Capítulo 22

186 31 4
                                    

『Es recomendable que escuchen la song en multimedia (Pumped up kicks) mientras leen, pero ya es decisión de ustedes xd. Recomendación: No sé si a ustedes les pasa, pero a mí sí. Para los que leen con el modo de lectura de "Paginación" y reproduzcan la canción, será mejor que lo cambien a "Desplazamiento", así la canción no se corta y se reproduce con fluidez』





≪❈¿No has escuchado lo que le ocurre a las mentes curiosas?❈≫

╔══════❀・°・❀══════╗

Son ruidos estrepitosos, como si alguien estuviera empujando a un persona una y otra ves contra los casilleros.

El de ojos avellana se posiciona detrás de mí, con algo de miedo, pero apuesto a que debe ser alguno de los chicos buscándonos.

Guardo la pequeña caja musical para que no se estropee y me levanto junto a Ryan, él lo hace lentamente manteniendo su mirada en la oscuridad de los pasillos, donde no llega la luz de las linternas.

Me acerco a donde escuchamos el ruido para así responder mis dudas. Pero solo al dar un ligero paso, los sonidos cambiaron de algo ligero a ensordecedor. Esos ruidos no fueron causados por un tipo de accidente, son intencionales, muy intencionales. No suena como alguna pelea entre estudiantes, es como si ahora estuvieran destruyendo los casilleros con tanto odio que no sé qué pensar, mi mente no maquina en estos momentos.

Ryan toma mi muñeca para alejarme, pero quiero saber qué es lo que hay. No permanezco en la misma posición mucho tiempo ya que el chico detrás de mí me arrastra para encontrar alguna salida cuando el sonido estrepitoso se acercó lo suficiente a nosotros como para escucharlo a la perfección. ¿Desde cuándo esto se convirtió en una escena sacada de alguna película de terror?

Esto no es una broma, no parece serla, ya que es de muy mal gusto. Las pisadas nos siguen y nosotros corremos de lo que sea que nos persiga. Sé que viene por nosotros, y será mejor correr antes de detenernos a investigar lo que es. Nuestra primera opción siempre será correr, y si no encontramos nada mejor, luchar.

Mi pecho arde por cada respiración que tomo mientras la velocidad se hace presente en cada paso que damos en el suelo. Ryan no conoce la escuela como yo, así que tomo su muñeca para guiarlo hacia alguna salida. La más cercana que conozco en este edificio es cerca de la escalera de incendios, pero gracias al miedo que se arremolina en mi pecho, la poca iluminación que tenemos, el laberinto de casilleros de por medio y el ruido que cada vez se hace más cercano a nosotros, hacen que mi mente se quede en blanco, demos algunas vueltas que no nos llevan a nada y nos perdamos.

Ryan está desesperado, lo noto en su pulso, su transpiración y sus temblores, pero no puedo hacer mucho por él si estoy igual.

Siento que me quedo sin aire poco a poco, me duele mi pecho y mis piernas fallarán en cualquier momento. Soy atlética, lo sé, pero, en esta clase de situaciones (que debo decir que nunca he estado en algo parecido), mi mente se separa de mi cuerpo y me hace más débil.

—¡No encuentro una salida! —exclamo con un poco de sudor recorriendo mi frente.

Ryan nota que estoy apunto de ir más allá de la desesperación, así que encuentra una puerta cercana —que es un cuarto de limpieza— y me arrastra allí.

La Curiosidad Mató a SummerWhere stories live. Discover now