—Dormí con Liam— Dije rápidamente. Su rostro se vuelve serio. — Tuve un ataque de pánico, supongo que estaba asustada que algo te sucediera y él solo me ayudó, pero creo que nos dormimos y cuando desperté Selena quería asesinarme, James y Jacob están enojados conmigo y me súper pelee con Liam así que, Sí. Quiero esconderme aquí contigo del mundo en general. — Todo aquello salió de mí sin que lo pueda evitar. Ni quiero había podido controlarme.

—Pobre mi pequeña Elena, destinada a meterse en líos. — Me acaricia la mano mientras me apoyo en su hombro. — Tranquila, solo es un malentendido. Ya se van a aclarar las cosas, aun así no deberías ponerte mal por lo que los demás piensen, ese no es tu problema. — me aconseja.

—Gracia William— Susurro.

—Cuando estés lista y si quieres hacerlo, podemos hablar de lo que pasó en el bosque. —Me dice mirándome a los ojos.
Algunas veces podía sentir como miraba más allá de mí, como si pudiera ver mi alma.
Es una sensación rara e inexplicable, los ojos de William eran tan azules que parecían brillar, y su mirada era demasiado penetrante. Tanto que algunas veces debía bajar la vista porque podía sentir como me hipnotizaban.
— Elena, está bien. Puedes confiar en mí. — agrega.

—No sé a que pasó en el bosque Will.— Susurro.

— ¿Por qué nunca me dijiste que podías hablar con los lobos?—

—No puedo hacerlo. —

—Elena, ese animal te entendió. Tú salvaste mi vida—agregó serio

—Estás confundido Will, perdiste mucha sangre. — Mi amigo creería que estaba loca.

—Sé lo que vi, ese animal no tenía intenciones de lastimarte. — Otra mirada penetrante. — Tú hablaste con un lobo. — Repite.

—No le digas a nadie. Creerán que estoy loca. —

—No pensaba hacerlo. Jamás haría algo que pueda perjudicarte. Tranquila será nuestro secreto. — Me sentí más aliviada.
—Aun así, pienso que deberíamos hablar de lo sucedido. Parecía que era la primera vez que lo hacías. ¿Tú no sabías que tenías esa habilidad?— Pregunta.

—No, ni quiera sé que pasó William. Es este lugar, está cambiándome. Está volviéndome loca. —

—Quizás solo estás liberando tu potencial.— Susurra. Alguien toca la puerta, la enfermera vuelve.

—La hora de visita termino. — Advierte.

—Ya me iba. — Suspiro. — Te vendré a buscar más tarde. — Le digo.

—Te esperaré chica lobo — Susurra.

— Te veo más tarde — Me sonríe desde la cama.
No quiera dejarlo solo, pero tenía que irme.

Ya en clases no puedo dejar de mirar a Liam junto a su novia.
Están sentados en la primera fila, mientras que yo estoy sola en el último asiento.

— Pedazo de mierda, te haré pagar— Pensé.
Liam se dio vuelta y me miró directamente a los ojos
—Maldito bastardo. Te arrepentirás— Dije bajo, le sostuve la mirada con rabia, para que notara cuando lo detestaba.

Después de un par de clases más, era hora del almuerzo.

James me había ignorado toda la santa mañana, él simplemente hacía como si yo no estuviera ahí. Jacob estaba demasiado alejado, ni siquiera me hablaba para discutir conmigo, Liam estaba tan lejos de mí como fuese posible.
Así que estaba sentada en la mesa junto a Jacob comiendo en silencio.

—Cambia la cara o vete a comer a otro lado. Tu depresión me está quitando el apetito — Jacob me mira molesto.

—Hoy no, Jacob, hoy no tengo ánimos para pelear contigo— No había probado bocado, solo estaba ahí existiendo.

Viviendo Entre BestiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora