*Baby you look perfect tonight* [Minsung]

CAPÍTULO 7.

Minho: oye Jisung lo siento si te hemos agobiado hoy
Minho: es solo que estamos preocupados
Minho: ha pasado algo?
Minho: es que mis amigos no te caen bien?
Minho: he hecho yo algo mal...?
Minho: lo siento..
Jisung se empezaba a sentir fatal. Le gustaba estar con las chicas, eran muy majas todas y le trataban muy bien, pero Minho no dejaba de estar apenado y se sentía culpable.
Changbin fue a ver a Jisung de nuevo al final de la semana.
-No quería intimidarte el otro día - Jisung asintió, aceptando su disculpa no dicha -. ¿Podemos hablar tranquilamente?
-Preferiría que no...
Una voz le interrumpió.
-Míralo, otra vez está con uno de ellos. Se la habrá chupado a todos para estar en su grupo.
Un coro de risas.
Jisung estaba demasiado avergonzado como para encontrar la mirada de Changbin, pero podía sentir la ira emanando de él. Antes de que Jisung pudiera decir que no pasaba nada, que estaba bien, Changbin ya había ido hasta el grupo de chicos y había cogido al líder por el cuello. El ruido que hizo su cabeza cuando Changbin lo estampó contra la pared resonó por todo el pasillo.
-Repítelo - dijo Changbin con una fría calma que mandó una extraña sensación a lo largo de la columna de Jisung.
-Lo-lo siento. No sabía que eras tú, ¡lo siento! - se disculpó el chico patéticamente.
Jisung sabía que era el capitán del equipo de baloncesto y a pesar de la diferencia cómica de altura entre él y Changbin, nadie parecía dudar que el más pequeño podría machacarlo.
-¡Changbin! - oyeron a alguien exclamar. Minho y el resto de su grupo salieron de la cafetería a toda prisa. Hyunjin y Woojin se apresuraron a separar a Changbin del otro estudiante y Minho corrió en la dirección de Jisung.
Lo miró muy de cerca con la preocupación inundándole su perfecto rostro.
-¿Estás bien, Jisung? ¿Te han hecho daño?
-Estoy bien - le aseguró pero su voz temblaba por la impresión.
Woojin y Hyunjin habían conseguido separar a dos que iban a pelearse y el jugador de baloncesto fue rodeado por todos sus amigos. Unas chicas que iban a la cafetería observaban la escena. El pasillo no tardaría en llenarse de gente curiosa.
Minho agarró a Jisung por el brazo con delicadeza y su toque ardía sobre la piel del chico.
-Vamos a otro sitio, ¿sí?
Y cuando Minho le sonreía así no podía negarle nada.

Nombres de los personajes en negrita: mensajes de móvil.
Cursiva: pensamientos o sueños