CAPÍTULO 46: VOLVIENDO A CASA

Start from the beginning
                                    

Nada de lo que dijo Kate logró calmar mi dolor. Es tan grande el daño que le hice a Christian al abandonarlo, que no sé si me pueda perdonar a mi misma.

Llegamos a casa de mi abuela.

-¿Qué ha hecho Christian estos días?
-Ha estado con Elliot- me dice Kate.
-Fui una estúpida, debí  decirle que me fui a Londres, no debí cortar todo contacto con él- me lamento
-Él sabia que estabas en Londres.
-¿Cómo?- Me he quedado perpleja.
-Esa chica rara se lo dijo.
-¿Quién?
-Se me olvidó el nombre, pero decían de ella que era una mafiosa del Internet y que nunca ha revelado su verdadero nombre y edad.
-¿Luziana Grant?
-Si, ella.
-¿Y qué dijo Christian? ¿Iba a ir por mi?

Estoy ansiosa.

-Ya llegó Ofelia con tu padre. Salgamos del auto.

¿Que estás ocultando Kate?

Ya he dejado de llorar pero el dolor en mi pecho continua.

Kate sale del auto y yo también lo hago.

-Debí irme a Montesano- vocifera mi padre.
-Deja de quejarte, aquí estarás bien- responde mi abuela
-Lo que tu digas, Ofelia.

El chofer de mi abuela baja el equipaje y entramos a la casa. Yo sigo inquieta incluso nerviosa

-Kate... ¿por qué no me respondiste?
-¿Qué no te respondí?
-No te hagas la desentendida - espeto.
-Ana, estoy feliz que estés de vuelta.
-Por favor- insisto.
-Es que no te gustara oirlo, seguramente te vas a decepcionar.
-¿Christian... conoció a alguien?- Por favor di que no.
-No... pero.
-Dejen de chismosear - interrumpe mi abuela.
-Si me disculpan, iré al baño- añade mi padre.
-Ya sabes donde está el baño- dice Ofelia.
-Permiso, damas.

Kate se sienta en el sofá y yo me siento a su lado.

-Kavanagh, se honesta conmigo ¿Qué ocurre con Christian?- Estoy desesperandome.  
-¿Ocurre algo malo con ese muchacho?- Pregunta mi abuela.
-Christian, decidió olvidarse de Ana

Por segunda vez en este día mi cuerpo se congela.

-¡¿Que?!- Chilla mi abuela.
-Si, él cree que lo mejor es dejar a ir a Anastasia.

Por Dios ¿Qué hice?

-Seguramente lo dijo de la boca para afuera- responde Ofelia.
-Yo pienso lo mismo. Cuando te vea nuevamente enloquecerá- añade Kate.

Otro cúmulo de lágrimas cae por mis mejillas.

-Todo... todo fue mi culpa. Ahora lo entiendo, nunca debí irme.

¿Por qué fui tan impulsiva? Maldita sea! Que estúpida fui. Nunca debí marcharme, nunca debí dejarlo. Ahora me tocará pagar las consecuencias de mis actos y aunque me duela más que cualquier dolor físico me lo merezco por imbécil y no luchar por lo que realmente quería. Lo amo pero le hice demasiado daño.

-Ya no sigas culpandote. Ustedes necesitan una buena conversación- dice Ofelia.
-No pasará... yo lo dejé y ahora me tocará cosechar lo que sembré, si él quiere olvidarme no se lo impidiré aunque sienta que muero por estar con él.  
-¡¡¿Estás loca?!! Estas aquí por él, ahora no quieres luchar- me recrimina Kate.
-¡¡¿No lo entiendes?!! Le hice daño, le dije cosas horribles cuando estaba enojada con él, luego lo ilusione y lo abandoné, no merezco nada de él.
-Ana, no te equivoques más... Búscalo y como dice tu abuela, hablen. No te rindas- me dice mi amiga sosteniendo mi mano.
-No, Kate. Tal vez sea mejor. Ambos nos herimos mucho. Él trató de destruirse por el dolor que le causé. Yo también lo dejaré libre.
-Lo que sea que hagas, cariño, no estarás sola- me da un abrazo mi abuela.
-Si. Nos tienes a nosotras y a tus padres- añade Kate y se suma al abrazo.
-Bien. No sé qué suceda, pero un viaje de doce horas cansa. Si me disculpan, iré a dormir, y a menos que me espere Kim Basinger con unas cervezas y vestida solo con un jersey de los halcones, no estoy para nadie- llega mi padre de vuelta a la sala y bromea.
-Ni en diez vidas vendrá por ti esa mujer- le dice mi abuela.
-Genial. Entonces no me despierten- es lo último que dice mi papá y se va a una de las habitaciones.
-Descansa, cariño. Ya después veremos cómo conquistas al mundo, o a Grey, lo que se nos ocurra primero- añade mi abuela y sonríe para darme ánimos.

TE QUIERO SOLO A TÍ Where stories live. Discover now