿no temías aparecer en público?— cuestionó Light ante el evidente cambio de planes que había tenido L.

—Así es, pero como creo que no eres Kira debo estar a salvo, además eres el único que sabe que soy L, si llegara a morir en los próximos días, instruí a tu padre y a todos en el cuartel que asumieran que eres Kira— atacó L con ambigüedad, de nuevo tan tranquilo, esperando ver la reacción de Light —Tú fuiste quien dijo que extrañabas verme en la escuela, así que pensé regresar para cambiar de aires un poco, mientras no me mate, la universidad es divertida— dijo esta vez con aires de diversión que a mi parecer eran bastante irónicos.