Capítulo 17

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Después de terminar la transmisión con Watari regresé a casa pero al estar transportandome decidí llegar fuera de la casa.
Caminé frente a ella en la obscuridad de la noche, como siempre no me gustaba tener las luces encendidas ni siquiera de afuera.

-¿Como pude pasar de ser una diosa con una simple cama y oficina a ser una chica con más dinero del que necesita? Es completamente absurdo, aunque el dinero tiene el mayor valor en este mundo aún se me hace algo un tanto insignificante digo- señalé la casa- esto es hermoso pero inesesario para una sola persona, es una lástima que los humanos vivan para trabajar, tal vez podría incluirme en eso- volví a decir mientras volteaba hacia el bosque no muy lejos de donde me encontraba.

Con curiosidad caminé hacia el mientras sentía la fría brisa de invierno en mis mejillas, sentía algo extraño desde que Kira comenzó a matar y en realidad sospecho que no todas las almas están regresando a donde deberían, para un humano normal es completamente imposible percatarse a simple vista pero para un Dios de la vida en realidad es evidentemente obvio, algo hiba realmente mal, las almas eran todas de delincuentes y eran más de las necesarias todas juntas sólo un tonto no se daría cuenta de que ese puede ser un gran problema.

Al llegar al bosque me sumergi en su interior, la obscuridad ni me dejaba ver nada, abrí mi mano dejando escapar un poco de luz blanca de esta para apuntar hacia enfrente y ver un poco.

Podría ser una cazadora de sombras..._____ deja de pensar en tonterías.

Seguí caminando buscando algo inusual, sólo me topé con ruidos y lamentos raros, nada fuera de lo normal en realidad.

Caminé de regreso a casa para tomar una siesta.

*Una semana después*

Un agente, del FBI, estaba en el piso, le había dado un ataque al corazón bien lo sabía, pero no podía hacer nada, sólo podía ver todo desde arriba.

Este se dirigió hacía el interior de un tren que estaba frente a el.

-Adiós Ray Penber- se escucho decir a alguien justo en el momento en que el agente murió.

Sentí una punzaba muy fuerte en el pecho junto con el sonido de muchas campanillas.

Me senté de un salto en la cama pegando un grito ahogado, me puse la mano en la frente, estaba sudando frío.

-No puede ser, Kira- dije apretando las cobijas con la mano por la impresion del sueño.

Tomé inmediatamente el teléfono y marque el número.

-______ que gusto que llames- dijo L extrañamente feliz.

-Sí...- dije mientras calmaba mi respiración.

-¿Estas bien?- ahora lo había preocupado.

-Algo muy malo va a pasar, es mejor que estés pendiente a las noticias del FBI y para lo que venga después de eso- dije con la respiración más normal.

-¿Que va a pasar con el FBI?

-Kira, eso va a pasar, no tengo nada que ver pero...hum, he soñado algo y estoy segura de que va a pasar- dije un tanto nerviosa esperando que me creyera.

-¿Un sueño? ¿Y estás completamente segura?

No me cree.

-Bueno sino me crees puedes esperar las noticias- dije rindiendome y luego colgué.

Me recoste de nuevo en la cama suspirando mientras me ponía una mano en la frente, voltee a mi reloj en la pared.

3:00AM Que miedo, sino estuviera protegida ya me hubiera echo bolita entre las cobijas.

Toda Una Eternidad (Lawliet y Tú)Kde žijí příběhy. Začni objevovat