One Girl, Two Matsunos?!

~Confusión (parte 3)

La sensación de tener mariposas en el estomago no desaparece, su mente se nubla al tomar las manos de esas dos personas, esa sensación de derretirse cuando las manos la acarician es tan adictiva, de nuevo, Midori se encuentra con ese par de manos, todo comienza a volverse borroso, el sentimiento crece y una voz llamándola se hace más y más fuerte.

- ¡Midori! - exclamó Kinko despertándola

- Ah, buenos días... - respondió Midori aún adormilada

- Ya van a ser las diez de la mañana, tus papás y los chicos te están esperando para desayunar, vamos -

- P-pero no estoy arreglada... - dijo Midori sonrojada

- No pasa nada, eres igual de bonita con y sin maquillaje - la joven morena le ofreció su mano, Midori la tomó y se ayudó a levantarse, ambas de dirigieron al comedor.

Los amigos de Midori la miraban con cierta ternura, nunca la habían visto así, tan simple y casual como lo es recién despertar en la mañana, estaban contemplando cada parte de ella.

- Buenos días, perdonen por hacerlos esperarme - se disculpó Midori

- No pasa nada, ahora desayunen para ir a pasear - dijo la madre de Midori

Desayunaron con tranquilidad y conversaron un poco sobre la hija de Jyushi y Homura, y Midori les contó a sus amigos pequeñas anécdotas de ella con Homura, cada vez más se encontraban más y más decididos a decirles lo que ellos querían, de hecho, sería de las primeras cosas que harían.

Después de que Midori terminó de arreglarse, los cuatro amigos salieron a la calle a dar un paseo por la zona, Midori les enseñaba los lugares, y les contaba anécdotas de cuando era niña, tal vez no había mucho que ver, pero lo interesante del lugar eran las tiendas de ropa, casi no había centros comerciales grandes y lujosos con marcas conocidas, así que muchas tiendas hacían y vendían sus propios diseños, entraron a una tienda y en lo que veían ropa, Atsushi y Yanagida miraron a Kinko con complicidad mientras asentían, ella entendió la señal y tomó un par de blusas y shorts.

- Creo que iré a probarme esto - dijo Kinko

- ¿Quieres que te ayude? - preguntó Midori

- No gracias, ahora vuelvo - sonrió mientras se iba a los probadores

Midori seguía viendo ropa cuando sus otros dos amigos se acercaron.

- Hey Midori-chan - Atsushi llamó su atención - Quisiéramos hablar contigo -

De nuevo, las sensaciones de aquellos sueños se hacía presente, Midori sintió mariposas en el estómago.

- ¿Sí? -

- Nosotros... eh... - Atsushi se ruborizó un poco pero no hallaba las palabras para hablar, miró a Yanagida en busca de ayuda

El modelo moreno suspiró - No hay como darle vuelta a este asunto, tal vez te parezca todo esto un poco repentino pero simplemente pasó, Atsushi y yo estamos enamorados de ti - se recargó en un brazo contra la pared mientras estaba frente a ella.

La cara de Midori tomó rápidamente un tono rosado, ambos le extendieron la mano, la sensación de mariposas en el estómago volvió, aquel sueño en blanco y negro ahora tenía color, estaba pasando, aquellos hombres sin rostro en sus sueños ahora lo tenían, la sensación de estar enamorada estaba a flor de piel, pero algo no se sentía bien.

- P-pero... oigan, yo me siento igual, solo que aún no decido con quien estar, yo...- ellos la interrumpieron

- Esa es la mejor parte Midori-chan, no tienes que decidir - dijo Atsushi

- Los dos lo hablamos, y sabemos un poco de lo que sucedió contigo y tus experiencias pasadas, nosotros no queremos causarte problemas, te ofrecemos una relación poliamorosa, discreta y bajo cualquier condición que tú pongas, solo queremos que nos aceptes también - le sonrió Yanagida

Midori tenía lágrimas en los ojos, estaba pasando por el mismo conflicto moral que no recordaba, ella no era así, o al menos eso intentaba decirse, pero no funcionaba, la sensación de enamoramiento ahí estaba, pero no quería aceptar sin antes meditarlo, era extraño, creyó que al pasar por algo así sería más... dramática, meditativa al respecto, ella sabía lo que había vivido solo porque le contaron, pero no sabía a detalle lo que ella sintió en su momento, el dilema moral ahí estaba, pero lo estaba superando en cuestión de minutos, como si sus propios sentimientos trajesen de vuelta el recuerdo de cómo se sintió, como si de un deja-vu se tratase.

- ¿Estas bien? - Atsushi la sacó de sus pensamientos

- A-ah, sí... sí, estoy bien, es solo que... es demasiado pronto, ¿no? -

- Lo sabemos, si una de tus condiciones es que esperemos a que estés lista lo aceptaremos - dijo Yanagida

- Esta noche les tendré una respuesta... quisiera pensarlo un poco, n-no me lo esperaba... - Midori volvió a sonrojarse

- Supongo que tampoco fuimos muy obvios - Atsushi rió un poco

Kinko eventualmente volvió de probarse ropa, aunque en realidad estaba atenta escuchando lo que decían, ellos estaban cerca de los probadores, y se aseguró de salir en el momento apropiado, estaba contenta por ellos, quería que fuesen felices, pero Kinko no había tomado en consideración todos los buenos momentos que Kara e Ichi pasaron con ella, Kinko había llegado cuando Midori ya estaba más y más hundida en sus problemas sentimentales, no los culpaba pero tampoco los consideraba inocentes, simplemente creía que Atsushi y Yanagida eran mejores partidos para ella.

Después de salir de la tienda, Midori los llevó a un restaurante de ramen, reían y platicaban sobre diversos temas, nunca centrándose en uno solo, Atsushi miró por la ventana y vio a los sextillizos, no es que él supiera algo pero tenía un mal presentimiento, así que evitaría cualquier tipo de contacto con ellos, al menos solo ese día. Todomatsu vio a Atsushi con los demás y con su mano hizo el gesto de saludarlo, Atsushi lo miró un par de segundos y luego volteó a ver a sus amigos, ignorando por completo al menor de los sextillizos, Totty no entendía por qué, simplemente continuó caminando con sus hermanos, otro día investigaría que había sucedido, pero para cuando lo supiera ya sería demasiado tarde.