Es el amor perfecto, salvo por algunos detalles de distancia, de circunstancias y de tiempos.
Pero nada importa...
Nada es tan importante que el amor y la promesa del reencuentro.
-Leaunam💙
31 de julio del 2019
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-¿Por qué no te quedas a cenar?- Pregunte un poco nerviosa
-No quiero ser una molesta- Contestó cortes
-No te preocupes por eso... Preparare tu comida favorita- De verdad quería que se quedara un poco más, pero tampoco quería que se sintiera obligado.
-Entonces aceptare- Me puso feliz su respuesta positiva.
-Me alegra mucho que aceptes.Si gustas, puedes quedarte con Sarada en la sala mientras cocino- Deseaba que ellos dos convivieran mas y que se acostumbraran a la presencia del otro.
-Bien- Él tomo asiento en el sofá y yo coloque a Sarada en el suelo sobre la alfombra acercandole varios de sus juguetes.
Mire a Sarada y luego a Sasuke -No tardare- Le di un beso a Sarada en su pequeña cabeza y me levante
-¿Está bien que se quede allí?- Me pareció lindo que Sasuke se preocupara por su hija.
-Ella estará bien, es muy inteligente, como tú- Le sonreí y él enfocó su vista a su pequeña. Retome mi camino hacía la cocina para preparar la cena.
Me sentía muy feliz, como si todo se haya arreglado y fuéramos una verdadera familia, pero en el fondo aun no sabia que esperar del futuro.
Cuando termine de cocinar salí para avisarle a Sasuke sobre la cena pero gran sorpresa me lleve al ver a Sasuke aun sentado en el sofa mientras nuestra pequeña Uchiha reía estando parada, sosteniéndose de las piernas de su padre.
Al parecer Sasuke hacia algo que a ella le hacia mucha gracia pero en realidad no me di cuenta de que se trataba, eso no quitaba qué verlos juntos y felices no me satisfacía.
Me acerque a ambos sin llamar su atención pero en cuanto Sarada se percató de mi presencia se alboroto levantando sus manitas para que la tomara en brazos y así lo hice.
-La comida esta lista- Informe dulcemente después de tomar en brazos a Sarada, dándole un par de besos en las mejillas que la hacían reír.
Sasuke nos miraba detalladamente y solo le dedique una sonrisa, él se levanto tan serio como siempre y nos dirigimos juntos a la mesa. Senté a Sarada en su sillita de bebés para alimentarla.
Serví la comida y nos sentamos a cenar juntos -Gracias por la comida- Me agradeció Sasuke y yo solo le sonreí.
No podía comer y al mismo tiempo alimentar a mi pequeña así que decidí darle de comer primero a Sarada. Serví un pequeño platito con papilla para ella y comencé a darle cucharadas pequeñas.
-¿Qué te pareció la comida?- Le pregunte a Sasuke cuando termino de cenar
-Tu comida siempre es buena- Me sonroje un poco por su cumplido y me recordó a aquel día que yo le dije exactamente lo mismo.
