Chris no dijo nada, simplemente sonrió y apretó ligeramente más su mano.

Empezaron a caminar por un sendero entre los árboles. Y tras un par de minutos llegaron a un lugar con varias casas, era un lugar un tanto extraño.

—¿Qué haremos aquí? —preguntó Daril.

Chris no respondió, simplemente sonrió y camino hacía una de las casas. Al llegar a la puerta buscó por arriba del marco de esta y tomó la llave. Abrió la puerta y tomó nuevamente a Daril de la mano para hacerlo pasar.

—Chris, contesta —exigió molesto.

—Tranquilo —le sonrió una vez más para calmarlo— quiero descansar un poco y quiero estar contigo, no va a pasar nada —lo abrazó— a menos que no quieras.

Daril trató de empujarlo, fracasando al instante.

—Estoy bromeando tonto —besó su frente— te digo que eres adorable.

—No lo soy —respondió sin mirarlo.

—Bueno, bueno —lo soltó y sacudió su cabello.

—Chris —llamó Daril— ¿por qué quieres estar con alguien como yo?

Chris suspiró.

—Porque simplemente lo quiero, no tengo una explicación... sé que te quiero y que eres la única persona con la que quisiera estar siempre.

—¿No te importa la diferencia de edad? —Chris negó— una pequeña razón por la cuál no quería regresar contigo era porque creía que te cansarias de mi y mis tonterías de niño adolescente.

—Eso nunca va a pasar —se sentó en uno de los sillones, seguido Daril se sentó junto a él— te quiero tal y como eres, no me importa la edad, si eres hombre o si la gente lo ve mal, me gustas, te quiero y estaré para ti siempre no importa qué.

Daril no contestó, volteó a ver a Chris y después de unos segundos recargo su cabeza en el hombro de este.

—¿Puedo besarte? —preguntó Chris.

—¿Por qué pides permiso? —levantó la vista.

—No lo volveré a hacer entonces —se acercó un poco hacía Daril y le dio un tierno y lento beso en los labios.

Daril, sin separarse de Chris, se subió a su regazo y siguió con el beso. Después de quedarse sin aire se separaron.

—Como extrañaba esto —dijo Chris tratando de recuperar el aliento y con uno de sus brazos rodeaba la cintura de Daril y lo atraía más a el —tus labios son tan dulces, Daril.

—Te quiero —habló Daril de repente— eres tan especial para mi... me haces querer ser una mejor persona siempre que estamos juntos.

Chris apego más a Daril hacía sí para darle un abrazo fuerte. Daril, al cabo de unos segundos, levanto la cabeza para darle un beso en el mentón, para después empezar a dejar pequeños besos por todo su cuello.

—Daril, espera —lo detuvo y se acomodó en el sillón, con él aún arriba suyo.

—¿Qué? —preguntó con una sonrisa.

—Si sigues con eso no sé si pueda controlarme.

—Esta bien —dijo por último para darle un beso ahora en los labios.

—¿Estás seguro? —preguntó una vez que se separaron.

—Más que seguro —lo abrazó por el cuello y se acomodó arriba de él.

—¿En serio? —Daril asintió.

Chris volvió a besar a Daril, ahora desesperadamente y en un movimiento rápido Daril quedó debajo de él.

—Daril, te extrañé bastante —le decía Chris entre besos.

—Yo también —contestó Daril.

—Habló en serio —se separó un poco— no sabes como la pasé sin ti.

—Deja de hablar —lo besó— ya podremos hablar de eso luego —Chris no protestó.

De los labios de Daril, Chris bajo un poco para besar el cuello de este, al tiempo que con una de sus manos acariciaba su torso. Daril soltaba pequeños gemidos en el oído del mayor, cosa que hacía que se excitara más de lo que ya estaba.

—No... no, espera —interrumpió Chris.

—¿Ahora qué? —preguntó fastidiado.

—¿Estas seguro de que quieres esto? —Daril volteó los ojos— es sólo que creo que deberíamos esperar...

—¿Esperar qué? —se incorporó en el sillón.

—Que crezcas un poco más...

—Ya lo hemos hecho antes.

—Y justo en eso estuve pensando cuando nos separamos, creo que debimos esperar al menos a que tengas 16.

—Pero eso no importa.

—No, esperemos Daril.

—¿Dónde esta el baño? —preguntó sin verlo, sentándose en el sillón.

—¿Qué cosa? —preguntó, no había entendido bien.

—El baño, necesito arreglar esto —se levantó.

Chris le dio indicaciones a Daril y se echó para atrás en el sillón... ¿tan mal estaba al querer empezar las cosas de poco a poco con Daril? No quería que fuera como la primera vez, que estuvieran juntos debido a que tuvieron relaciones y se dieron cuenta de que se querían.

El celular de Daril, el cual antes de ir al baño había dejado en el brazo del sillón, comenzó a sonar. Sabía que estaba mal, pero no le importó a Chris y tomó el celular, contestó.

—¡Daril!, idiota, ¿por qué no me dijiste que te besaste con Jessie?

Apostando el DestinoWhere stories live. Discover now