-¡Aléjate de ella Daniela!- cubro sus manos y absorbo el fuego.

-Recuerda, si no te sientes segura con ella sal del departamento y baja las escaleras, puedes emitir un mensaje con el fuego, solo confía en ti y en el.- sus ojos brillan, asiente, la suelto.

-¡Dije que la soltaras!- la aleja de mí, me río.

-¿Tienes miedo que le haga lo que papá me hizo? Que incrédula eres, Allison, no eres digna de ser una madre si desconfías de mí, no eres mi madre para mi.- Me levanto.- Adiós Daniela, cuídate.- se despide de mi con un abrazo, regresa a con su madre, me alejo de ellas, entro a la casa.

-¡Amor! ¿Te hizo algo?- niego.- Que bueno, me dijo que no quería seguir así, que estaba cansada de buscarte y que tú no hicieras nada.- sonrío.

-¿Para qué? ¿Para qué me prohíba usar el fuego? ¿Que piense que soy una abominación? ¿Un monstruo? No nena, no me dejaré intimidar por ella.- beso su frente.- No pienso ponerte en peligro con esa vieja aquí cerca.- tocan la puerta, suspiro, camino hacia ella y la abro, entran las amigas de Cris y me ven.

-Oh, Hola Brooke, ¿porque hueles a quemado?- Me río.

-Estaba tratando de no quemar la casa de un coraje por culpa de la mujer que se hace llamar mi madre.- suspiran, están al tanto de la situación de mi madre.- Cris está en el sillón, por favor, no la estresen.- asienten, siguen su camino.

Suspiro. Me siento cansada de que todo me enoje, por más que trato de contenerme siempre hiero a alguien con mis palabras. Me doy la vuelta, para mi sorpresa mi nombre está escrito con fuego en el aire. Respondo con un "¿sí?" A quien sea que lo haya enviado. Camino hacia la cocina con Bucky caminando entre mis piernas. Puedo sentir la mirada de las chicas. Entro a la cocina, abro el refrigerador, agarro una cerveza. Me la pienso si me la tomo o no, la devuelvo al refrigerador y abro un cajón, levanto un pedazo de madera, saco la cajetilla de cigarros, saco uno, guardo la cajetilla en su lugar, coloco el trozo de madera y cierro el cajón. Guardo el cigarro en el bolsillo de la chaqueta. Me giro.

"Soy Dani, solo quería conversar, mamá se ha enojado y ha soltado insultas a Hades, a papá, lo maldice por destruir a su niña." Leo en el aire, suspiro.

"Ignórala. No es culpa de ella que me hayan creado como un arma cuando me ilusionaron con su muerte." Escribo, salgo de la cocina, enciendo y apago varias veces una llama en mi mano mientras subo las escaleras ignorando la conversación que tienen las chicas.

"Eso intento... Está llorando... No sé cómo consolarla..." aparece su respuesta, entro al cuarto de invitados, abro la ventana y me apoyo sobre la base, saco el cigarro, lo enciendo, lo coloco sobre mi boca.

"¿Sabes? Solía abrazarla mientras le susurraba que estaríamos bien, que nadie nos podría separar y sucedió, nos separaron y me corrompieron a tal punto que nunca pude volver a sentir dolor al menos que padre me lo provocara, era un infierno estar con el... Habla con mamá, dile que quizás no sea esa niña que perdió años atrás pero que intenta mejorar su característica y que me perdone por comportarme como una idiota, lamento la palabra." Respondo, le doy una calada al cigarro y exhalo el humo.

"Está bien, ¿cuándo volveré a verte?" Pregunta, sonrío, mi hermana al parecer no es tan mala, es una niña muy dulce y piensa como un adulto a la hora de tomar decisiones.

"Cuando quieras apareceré en tu cuarto en secreto, mamá no puede enterarse o no regresaré a ese departamento o podría ir a verte a tu escuela" respondo, le doy otra calada al cigarro y exhalo el humo.

"En la escuela cuando esté en los recesos, es una escuela cercas del departamento, podrías esperarme detrás del árbol gigante, te veré allí con un amigo." Propone, sonrío, le doy una última calada al cigarro y exhalo el humo mientras lo apago, lanzó la colilla al bote de basura que está afuera.

"Bien, mañana iré a verte, solo dame el horario en el que sales a receso y estaré puntual." Afirmó a su idea.

