Viviendo Entre Bestias

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—Me lo has prometido Elena, no puedes decirle a nadie. — Dice caminando junto a mi.

—Te dije que no hablaré. ¿Ademas quién coño me creería? — Pregunté.

—Absolutamente nadie. —Dice adelantándose  —Hay que ir a clases— ordena. —Ya has faltado a las primeras dos. — Liam me parecía tan apuesto, odiaba que me gustara tanto.

—Si, pero primero iré por un abrigo extra. — Digo. Llegamos a la habitación, busco mi campera y él busca un libro.

—¿Entonces ya somos amigos de nuevo? — Pregunta parado en la puerta de la habitación.
Estaba vacía, los demás seguramente estaban en clases.

—Estamos en paz pero no eres mi amigo. — Le digo sería.

—Acabo de contar algo que puede determinar si vivo o muero ¿Y aun asi dices que no somos amigos?— Parece indignado.

—No exageres. Solo compartimos valiosa información entre nosotros.  Ahora me voy a clases antes que me regañen. — Digo intentando marcharme.

— Vamos te acompañaré a clases, para que llegues sana y salva porque tienes un raro imán para que te pasen cosas terribles—  Comenta divertido.

—Debo estar maldita, mantente alejado porque podrías salir lastimado.— Advierto.

—Correré el riesgo. — Susurra con una sonrisa en sus labios. Abrió la puerta para irse pero la cerró y se volvió a mí de prisa. De un momento a otro estaba muy cerca, tanto que las puntas de nuestros pies se tocaban.

—¿Te gusta James?—  Preguntó. Liam era tan alto que debía mirar para abajo para encontrar mi mirada. Apuesto un chocolate que yo tenía cara de boba en este preciso momento. —Dime la verdad.— Pide.

—No hablaré de eso contigo  —.

—¿Porque no ? Somos amigos, podemos hablar de lo que sea. Y si te gusta James me gustaría saberlo.

—¿Que diferencia hay si me gustara James o no ? — Pregunto.

—No lo se, simplemente me gustaría saber si sientes algo por él.

—Quizás me guste un poco. Quien sabe. — Susurro.

—James es un buen partido, es un excelente chico —Me miraba serio, la forma en que lo hace provoca que mi nuca pique y mis mejillas se calienten

—Lo sé —respondo.

—Pues que gusto por ustedes. Serían la pareja perfecta— Dice,  se aleja y abre la puerta. —¿Vamos? — Pregunta.
Asiento y lo sigo.

—No Liam, tu y yo seríamos la pareja perfecta —  suspirando resignada.

Liam tenía clase de química y yo de literatura creativa, así que entró a su salón y yo seguí por el pasillo desierto hasta el mío.

—¿Dónde rayos te habías medito?— Encontré a Will a mitad del pasillo.
—Estaba tan preocupado por ti— Me dice en tono de padre enojado.
Sus ojos me miraban molestos.

—Estaba... por ahí. No quise asustarte... lo siento— Me acerqué a él

—Pues lo hiciste Elena. Este lugar es peligroso para ti, no puedes desaparecer así sin más. No eres una niña empieza a comportarte. Te mandé mensajes, simplemente debías decir que estabas bien — William se veía enojado.

—Will lo siento —Murmuré, jamás me había hablado de esta forma, me sentí pequeñita.
Él era quien estaba siempre de mi lado y ahora me miraba con enojo.

—No lo sientas, sólo la próxima dime que estás "por ahí" así no nos volvemos locos buscándote. ¡Cielos! Pensé que ye había sucedido algo muy malo— Su mirada era tan fría no parecía mi amigo

¿Tanto la había jodido?

—Estaba con Liam, nada me pasó- Atiné a decir

—¿Con Liam?- rió molesto —Y yo como idiota buscándote. Soy un estúpido   —Niega con la cabeza.

