Narra Camila:
Desde que salimos de la heladería, sentí a Lauren demasiado distante y molesta. Durante el almuerzo no me dirigió mirada y me entristece que no me cuente lo que pasa por su mente.
-Ayer fueron a dormir demasiado temprano, chicas. Nisiquiera cenaron.-Menciona mi padre-.
-Ohm, estabamos cansadas-Responde Lauren con una leve sonrisa y sonrío al recordar lo ocurrido ayer-.
El almuerzo transcurrió entre conversaciones de mis padrinos y mis padres. Al parecer Lauren no tenía ganas de hablarme, por lo que comencé a profundizar en el motivo de su molestia.
¡Bingo! El tipo de la heladería, desde que comenzó a alardearme, creí notar a Lauren demasiado tensa y enojada.
¿Será que está celosa? Wow, lo mejor será hablar de esto, para ello al acabar mi almuerzo me levanté mirando a Lauren.
-¿Demos un paseo?
-Ajá-Dijo levantandose y despidiendose-
Salí de la casa seguida de Lauren, la miré extendiéndole mi mano. Desganada la tomó mientras fijaba su vista en el cielo.
-Muy simpático el tipo de la heladería ¿no?-Quise comprobar mis sospechas por lo que jugaría un rato-.
-Oh, si quieres nos devolvemos y le pides su número-Dijo con la quijada apretada y soltando mi mano-
Sospechas comprobadas. Lauren estaba ardiendo en celos y no sabía qué hacer.
-¿Por qué querría el número de un imbécil que se cree galán, si tengo una preciosa novia que no se compara ni con Brad Pitt?-Pregunté mirándola con cariño-.
Por la sonrisa que salió de sus preciosos y apetecibles labios supe que estaba más calmada.
-Bueno, en ese caso, no debo de preocuparme-Dijo frunciendo los labios y tomando nuevamente mi mano, entrelazando nuestros dedos-
-No conocía tu lado celosos posesivo, Jauregui-Dije en tono burlón mientras besaba sus nudillos-
-Nunca fui celosa antes-Dijo y tenía razón, nunca antes había visto que estubiera celosa con anteriores relaciones-.
-¿Por qué ahora sí?-Pregunté curiosa-
-Porque te quiero solo para mí.-sentenció deteniendo el paso y apegandome a su cuerpo-
Me aferró a su cuerpo tomándome por la cintura. Nuestras narices rozaban, sentíamos nuestras respiraciones aceleradas y nuestros felices corazones bombear acelerados.
-Ya me tienes completamente a tu disposición-Dije para atrapar sus labios con los míos-
Mis manos danzaban alrrededor de su cuello, Lauren acariciaba mis costados haciéndome sentir realmente bien.
Luego de la sinfonía dada por nuestras lenguas, nos separamos debido a la falta de aire.
-Dios, jamás me cansaré de probar esos labios-Me dijo al oído para dejar suaves besos en mi mejilla-
-Yo no me cansaría de probarte entera.-Me abracé a ella fuertemente-
Sin darnos cuenta estabamos en medio de la calle, para suerte nuestra, ningún auto quiso arruinar nuestro momento de reconciliación.
Decidimos volver a casa, ya se estaba atardeciendo. Tomadas de la mano y disfrutando de nosotras y del precioso atardecer.
-Amor, debemos empacar rápido-Dijo exaltada-olvidé que mañana tendremos que mudarnos-me miró emocionada-
-AH-solté un gritito de felicidad- es cierto, amor.
Nos apresuramos en llegar y rápidamente subimos a empacar todo en cajas de cartón.
En menos de dos horas ya teníamos todo empacado y nos llamaron a cenar.
-¿Con que mañana nos abandonan, niñas?-Menciona mi padre luego de sentarnos-
Lauren y yo reímos al unísono.
-Los vendremos a ver de vez en cuando, tampoco nos iremos muy lejos-Dije y solté una risa-
Y era cierto, nuestra nueva casa quedaba muy cerca de acá, en unas cuantas calles más lejos.
- Al menos podremos dormir sin ruido-Menciona mi padrino con gracia-
Lauren me miró roja como un tomate y comenzamos a reír.
Terminamos de cenar y lavamos los platos.
Luego subimos y yo me metí al baño ya que iba a darme una ducha.
Me desvestí y dejé la puerta entreabierta, quizá Lauren también quería meterse conmigo como ya era costumbre.
Abrí la llave y las cálidas gotas de agua me cubrieron. Al cabo de un par de minutos sentí el pene erecto de Lauren contra mi espalda y sonreí ampliamente.
-Hola, hermosa-Dijo contra mi oído con su voz rasposa-
Lauren me giró y me miró a los ojos con una sonrisa para luego besar mi frente repetidas veces.
Comenzamos con besos tiernos que poco a poco se tornaron calientes.
Tenía a Lauren con su boca en mi cuello, mordiendo y chupando mientras yo gemía.
-A-Ah-Jadeaba entrecortadamente-
Lauren bajó una mano a mi centro y con su pulgar y su dedo índice comenzó a frotar mi clítoris.
Solté un grito de placer. Dios, me iba a derretir, trataba de no venirme al instante lo cual se me dificultaba un poco.
-Dios mío, sigue así mi amor.-Dije gimoteando mientras me abría más para ella-
Me aferré a su cuello mientras lo mordía y saboreaba a mi gusto.
Bajé mi mano hasta agarrar su pene y con entusiasmo la masturbaba.
Lauren soltó un sonoro gruñido y me besó, me besó con pasión y a la vez ternura.
Luego de masturbarnos mutuamente nos corrimos al mismo tiempo soltando grandes gemidos.
-Oh, te amo, te amo-Dijo para besar mis rosadas mejillas-
- También yo, mi vida-Sonreí-
Continuamos con la ducha y al acabar Lauren me arrulló en una toalla para después cubrirse con una.
Me vestí con mi pijama y Lauren como siempre solo con bóxers y una polera sencilla.
Nos lavamos los dientes y ya estabamos listas para dormir.
Me acomodé en mi lado de la cama y Lauren se acomodó en el suyo.
Esperaba que me abrazara como siempre pero no lo hizo, me dí la vuelta y la ví mirando el techo con semblante preocupado.
-¿Pasa algo, mi amor?
-Amor ¿estás segura de querer vivir conmigo?-Me miraba ¿asustada?-
-Por supuesto que sí, mi vida-Sonreí con ternura- todos los días de mi vida los quiero vivir contigo.
Lauren sonrío ampliamente y se acerco a besar mis labios.
-Te amo.-Me dijo-
-Te amo.-Le respondí sonriente- ahora a dormir, mañana tendremos que madrugar.
Me dí la vuelta y los cálidos brazos de Lauren me cubrieron.
Entrelacé nuestras manos y nos dormimos.
YOU ARE READING
La hija de mis padrinos.|Camren (G!P)
RomanceSe conocen de toda la vida pero cuando crecen comienzan a verse con otros ojos.