Capítulo 1

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Cuando era niña, me espantaba por películas de terror, cuando me llevaban al cementerio a enterrar un familiar o conocido. Muchas personas decían que era por tener sangre liviana, las entidades se aprovechaban de eso para estar junto a mi y no poder tener tranquilidad. Sufrí cantidad de veces por la misma situación. Mi abuelita es de las personas que creían que el diablo existe, porque en realidad está entre nosotros, era quien me quitaba los espantos. Pero nada se compara con lo que estoy sobreviviendo día a día, él era dueño de todo mi ser. 


Viernes 15 de septiembre 2018

A unos pasos de casa, todos se encontraban pasmados por la nueva llegada de un parque de diversiones, tenía muchas atracciones y los niños morían por estar en los carritos chocones. Pero ese día no era agradable, la noche se tornó fría y había neblina. A pesar de la novedad de las atracciones, el sitio no era de fiar, toda la ciudad sabía que frecuentemente aparecían cadáveres de personas torturadas, bebés en estado de descomposición y mujeres asesinadas. Aún así, llamó mi atención y me acerqué a un juego, pero no había nadie, ¿Dónde estaban todos?  El reloj marcó las 12:00 pm, mi abuelita me decía que a esa hora el diablo siempre andaba con ganas de almas puras. Estaba sola, con miedo, pero el juego aún seguía ahí, me di la vuelta con la esperanza de encontrar a alguien, todo desapareció, el juego se había ido. 

¿Porqué había desaparecido todo?

¿Y si algo me drogó?

Pronto noté mi situación: me encontraba en la inmensa soledad sin nada a mi alrededor, sin que nadie me ayudara.

Empecé a correr, pero mientras más corría nunca llegaba a la calle, era como si estuviera en un sueño, tratando de alcanzar algo imposible. En medio de la desesperación y miedo, decidí llamar pero la batería de mi maldito teléfono estaba agotada.

Grité y lloré, pero nada funcionaba, nadie venía por mi, ya sin nada más que hacer, traté de convencerme de que era una terrible pesadilla de la que pronto despertaría. Esperé, pero nada pasó.

Nunca desperté.


En nuestro secuestro nos conocimos [Siniestro #1] (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora