-Amo cuando sale tu lado cursi.- susurra con cansancio, incrementa su agarre en mis brazos y grita mientras puja.

-Por los dioses, esto es peor que la primera vez...- susurro.

-¿Su alteza?- miro a la enfermera.- ¿Se encuentra bien?- supongo que me veo pálida y asustada por esto.

-S-Si... Solo que no es bonito ver a la persona que amas sufriendo.- explico.

Después de tres arduas horas y de dolor en mi corazón por fin se dignan a salir los niños con un llanto muy intenso. Suspiro de alivio al escucharlos llorar y beso la mejilla de mi esposa mientras sonrío. Cierra sus bellos ojos, acaricio su vientre con delicadeza, una enfermera se acerca con una botella de alcohol y una venda, mi cuerpo se tensa al ver que moja un papel con el líquido que tanto odio. Cierra los ojos y toma uno de mis brazos, empieza a limpiar las pequeñas heridas que fueron provocadas por las uñas de mi esposa y suelto un jadeo de desesperación ante la acidez del alcohol puro entrando por la herida para después circular por mi sangre. La puerta se abre de golpe y entra Evan también adolorido, había olvidado que a veces los gemelos pueden sentir el dolor del otro.

-Señor, no puede estar aquí...- lo reprende la enfermera.

-Puedo estar donde me plazca, aleje esa botella de alcohol de mi hermana, es intolerante a esa sustancia, mueva su trasero lejos de ella.- gruñe, la enfermera sale despavorida de la habitación.- ¿Que tanto uso?- muerdo mi labio inferior.- Por los dioses, buscaré a Aline.- asiento para después verlo salir de la habitación.

-Lo siento, bebe.- escucho susurrar a Cris.

-No tienes nada de que disculparte, estoy bien.- sigo acariciando su vientre.

-Es mi culpa que esa tonta enfermera te haya puesto alcohol.- la silencio acariciando su cintura.

-Nunca será tu culpa, mi reina, sufriría lo que fuera mientras tú estés bien.- beso su coronilla.

-Brooke, ¿cómo diantres llegaste allí?- me río ante la pregunta de mi hermana.

-Era necesario para poder cuidar de mi esposa.- se acerca mientras sonríe.

-Son unas bobas, ¿mis sobrinos ya nacieron?- asiento.- Tendrás que dejar unos minutos a Cris, Evan se quedará aquí si eso te hace sentir mejor pero sabes que tenemos que sacar ese alcohol de tu sistema.- asiento.

-Ve, amor, yo dormiré.- se levanta un poco, lo suficiente para dejarme salir y bajarme de la camilla, vuelve a acostarse, la observo.- ¿Que tanto me miras?- sonríe un poco, junto nuestros labios y una rebelde lágrima resbala por mi mejilla cuando me separo de ella.- No llores mi amor.- trata de levantar su mano pero se lo impido.

-No te muevas, tú descansa, creo que ya tuve suficiente dolor.- me agarro de la camilla cuando me mareo.- Por los dioses...- Alguien me sostiene por detrás.

-Tranquila, soy tu hermana.- escucho a Aline.- Descansa cuñada, me la llevare para poder sacarle el alcohol que parece que ya le está afectando.- siento mi cuerpo entumido, me apoyo en Aline para poder caminar y salir del cuarto.

-Yo quiero estar con ella.- balbuceó, se ríe.

-Lo se Boo, no les pasará nada si se separan unos minutos.- llegamos a la sala de espera donde Damon le da un frasco con un contenido verdoso en su interior.- El alcohol ya está dentro de su sistema, actúa como si estuviera bajo los efectos de anestesia.- Me sientan en una de las sillas de la sala de espera.- Consígueme una cubeta de agua.- ordena mi hermana.

-Aline, ¿qué planeas hacerme?- pregunto confundida y asustada.- No me quiero morir, quiero ver a mis hijos crecer.- El temor me invade, cierro las manos mientras la ansiedad y el temor hacen que mi fuego interior hierva.

Un amor a lo prohibido [Terminada]Where stories live. Discover now