𝙏𝙁𝘼𝙏𝘽 | Los días normales en el instituto comenzaron a desaparecer cuando las flores se hicieron presentes en la taquilla de Kim Yein.
El club de música, una pelea con su amigo de infancia y el misterio del dueño de los regalos diarios, darían...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
────────⊹⊱♡⊰⊹────────
ㅡBuenos días. ㅡdigo al entrar a clase, recibo respuesta del maestro de química y de unos cuantos compañeros. Por suerte el hombre se tomaba su tiempo para empezar la clase, y así los que iban algo atrasados no se preocupaban demasiado, como es el caso de Jongho, pues no lo veo por ningún lado.
Voy hasta nuestra mesa, dejo mi mochila en el asiento y al ver las manos de Nanhee y Hayeong moviéndose para saludarme camino hasta ellas para hablar en lo que iniciaba la asignatura. Mientras las escucho hablar veo al cenizo pasando la puerta a paso rápido, con una sonrisa que no logro entender de qué era. Al verme me llama con la mano para que me acercara y se sienta en su silla. Me despido de las chicas y voy hasta él.
ㅡAdivina. ㅡhabla al mismo tiempo que rebusca en su mochila su libreta y bolígrafos. Hago un sonido con la garganta para que prosiguiera, porque ni siquiera me estaba viendo. ㅡVia Yeosang y a Wooyoung hablando hace un momento.
Suelto un "¿ah sí?" levemente sorprendida. Él asiente varias veces con la cabeza, jurándome que era cierto lo que decía, y por fin termina de organizarse. Me mira a los ojos y entiendo que su sonrisa se debe al posible arreglo del problema que nos había rodeado estos días.
ㅡ¿Crees que arreglen las cosas? ㅡme pregunta.
Suponía que sí, por los mensajes que Wooyoung me envió ayer.
Además, mi corazón se alegraba de que Woo hubiera cumplido con lo que dijo, pues realmente quería era que mis amigos dejarán de alejarse de esa forma. Así que, contagiándome de su sonrisa, le respondo afirmativamente al pequeño Choi, poniendo toda mi esperanza con que las cosas entre los mejores amigos mejoraran.
El profesor parece también terminar de organizar sus libros y se levanta para saludarnos a todos en conjunto, por lo que me pongo a buscar mis cosas.
ㅡAgh, la dejé en mi taquilla. ㅡrebusqué mi libreta, pero no la encontraba.
Jongho pareció recordar y con agilidad sacó algo del bolsillo de su mochila. ㅡLa vi cuando venía por el pasillo. ㅡme extendió una de las flores rosadas, fresca, que aún tenía el pequeño trozo de cinta pegado al tallo.
La tomé agradeciéndole, y sin darle más vueltas la dejé sobre la mesa. Me enfoqué en buscar otra libreta en donde anotar, pero la idea de luego tener que escribir todo de nuevo en el cuaderno correcto me detuvo.
ㅡ¿Crees que el profe me deje salir por mi libreta?
ㅡSeguro sí, ya sabes, es el de química. ㅡrió suavemente. Tenía razón, el maestro de química es un amor, todos lo amaban.
ㅡYa vuelvo. ㅡtomé la flor de la mesa y la guardé en el bolsillo de mi falda, aprovecharía para dejarla en el casillero.
Jongho movió su mano como lo hacen las reinas de belleza, despidiéndose de mí. Negué mientras reía y fui hasta el escritorio del profesor. En efecto, me dio permiso de salir con la condición de no demorarme mucho. De igual forma las taquillas estaban solo al otro lado del pasillo.