"Genial, gracias Brooke, a las 11 te veré allí." Responde, así doy por finalizada la conversación, cierro la ventana, me giro y me encuentro a Anabeth, pego un brinco del susto.

-Me asustaste... ¿qué haces aquí?- se acerca.

-¿Con quién hablabas y porque estabas fumando?- Me pregunta seria.

-No tengo porque responder a tu pregunta.- la esquivo y salgo del cuarto, bajo las escaleras, vuelvo a entrar a la cocina, agarro un vaso y lo lleno con jugo de manzana, me lo tomo, dejo el vaso en el lavatrastos, camino hacia la sala, me dejo caer al lado de Cris.

-¿Todo bien?- Me pregunta, asiento, coloca su mano en mi rodilla.

-Qué bueno que llegas, Hemsworth, estábamos hablando sobre su boda.- inicia la conversación una chica que en mi vida había visto.

-Oh, lo lamento, no va a responderte si no te conoce, Brooke, ella es Natalie, puedes decirle Nat.- Me la presenta Ana.

-Hmmm, soy mala para dar ideas.- murmuro, cierro los ojos, apoyo mi cabeza en el hombro de Cris.

-Sí, nos consta.- se ríen.

-¿Amor? ¿Qué hacías en el cuarto?- me susurra mi novia.

-Hablando con mi hermana, le enseñe a enviar mensajes de fuego.- le contestó.

-Oh, ¿está bien?- abro los ojos y la miro.

-Si amor, ella está bien.- sonríe, le doy un corto beso en los labios.- Debo hablar contigo.- susurro, asiente.

Continúa su plática con sus amigas. Yo me quedo absorta en mis pensamientos en la extraña aparición de Anabeth. Odiaría que se hubiera enamorado de mí. Cris acaricia mi pierna, mi vista se va a su mano pero yo sigo pensando hasta el punto de perder la noción del tiempo. Reaccionó cuando las chicas se despiden, sonrío un poco, me quedo sentada mientras Cris las despide en la puerta. Cuando por fin estamos solas se acerca y se sienta sobre mis piernas, lleva sus manos a su vientre hinchado por las criaturas que carga. Rodea su cuerpo con mis brazos.

-¿De que querías hablar, bebé?- besa mi nariz.

-Anabeth. Parecía celosa de que hablara con mi hermana... Últimamente puedo sentir que me mira y se tensa cuando me tocas o me besas...- me mira seria.- No quiero que ella trate de arruinar nuestra relación, no quiero perderte, amor, no quiero ver un mundo si no estás tú a mi lado.- suspiro.- No me gusta... Me gustas tú pero odiaría lastimarla...- me besa obligándome a callarme.

El beso es salvaje y excitante. Cierro los ojos, Cris agarra mi rostro, se pega más a mí. Muerde mi labio para después separarse de mí. Abro los ojos. Puedo ver a través de sus ojos una llama de enojo y tristeza. El cargo mientras me levanto, rodea mi cuello con sus brazos y apoya su cabeza sobre mi hombro. Subo las escaleras con cuidado, entro al cuarto, la acuesto en la cama, me quito la chaqueta y las botas, me acuesto a su lado boca abajo. La miro, ella me mira tratando de descifrar que haré.

-Te amo... Lo digo de la manera más sincera y desde el fondo de mi corazón.- suelto, sonríe.- Los amo, a los 3, a ti y nuestros hijos que vienen en camino, son mi inspiración para seguir adelante.- acaricia mi cabeza, cierro los ojos.- Adoro cuando me acaricias, me relaja, mi cuerpo reacciona a tu tacto y me gusta.- suelta una pequeña risita.

-Lo hago para que puedas dormir en paz y no tengas tantas pesadillas mi vida, según tú no me doy cuenta cuando te despiertas sobresaltada y sudando para después levantarte al baño para poder calmarte.- abro los ojos, la miro, ella ya me está mirando.- Te veo y pienso que eres la cosa más maravillosa del mundo.- sonrío.

-Tú eres una de las maravillas del mundo, la octava y yo la conquisté.- me levanto y junto nuestros labios.- Deberías dormir, te ves cansada, esos bebes te agotan.- suspira, se acuesta, la rodeo con mis brazos.- Descansa mi hermosa novia.- beso su mejilla, cierro los ojos, me duermo cuando ella ya está dormida.

Un amor a lo prohibido [Terminada]Where stories live. Discover now