CAPÍTULO 11: UNA FAMILIA

2.3K 131 0
                                    

CAPÍTULO 11: UNA FAMILIA

Los pocos avances que había hecho Santana en sus relaciones sociales se vieron truncados por su encuentro con Amanda. Otra vez pasaba la mayor parte del tiempo sola y no hablaba con nadie. Todos los chicos la notaban rara pero no sabían el motivo. Tampoco se atrevían a preguntar, se había comprobado que con la morena era mejor dejar que fuera ella quien se lo contase. Brittany había guardado el secreto. La rubia estaba desesperada, así que consideró que ya era hora de pedir ayuda a alguien en quien confiaba mucho. Cuando llegó la hora de la cena de los viernes, les contó a Brenda, Finn y Fred todo lo acontecido, sin omitir ninguna información.

– Esa chica lo que necesita es amor. ¿No tiene a nadie que le de cariño? – Quiso saber Brenda.

– Creo que no. – Respondió la menor.

– Entonces lo que necesita es una familia. – Comentó su hermanastro.

– Genial... No lo había pensado. ¿Dónde puedo comprar una? – Dijo la ojiazul inocentemente.

– Lo que quería decir, es que quizá pueda formar parte de la nuestra. Al fin y al cabo, nosotros la hemos formado hace poco y de la nada. – Dijo el más alto.

– No es mala idea. ¿Está ahora en el Carmel? – Quiso saber Fred.

– Si. – Dijo Brittany.

– Mañana vais los dos y la ayudáis a preparar las cosas para venir aquí el fin de semana. Haced planes para integrarlo con vosotros. No la dejéis sola en ningún momento. Sacaré del garaje los sacos de dormir y los colchones. Podríais invitar a Mercedes... Fin tendrá que acostumbrarse a hacer cosas más “femeninas” con vosotras, pero espero que se adapte.

– Gracias Papá. – Su hija le sonrió sinceramente. El padre se alegró de que su pequeña tuviera un corazón tan grande, exactamente igual que su madre.

Al día siguiente, Finn y Brittany llamaron a la puerta de la habitación que compartía la rubia con Santana. Ésta abrió la puerta y se sorprendió al ver a los dos hemanos. La morena estaba en pijama y tenía los ojos hinchados, dejando ver que había estado llorando.

– ¿No tendrías que estar en casa? – Quiso saber la latina.

– Vine a buscarte, tú te vienes con nosotros a pasar el fin de semana. – Dijo la ojiazul alegremente.

Antes de que Santana se diera cuenta, los otros dos chicos habían entrado a la habitación. Finn cogió una bolsa y se fue al baño para llenarla de los productos de aseo de la morena. Brittany abrió el armario y rebuscó entre la ropa lo que le parecía más adecuado y lo fue metiendo en una maleta. La menor se resignó y empezó a recoger su portátil, móvil y libros de texto para hacer los deberes. Cuando todo estuvo listo, los tres se dirigieron al coche para ir a la casa de la familia Pierce-Hudson.

Al llegar, Brenda les recibió dándoles un beso y un abrazo a los tres. Santana parecía un poco incómodo ante esa muestra de cariño, pero todos decidieron ignorar el gesto. Fred por su lado le estrechó la mano. Poco después llegó Mercedes y anunció:

– Hoy hay tarde de New Directions. No es una reunión del Glee Club, es de amigos que les apetece salir juntos a divertirse. No haremos nada raro. Bolera, cine y helados en el centro comercial. No os pregunto a ninguno de los tres si venís, es obligatorio.

– Ok. ¿Qué hacemos hasta entonces? – Preguntó la ojiazul.

– ¡¡¡Películas de terror!!! – Gritó Jones con una sonrisa.

Dos horas después...

– Pero... ¿Va a venir ese monstruo y nos va a comer? – Quiso saber aturdida la rubia mientras acariciaba a Lord Tubbington.

– No, tranquila. Sólo es una película. Ese monstruo no existe. – La tranquilizó con paciencia Finn.

– La comida casi está. Poned la mesa. – Pidió Brenda desde la cocina. En menos de un minuto, los chicos apagaron la televisión y se fueron al comedor.

Cuando todos estuvieron sentados a la mesa, la mujer comenzó a servir la comida en los platos y comenzaron a comer.

– ¿Te gusta, Santana? Si no puedo cocinar cualquier otra cosa para ti... – Dijo la mujer cariñosamente.

– Está riquísimo, de verdad. Hacía mucho que no comía comida casera... – Respondió la joven.

– Aquí, siempre que lo necesites, tendrás un plato y una cama. – Añadió Fred.

– Muchas gracias, por todo. – Dijo la latina sinceramente.

Ya en la tarde, los cuatro se dirigieron al centro comercial. Cuando llegaron la mayoría de sus amigos ya habían llegado. Mercedes agarró los hombros de la menor y dijo:

– Chicos, ésta es Santana. Ellos son Mike, Tina, Puck, Kurt, Blaine, Sugar, Joe, Lauren y Sam. – Señaló a los aludidos. – Son buenos chicos, aunque están como una cabra...

– Le dijo la sartén al cazo. – Hummel bromeó mientras tendía su mano a la morena. Luego los demás la saludaron de la misma manera.

– Artie se retrasará un poco. Su madre no lo puede traer antes. – Informó Anderson.

– ¿Lo esperamos comiendo helado? – Sugirió Finn.

– ¿Siempre piensas en comer? – Quiso saber Kurt.

– ¿Votos a favor del helado? – Preguntó Puck. Todos los chicos menos el castaño y Brittany levantaron la mano. Como eran mayoría se fueron allí.

Una vez se sentaron y tenían todos sus helados, comenzaron a charlar sobre temas triviales y cotilleos del McKinley. Después de un rato, la conversación se centró en el moreno.

– Santana... Todos aquí cantamos y bailamos... Bueno, más o menos. – Dijo Sam dirigiendo su mirada a Mike y Finn. – Pero no sabemos de lo que tú eres capaz. ¿Te enfrentarías a nosotros en una batalla de baile en las recreativas?

– Yo ni lo intento. – Añadió Hudson.

– ¿Por qué no? – Preguntó la morena.

– Soy malísimo bailando.

– Quizá yo soy peor, eso no lo sabes. – Añadió Lopez

Finn le dedicó una mirada incrédula a la latina hasta que ésta confesó.

– Vale, no soy tan mala. Pero te aseguro que Mike y Britt me ganan, los vi en los Sectionals.

– ¿Estuviste allí? No te vi cantar ni bailar. – Dijo el rubio desconcertado.

– Estaba en el público. – Matizó Brittany. – No está en Vocal Adrenaline, aunque sea nuestra amiga.

Después se fueron a las recreativas y realizaron la batalla de baile. Finn quedó el último y ganó Mike. Santana no quedó en mal lugar. Cuando Artie llegó, se fueron al cine a ver una película de fantasía. La morena se integraba poco a poco con los chicos y, para felicidad de la rubia, parecía tener una gran conexión con Kurt y Mercedes.

Yo Estaré Contigo (Brittana girlxgirl)Where stories live. Discover now