I still wait for you | 2 | Grayson Dolan (terminada)

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Despierto a la mañana siguiente de la misma forma. Me duelen un poco los ojos y siento la cabeza pesada. Miro el reloj de pared, es temprano todavía, Grayson debe estar dormido, pero prefiero arreglarme para estar decente el primer día de trabajo.

Me doy una ducha rápida y me dirijo a pasos rápidos a la habitación de Grayson para tomar algo del ropero.
Lo veo dormido en cuanto entro, así que intento no hacer ruido y escojo finalmente un vestido corto de color rojo vino. De igual forma tomo unos zapatos y salgo de la habitación lo antes que puedo.

Me aplico algo de maquillaje, al menos para cubrir mis ojeras. Me cepillo los dientes y dejo mi cabello lacio. Me veo una última vez en el espejo, y cuando me siento convencida salgo hasta irme.

No quiero hablar con Grayson ahora, todavía estoy dolida pero no podré evitarlo siempre.

Subo a mi auto cuando bajo al estacionamiento. La radio se activa automáticamente, entonces me abrocho el cinturón de seguridad y decido irme.

El camino es rápido y sin incidentes, así que una vez llegando al lugar vuelvo a sentir los mimos nervios que tuve en la entrevista, quiero decir, ya conozco el lugar, pero eso no ayuda en nada realmente, hoy las cosas serán diferentes.

Me quedo en el auto unos minutos, matando el tiempo e intentando relajarme mientras aprecio el edificio que ahora se ha convertido en mi primer trabajo decente y serio.

Pego un pequeño brinco cuando escucho mi celular sonar. Lo saco rápidamente de mi bolsa y miro la pantalla; Ethan.

—¿Hola? —digo confundida.

—Hola, Leah, ¿me recuerdas? Soy tu mejor amigo, solías hablar conmigo —dice del otro lado de la línea y no evito reír.

—Lo siento, Ethan, he estado ocupada, pero juro que iba a llamarte —muerdo mi labio inferior y arrugo la frente.

—Está bien —suelta una risita. —llamaba para saber de ti, hoy es tu primer día de trabajo, ¿qué tal todo?.

—Ogh —suspiro. —la mañana fue un poco cruda, discutí ayer con Grayson.

—¿Por qué? Llevaban tiempo sin hacerlo.

—Lo sé, te cuento después.

—Me lo cuentas hoy en la comida.

—¿Qué comida? —frunzo el ceño.

—La comida de hoy en casa de mis padres, Grayson me dijo que te invitó.

Cierto, era la comida de la que Grayson me habló hace unos días.

—Sí, perdón —toco mi sien cerrando los ojos. Mi cabeza está hecha un lío.

—Bueno, espero verte ahí, ¿hay algún motivo para matar a Grayson?.

—Descuida, no lo hay —miento. Desearía matarlo yo misma.

—De acuerdo, te veo después, suerte en el trabajo, te irá bien.

—Gracias, eso espero.

Finalmente dispuesta, y después de colgar, bajo del auto para encaminarme hacia el lugar. Cruzo la puerta, y una vez dentro miro a la secretaria de la entrada, me acerco tímida y cuando me nota, sólo sonríe.

—¿Puedo ayudarte en algo?.

—Sí, soy Leah Jo...

—Leah Johnson —alguien interrumpe completando mi nombre. Una voz gruesa y masculina detrás de mí.

Me giro al instante un poco intimidada, y veo a un hombre, vestido normal y con una sonrisa de oreja a oreja.

—Bienvenida —se acerca alegre. —Grace me ha hablado muy bien de ti.