70 - Ofrenda Sangrienta.

5.3K 393 100
                                    

Otro día más, y la rutina es agobiante, aunque ahora espero con ansias poder pasar tiempo junto a Jacob.
No es como si pudiéramos estar a solas mucho tiempo pero hoy encontraría un momento para escabullirme de todos y poder verlo.

Al despertar, me siento tranquila de saber que él está ahí.

Después del desayuno no lo ví, él iba unas materias adelantado por lo que no siempre compartíamos clases, y el colegio era tan grande que muchas veces ni siquiera lo cruzaba.

Al salir de mí tercera clase del día encuentro a Luke esperándome parado junto a mí casillero.

—Hola — Saluda tímidamente.

—¡Hey Luke! Hola—Intento no ponerme nerviosa, ni demostrarle emociones algunas. Sé que puede sentirlas.

—¿Cómo has estado? Parece que ha pasado demasiado desde que pudimos hablar — Dejo mis cosas en mí casillero.

—Si. Lo sé. He estado muy ocupada últimamente. ¿Tú cómo has estado?— Sonrío con falsedad. Intentado aparentar simpatía.

—Sé que me evitas por miedo a lo que soy, y está bien. No te juzgo, yo también lo haria solo me gustaría poder recuperar lo que teníamos. Sé que no éramos amigos pero nos llevábamos bien, y eso me agradaba.

—Si. Tienes razón. ¿Quieres que merendemos juntos más tarde? — ¡Dios! ¿Porque no puedo tener mí boca cerrada ?

—¡Fantastico! Si! Me gustaría. —Me sonríe y mí estómago se retuerce.

Todo mí cuerpo me decía que me aleje de este chico, mis sentidos me gritaban peligro, y yo simplemente intentaba no ser paranoica

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Todo mí cuerpo me decía que me aleje de este chico, mis sentidos me gritaban peligro, y yo simplemente intentaba no ser paranoica.

—¡Elena! ¡Llegaremos tarde al almuerzo! — Me dice Liam unos metros atrás.

Lo mira a Luke con desagrado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lo mira a Luke con desagrado.
El rubio me da una media sonrisa y se marcha, sin decir más.

—Gracias Liam, pero no tengo hambre — Respondo.

—¡Deja de evitarme! — Me dice serio sin moverse de su lugar. Es tan alto y enorme que intimida un poco.

Sonrío por su comentario.

Viviendo Entre BestiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora