¿Qué éramos?

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Una esperada visita llega a Midori, lo invita a pasar y sirve té para conversar más amenamente, en vez de sentarse frente a él decide sentarse a su lado, era una muy extraña decisión ya que ella nunca había hecho eso, pero solo quería sentirse más cercana a él, quería romper cualquier tipo de barrera que ella misma hubiera construido o pudiera construir con esa conversación que quería tener con Karamatsu.

- ¿Princess? ¿Está todo bien? -

- sí... es solo que estuve revisando mi teléfono y algunas fotos, y veo que compartí muchas cosas contigo, y por como suenan algunos mensajes... estoy confundida, Karamatsu-kun, ¿qué éramos? Dijiste que no eras mi novio pero esos mensajes no son propios de un simple amigo -

Karamatsu tragó saliva ruidosamente, casi ahogándose, la pregunta lo tomó por sorpresa, pero solo pudo soltar una pequeña risa nerviosa para disimular su sorpresa - jeje princess... ¿entonces te acercas para coquetear? -

- Si éramos algo supongo que extrañarías mi coqueteo, y en vista de que tus mejillas se hacen cada vez más rojas, creo que sí éramos algo más que amigos -

- Muy lista my sweet Midori, pero había ciertos asuntos que se arreglaron el mismo día que perdiste la memoria... - Karamatsu decía la verdad de cierta manera - y eran situaciones que no permitían que tomaras una decisión en cuanto a tus sentimientos -

- ... - se veía desanimada, Karamatsu odiaba verla así, por lo que ideó algo rápido y dijo lo primero que se le vino a la mente

- E-eh... princess, ya se que es demasiado pronto considerando tu situación y que quieres recordar cosas, pero estaba pensando en irnos unos días a la playa, solo tú y yo... - recordó lo que Ichimatsu le contó, no lo pensó mucho, pero era algo que él también quería hacer con ella, aunque la petición la tomó por sorpresa.

- No me siento lista aún para salir a tomarme unas vacaciones... perdóname pero no recuerdo nada, y con el tema de los mensajes y las fotos estoy muy confundida... ¿qué éramos? -

- Ya te dije que era complicado -

- ¿Qué tanto hice antes de perder la memoria? ¿En que clase de situaciones me puse como para no poder ser honesta conmigo misma y decir abiertamente si me gustas o no? -

- Midori, deja de atormentarte con eso, no estas bien del todo aún como para decirte eso -

- Pero yo hice esas cosas, yo me puse en esas situaciones, yo tengo derecho a saber que hice -

- Shhhhh, estarás bien my sweet Midori, prometo contarte todo después, cuando estés mejor y hayas recuperado el ritmo normal de tu vida, ¿okay? - Karamatsu colocó su mano en el hombro de la joven y ésta asintió - Well my princess, debo irme, hay cosas que arreglar en casa, aunque ya sabes que puedes llamarme siempre que lo necesites -

Karamatsu se fue no sin antes haberla abrazado, y cuando se quedó sola comenzó a impacientarse. El tiempo es sumamente lento cuando tienes curiosidad y ya no tienes nada más que revisar, eso creía hasta que recordó su propio anime y manga, pero quería verlo con Choromatsu y a esas horas no estaba disponible, era desesperante estar encerrada en su casa... encerrada... no, no se quedaría ahí, iría a explorar la zona y dar una vuelta pequeña sin haberle querido decir a Kin-chan, de hecho, no le dijo a nadie. Midori se arregló bonita para salir a tomar una copa en algún bar, tenía ganas de una buena y fresca cerveza; anduvo deambulando en busca de un bar, pero no encontró nada y olvidó mandarse la ubicación de su casa, estaba perdida, el deseo de la cerveza se había ido, y ahora solo quería volver a casa, era de noche y no sabía cómo volver, así que estuvo andando en círculos y se sentía demasiado orgullosa como para hablarle a cualquiera de los que ya conocía, quería arreglar su problema sola.

Andaba observando con curiosidad su entorno, pero no lograba recordar nada, pero la zona le parecía bonita, y fue a dar a un parque, había columpios y más juegos infantiles, pero los columpios en particular le gustaban, fue a sentarse y mecerse un poco, pero la interrumpió un sonido bonito, el maullido de un gato, Midori buscó con curiosidad de donde provenía aquel lindo sonido, y atrás de ella estaba un bello gato blanco, con orejas, cola y patitas de color beige, ojos azules y nariz rosada, era el gato más bonito que Midori había visto. Aquel gatito empezó a frotarse contra la pierna de Midori, y ella enternecida miraba a la criatura, creyó que tenía una mascota y escapó al encontrar en su casa una camita y croquetas, pero no había rastro de un collar o papeles de adopción, no sabía si ese era su gato pero sabía que lo quería de mascota, y cuando se disponía a agarrar al felino blanco, se echó a correr y a cierta distancia volteó para ver a Midori, como si quisiera que la siguiera, y así lo hizo, se levantó del columpio y se dirigió a seguir al pequeño gato. Anduvieron un rato hasta que la guió a un pequeño callejón y Midori se sintió extraña, como si de un deja-vu se tratase, esta vez no se adentró del todo en el callejón, sentía que debía haber alguien ahí.

- ¿Hola? ¿Hay alguien ahí? - preguntó ella apenas entrando al callejón

- ¿Midori? ¿Qué haces aquí? ... - bajó la mirada y vio a Lynn - veo que encontraste a tu mascota - cargó al gato y caminó hasta Midori para devolvérsela

- Gracias Ichimatsu, no sabía que mi mascota podía cuidarse bien -

- si aquí mismo fue donde decidiste adoptarla... - Ichimatsu quería decirle más cosas y hablar sobre ellos pero prefería contenerse, dio un suspiro y pasó de ella - Debo volver a casa, nos vemos luego - dijo sin voltear a verla

Midori vio a sus alrededores pero seguía perdida, cargaba a Lynn con una mano y con la otra tomó a Ichimatsu por la manga de su sudadera. - espera... estoy perdida, ¿podrías llevarme a mi casa? -

Ichimatsu volteó a verla con cierta ternura, habían repetido aquella vez que se conocieron, la diferencia es que él tenía sentimientos por ella esta vez, un tanto sonrojado asintió con la cabeza, caminando juntos y verle la mano disponible a la joven, Ichimatsu se vio tentado a tomarla y así lo hizo, Midori no puso resistencia pero tal acto la hizo sonrojarse un poco aunque no entendía bien porque, ella lo atribuía a haber leído las conversaciones con él, ver las fotos del segundo y cuarto hermano con ella, y sabía que algo había entre ella y esos dos hermanos Matsuno, pero luego investigaría, por el momento solo disfrutó caminar junto a él.

One Girl, Two Matsunos?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora