~Compartida

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Ambos chicos llegaron relativamente rápido, no era de esperarse, ellos ya estaban esperando que ella llamara en cualquier momento y el par de colegas ya sabían que hacer en cuanto ella hiciera la llamada tan ansiada para ellos.

Al llegar, Midori esperaba impaciente en la puerta, por lo que ni siquiera les dio oportunidad de tocar la puerta ya que les abrió casi de inmediato.

- Oigan... por favor díganme que no hice nada estúpido, no soy muy buena bebedora... - Dijo la anfitriona con la voz llena de angustia

- No hiciste nada malo, tranquila, te comportaste muy bien - Fighting la calmó con ese comentario

- Incluso celebramos que estamos en una relación - Osomatsu se acercó a darle un beso en la mejilla, ella se habría movido para evitar tal acción pero se quedó helada al escuchar eso

- ¿U-una relación? ¿De que estás hablando? - preguntó con voz temblorosa

- Sí, te propusimos ser nuestra novia, no creas que iba a dejar que Osomatsu se quedara todo lo bueno de la vida para él solo - Fighting repitió la acción de su amigo de sudadera roja

- ¿¡Novia de ambos!? -

El par de cómplices se miraron antes de pedirle su teléfono y que ahí mismo estaba la evidencia de sus palabras.

Midori moría por dentro siendo carcomida por la culpa otra vez, los quería demasiado ¿pero como novios? No parecía tan buena idea pero si les había dicho que sí estando ebria debió ser porque ella en verdad lo sentía así, motivo principal por el que ella no se negó y lo aceptó, pero bajo sus propias condiciones.

- Chicos, en verdad no recuerdo haber grabado ni dicho eso, pero aceptaré lo que dije siempre y cuando no hagan nada que me incomode, y Fighting, sé que en teoría tú y yo nunca terminamos pero me dejaste sin siquiera despedirte... empezar otra vez parece un poco difícil para mi, y Osomatsu, en verdad te quiero muchísimo pero... emm... tú sabes lo que sucedió con tus hermanos y podría llegar a ser igual de difícil... - suspiró - así que les pido por favor, nada de besos en los labios hasta que me sienta lista, ¿sí? -

- ¡Lo que tú me pidas! - exclamó Fighting

- Awww, ¿nada de besos entonces? - Osomatsu sonaba decepcionado pero mantenía su sonrisa pícara

- Ni uno solo - Midori se mantenía firme

- Pero supongo entonces que puedo hacer esto - el de sudadera roja rápidamente tomó a la chica para hacerle cosquillas y Fighting luego se unió para también "atacarla"

Rieron un rato y cuando las cosas se calmaron, Midori les pidió guardar el secreto y si querían salir debían controlarse con las palabras que pudieran denotar alguna relación más que de amistad, y Midori tampoco se lo iba a contar ni a Homura ni a Chibita.

Parecía que les iba bien en eso de la discreción, pero Osomatsu se la pasaba inusualmente contento, cosa que llamó la atención de sus hermanos, y un día que estaban comiendo, Choromatsu y Todomatsu, quienes eran los más intrigados al respecto, fueron los primeros en decir algo, y aunque Karamatsu e Ichimatsu no lo mostraban tanto como sus otros dos hermanos, también estaban curiosos al respecto.

- Osomatsu nii-san, ¿qué te trae tan contento últimamente? - preguntó el menor de los sextillizos

- Nada, estoy como cualquier día normal - respondió con cierta indiferencia ante la pregunta pero no podía evitar sonreír al recordar y tener en la mente el verdadero motivo de esa felicidad

- Algo te pone muy raro, sonríes cual idiota, te arreglas más para salir, y hasta nos haz dejado de molestar con tus bromas en la ultima semana, ¿que sucede? - Dijo Choromatsu

- ¿Raro? Nah, nada de eso, en verdad que me he sentido más relajado -

- ¿Seguro brother? Me encantaría si pudieses compartirnos el secreto de tu happiness -

Osomatsu suspiró - Bien, me atraparon, le pedí a Dekapan que me hiciera un líquido para que esté más tranquilo, he tenido varías pesadillas y eso es lo único que me las evita, tal vez sea por eso -

Los hermanos no le creyeron ni una sola palabra, recordaron la calma de Jyushimatsu cuando empezaba a a salir con Homura, era algo que tenían muy en mente, como si fuese una especie de droga lo que habían consumido y les había cambiado la personalidad por una más tranquila, el mayor incluso dejó de hacer sus bromas de índole sexual, a Choromatsu ya no lo molestaba con su sobrenombre, dejó de prestarle tanta atención a sus hermanos y andaba más distraído, así que el tercer y sexto hermano comenzaron a seguirlo, Kara e Ichi los hubieran acompañado pero no tenían tantas ganas de salir aún, no les importaba tanto en ese momento lo que sea que tramaba Osomatsu.

En cuanto a Choro y Todo, lo seguían y veían que las visitas a la casa de Midori eran altamente frecuentes, y un día se armaron de valor para acercarse más a la puerta y tratar de escuchar alguna conversación, no les tomó mucho tiempo ni esfuerzo ya que en cuanto entró Osomatsu, ambos hermanos menores se acercaron a la puerta, y el de sudadera roja no se hizo esperar a saludar a Midori con tanto cariño.

- Tu novio favorito ha llegado, ¿me extrañaste? - Dijo Osomatsu mientras se aproximaba a abrazarla

- Oso-kun, haz venido todos los días recientemente, pero sabes que siempre me hace feliz verte - respondió Midori con cariño - ven, vamos a sentarnos a la sala de estar -

Los hermanos de afuera no podían dar crédito a lo que habían escuchado, atónitos pensaban en cómo demonios había conseguido novia, en especial a Midori, hasta donde ellos sabían, ella tenía una petición que no iban a poder cumplir por la poca dignidad que aún les quedaba, ¿será que Osomatsu logró conquistarla por méritos propios? No, sabían que no era posible, de entre tantas mujeres que en todo caso pudo haberse conseguido ¿por qué elegir la que sus hermanos querían y que ella también quería? ¿Por qué tenía que tener a la chica que debería estar prohibida? Había algo que no encajaba, y ahora el tercer y sexto hermano sentían la responsabilidad de confrontar al mayor y decidir si decirle o no a sus otros dos hermanos.

One Girl, Two Matsunos?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora