''PROHIBIDO'' -Secretos De Mi Vida

Capítulo 5

Carrie

5:40 P.M.

La lluvía se volvió más densa, traté de localizar a mis amigos en el celular pero tenía muy poca señal. Y sorprendentemente a mi madre al parecer no le interesó que su única hija no hubiera llegado a casa.
"Estoy muerta del cansancio. Necesito hacer tareas... Hijo de la..."

-¡Aaah!. -Sacudo mi cabeza, golpeo mi frente y brincoteo.

"Increíble aún eres una berrinchuda."

Una gran ráfaga de aire hace que me resbale en el mojado piso, trato de contenerme pero afortunadamente el viento se detiene, un gran y fuerte estruendo aparece trayendo con él una electrizante luz, mi cuerpo cae al suelo, siento como en mi ya sensible cuerpo recorre una pequeña y vibrante energía, cansada e incapaz, siento la fría agua de la lluvía que se encontraba ya en el suelo como ahora toca mi cuerpo, tan fría como la nieve, comienzo a temblar y mis ojos poco a poco se cierran dejándome ver al menos que cerca de mi ya hace una reconfortante y molesta silueta.

*

-¿Mami?... ¿Mami dónde estás?... ¿Mami?...

No puedo encontrar a mi madre, me encuentro en la que parece ser la casa de mi primo John y su familia, y donde según se encuentra mi madre; pero ahora no se donde están ellos, recorro la casa desde la sala, cuartos y hasta la cocina, cada esquina, nada, salgo corriendo a la calle y de nuevo nada, aquí no se encuentra absolutamente nadie, estoy totalmente sola...

-¿A dónde te diriges preciosa niña?. -Dice una voz masculina detrás de mi.

-Busco a mi mami y a mi primo John. -Me volteo a él. Enormes pies con uñas largas, piernas en cuclillas, brazos recogidos hacia su pecho, manos hacia bajo con uñas largas y fuertes como garras, todo él está cubierto de pelaje blanco, nariz respingada y pegada a la boca como la de una rata, con dos dientes terriblemente grandes y filosos sobresalientes de ella, largos pelos adheridos a su misma nariz, enormes y redondas mejillas, ojos enormemente grandes y completamente negros, con venas sobresalientes de sus grandes y alargadas orejas.

-¿Qué cosa es usted? ¿Cómo llegó aquí?.

-¿No es obvio? Soy un conejo, un tierno, bonito y dulce conejo. -Se da media vuelta mostrándome con tiernas vueltas su esponjocito rabo.

-No tengas miedo... Yo seré tu amigo...

Se voltea a mi y ahora todo su pelaje blanco esta cubierto de sangre, sus ojos aún más grandes y en sus dientes contiene residuos de piel.

-Eres una encantadora dulzura...-El toca mi cabello.

-Lo siento... Tengo que buscar a mi mami.

-¡Bien! Entonces, ¿me permites acompañarte? Este es un horrible lugar llenos de horribles cosas y las personas de este lugar están locas... -Ríe para luego mirarme serio.

-Entonces, ¿por qué confiar en usted?. -Lo miro de pies a cabeza y él levemente sonríe.

-¿Y por qué no? Tu mami y tu primo no están aquí, estás sola. E incluso tu papá te abandonó... por otra familia. -Poco a poco sus piernas pasan de estar en cuclillas a completamente rectas.

-Ahora se ve más alto... -Susurro, él se acerca a mi oído.

-¿Y eso te asusta?. -Un penetrante y desagradable olor a huevos podridos se siente. El interior de mi nariz arde, profundamente quema, toco parte de ella y en efecto hay sangre; mis ojos se sienten cansados y él solo se ríe.

-¿Cómo sabes lo de mis papás?¿Quién eres enrealidad y qué haces aquí?.

-Si tanta curiosidad tienes por qué no entras de nuevo y lo averiguas. -Señala la casa de mi primo. -Vamos, prometo que me quedaré aquí.

Camino hasta entrar a la casa, esta vez el olor a huevos se siente por todos lados, hay sangre en las paredes, muebles y ventanas rotas, juguetes de niños esparcidos por los diferentes cuartos, algunos de ellos con sangre. Un camino de cuchillos enterrados en el suelo de madera me lleva al cuarto principal y mis lentos pasos lo hacen crujir, una enorme cara sonriente pintada con sangre se encuentra en la pared. En el tocador hay fotos de mis papás con la familia, tomo uno de los portaretratos donde se encuentra una fotografía de mis padres, está roto y con huellas de sangre en él.

-"Corre princesa." -Una débil voz masculina se hace presente en la habitación. Miro a todos lados pero de nueva cuenta no hay nadie, más que el enorme conejo que me mira a tráves de la gran ventana que da hacia la calle.
Sonríe, su cabeza se inclina un poco de lado y de nuevo vuelve a su lugar para comenzar a caminar.

-"¡Corre!." -Dice la voz de nuevo. El portaretratos se cae de mis temblorosas manos y comienzo a correr en dirección de la salida trasera.

-¡Auxilio! ¡¿Mami dónde estás?!.

-No seas tonta, te dije que no está aquí. -Su voz se escucha más cerca

-¡Lárgate!

-¡Te he dicho que no! Si no me obedeces te haré exactamente lo mismo que a ellos... Así que ven...

Un silencio inunda la casa, mi mano tiembla al querer agarrar la manija de la puerta, doy media vuelta y una gran sombra estática se encuentra a unos cuantos metros cerca de mi.

-Ay pequeña... Te tomaré y destrozaré por completo... Justo como a ellos.

La puerta se abre y yo salgo de ahí, llego al bosque, el frío hace que tiemble y un cosquilleo recorre mi ser.

-¡Déjala!. -La voz de mi madre se hace presente. -¡Ella es solo una niña! ¡Ella no tiene la culpa! ¡Déjala!...

Mi mente da vueltas, yo doy vueltas, golpeo algo sólido y muchas siluetas aparecen ante mi.

-Miren. ¿Pero qué tenemos aquí?. -Dice un hombre con una enorme sonrisa pintada, cara blanca y lágrimas rojas pintadas, cabello rojo esponjoso y cuchillos parecidos a los enterrados en la casa de mi primo.

-¿El payaso encontró a nuestra cumpleañera?... -Dice otro oliéndome.

-¡No te acerques!. -Lo golpeo sin verlo, éste toma con fuerza de mis brazos y yo cierro mis ojos.

-¡No me golpees! ¿No ves que yo soy tu primo? No te haré daño... -Poco a poco lo miro, el rostro de mi primo pero con otros ojos y otra boca.

-¿Te gusta mi nueva máscara?. -Dice el sujeto.

-¡Aléjate de mi! ¡Tú no eres mi primo!. -Mi vista aún más borrosa nota una sonrisa proveniente del sujeto. Minutos después me encuentro corriendo en dirección a la casa de mi padre. Entro por delante, busco de nuevo personas pero aún no hay nadie.
Escucho pasos y voces en la cocina.

-¿Cómo carajos se les puede escapar una niña de 5 años?! ¡Tienes solo 5 putos años!

-Mami... Papi... Ayudénme por favor...

*