Juntos Una Vez Más [#1]

21. Los juegos de Green High

Alice

—Ya me disculpe, estoy despierta. ¡Me tome una botella de champagne yo sola! ¿Que esperabas?— Emily intenta acomodar su cabello el cual está desordenado.

Le lanzo una de las enormes almohadas de su cama haciendo que golpee toda su cara. La mano de Emily sale a un lado de esta levantándome su dedo del medio.

—¡Esperaba que el alcohol te aliviara y me contaras, no que te quedarás dormida como una abuela de setenta años!— contesto obvia alzando mis brazos.

Anoche los chicos estaban más que ebrios, tuvieron que esperar a que el efecto del alcohol al menos pasara un poco como para que manejaran. Aunque el único que estaba sobrio era James, fue el primero en irse.

Fui la última en verlo salir de la mansión Miller y este iba cabreado. Todos sus gestos lo decían, James solo se detuvo unos segundos a hablar con Joseph y luego se fue. Cuando vi a Emily en la cocina mientras maldecía y ya también ebria, seguía hablando sola entre dientes fue tan fácil saber que era por James.

Emily estuvo muy ocupada concentrada en hacer su plan contra Christian que decidió poner sus sentimientos en segundo plano, evitó por un tiempo lo que sentía. Aunque eso no la ayudo, porque James siempre estuvo a su lado, nunca la dejo.

Yo lo vi. Muchas veces vi como James se quedaba en la madrugada en el mismo sitio de siempre esperando por ella hasta afuera de los suburbios para llevarla a su mansión o a la mía. Muchas veces James se contuvo de no mandar a la mierda todo, pero primero pensaba con cabeza fría. Tan fría como para seguirle el juego a la loca, para ayudar a Emily.

—¡Bueno ya estoy despierta!— dice levantándose de la cama mientras bosteza—Debo parecer un zombie.

—Dicen que los demonios y los zombies se llevan bien— digo molestándola mientras Emily ahora me lanza una de sus almohadas en la cara— ¡Joder, no te hagas la estúpida! Ni creas que olvido lo que tenemos que hablar.

Emily aprieta sus labios mientras se acerca al baño de su habitación dispuesta a arreglarse.

—¿Y acaso tú no tienes una resaca del demonio?— inquiere sobando su sien— Siento que ahora estoy a la par de Ryan con las neuronas quemadas.

Suelto una risa con carcajadas.

—Yo tome dos botellas de champagne, castaña— lardeo y ella abre sus ojos— Lo qué pasa es que Carmen ya me dio el regaño de la mañana mientras tomaba su sopa levanta almas de la resaca. También está esperando por ti...la sopa y el regaño.

Emily muerde su labio quejándose mientras golpea levemente su frente con el umbral del baño.

—¿Que tan tarde vamos a Green high?— alza su mirada.

Miro mi reloj y faltan treinta minutos para hacerlo. Pero conozco a Emily, tardara todo el tiempo necesario para evitar hablar de James.

—Nos quedan diez, castaña. ¡Mueve ese jodido culo!— empiezo aplaudir para apurarla— ¡Es rápido, joder! ¡Hoy tenemos el baile de las porristas! ¡Hoy son los partidos en Green high, muévete!

Emily entra a su baño apurada y escuchó algunos golpes que se da con las paredes o todo lo que se atraviese, lo cual me hace reír.

—¡Mierda! ¿¡Por que no me levantaste antes, rubia?!— escucho el eco que hace en su baño y luego otro golpe— ¡Auch!

Empiezo a reírme mientras me miro en un el espejo del vestier de la castaña.

—¡Apúrate! ¡Hoy quiero que enamores a todos los idiotas de la otra preparatoria, así que cuidado con la cara!— le grito bromeando—¡Depílate!