—Thomas Y Talbot ¿No creen que ya están demasiados retrasados, como para estar platicando a la mitad del pasillo?- nos interrumpe la profesora

—Lo siento profesora- dije, agaché la cabeza y caminé hacia el salón de clases, me senté sola ya que Will ni siquiera entró.

Después de mis clases, me doy una ducha caliente, no tenía hambre pero tampoco me apetecía estar sola en la habitación.

—William lo siento, no quise preocuparte solo... estaba hablando con Liam acerca del asusto del... bosque— Digo cuando me senté a su lado en la cena. Le pongo mí mejor cara de cachorro.

—Esta bien. Solo no seas terca y ten cuidado Elena, Hay mas pendejos como Lewis. La mayoria son niños ricos acostumbrados a salirse con la suya. No quiero que te hagan daño. —Asiento sintiéndome mejor al saber que Will no estaba enojado conmigo.

—Si lo sé. Lo siento mucho. No quise preocuparte. — Digo inclinándome hacía él. —Le contaste a Liam sobre el... Lobo. — Le dije un poco molesta.

—Creo que él nos puede ayudar— Asiento, sabiendo que tenía razón.
Me preguntaba si William sabía lo que era Liam, no era mí asunto, no me metería en ese drama.

James llega con Jacob a la mesa, Liam aparece con Selena.
Odio la forma en la que me mira, como intenta hacerme sentir mal.
La ignoro, no vale la pena.

—¿Dónde te habías metido toda la mañana? — Pregunta Jacob. Su tono de voz era gruesa y sentía un poco de molestia en ella.
—¿Tendremos que ponerte un gps como a los perros? — Pregunta con molestia.
Miro a Liam sabiendo que si decía que estuve con él, Selena nos armaría un escándalo.

—Estuvo conmigo, estudiábamos para el examen de matemáticas.— Rápidamente habla Liam.
Selena nos mira sin poder creerlo.n

—¿No fuiste a la segunda clase por estar con ella? — Parecía indignada.
—Creí que fui clara contigo, no te quiero cerca de mí novio. — Me advierte.

—Por favor Sel, te lo pido por favor no empieces. — Dice Liam aburrido.

—Solo estudiamos — Intento.

—¿Solos? — Los demás están disfrutando de este drama. — No me gustan que pasen tiempo solos. Prometiste no estar con ella.

—Elena es mí amiga. Ya terminemos este drama innecesario. — Pide el chico.

—No seas insegura Sel, ellos duermen en la misma habitación, si quieran engañarte ya lo hubieran hecho. — Comenta Jacob divertido, Selena se pone roja de la rabia.

—Jacob no seas inmaduro. — Comenta William. Liam lo mira molesto.

—¡Estoy arta de estar compitiendo por tu atención! ¡Vete al carajo! — tira su comida y sale enojada.

—Gracias Jacob, eres tan imbécil.— Comenta Liam fastidiado

—A veces eres muy molesto amigo. — Le dice William.

—Oh vamos, solo fue una broma. — Susurra.

—Si, solo a ti te dio gracias. ¿Porque la  haces enojar? ahora se la agarra conmigo. — Liam parece cansado del mismo drama de siempre.

Cuando la noche cayó y me encontré en mi cama apunto de dormir. Recién ahí caí en cuanta en lo que había pasado.

¿Y si Liam no era el único ser sobrenatural de este lugar?.

Si alguien me hubiera dicho que los ángeles eran reales me habría reído en su cara. Ahora empiezo a creer que las historias que cuentan sobre seres sobrenaturales son reales.

La puerta se abrió, despertándome de mi sueño, Vi entrar a James a la habitación a hurtadillas, venia desprolijo y despeinado, eran pasadas las 3 de la madrugada

¿Dónde andaba a esta hora de la noche? Y lo principal ¿haciendo qué? y ¿con quién?.

—Lo siento, pensé que dormías- me dice cuando me doy vuelta en mi cama para acomodarme mejor

—Estoy en eso- susurré. Al quedar enfrentada a la cama de Jacob para encontrarla vacía.

¿Dónde demonios estaba Wood?.