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Empecé a caminar hasta que ingrese  al gimnasio atestado de gente. Lo único que espero, es que todo esto no se vaya a tornar como la película cliché. Me sentiría extraño si todo mundo se gira para mirarme.

Entré al lugar, y por fortuna, a nadie le interesó mi presencia. A lo lejos divise una mesa, justo donde estaba una rubia con un gran vientre y tres chicos sentados a los lados, ah sí, había también otra chica...y Courtney.

Vaya que esta última si se veía demasiado bella. En sí, no llevaba un vestido. Más bien algo de dos piezas una elegante blusa negra que dejaba un pequeña parte de su torso descubierto y para abajo, era una falda que dejaba una pierna al descubierto.

Lentamente me fui acercando hasta quedar detrás de Jo

— ¿Les molesta si me uno? — susurré.

Jo se sobresalto y se giró a mirarme.

Fueron pocos los segundos que basaron para ser saludado de forma emotiva por la rubia.

— ¡No lo puedo creer! Demonios ¿Cuando has llegado?

— Hoy en la mañana. Quería dar una sorpresa.

— Si que la has logrado dar, amigo — dijo Troya palmeando mi  hombro. Le sonreí en respuesta

— ¿Que tal? — dije como saludo dirigido a Julián. Si mucho movió la cabeza. Me extrañó de que esté aquí, luciendo de traje y teniendo una copa con ponche en la mano. 

Eso debería tener foto. 

— ¿Te olvidas de mi? — preguntó Darkar mirándome.

— ¿y tu eres...? — pregunté en broma y todos rieron. Este se puso una mano en pecho fingiendo hacerse el ofendido.

Saludé a la chica que fue presentada como Michelle. La chica con que Darkar estaba saliendo. Si lo pienso bien, me extrañó de que Troya está solo, según dijo, no vino con nadie porque nadie le llamó la atención lo suficiente. Darkar, como el buen idiota que es, se la pasó haciéndole chistes sobre que mi mejor amigo era homosexual. Casi se gana un golpe por parte del aludido.

Por último estaba Courtney. Si, si, hice mal en dejarla de último. Pero es que si la dejaba para lo último, voy a tener más tiempo con ella.

— También me sorprende tu llegada Norman —habló ella y yo simplemente estaba embobado con su bonito rostro. Ojos marrones delineados con toques de dorado, una nariz respingada y los labios de color vino tinto.

— Pues ya ves — levanté los hombros — Quería dar una sorpresa y lo logré.

— Si que lo has logrado entonces — sonrió — ¿Nos sentamos?

— Claro.

Ambos tomamos asientos frente a la mesa. Los chicos se han dispersado. Como si fuera una táctica para yo quedar a solas con Courtney...

Ya, si, si, he estado leyendo mucho Wattpad últimamente...

Troya quien sabe para donde pego. Darkar se que sacó a la pista de baile a su chica. Julián sólo está parado a un lado de Jo, eso mientras la rubia come papas fritas y bebe ponche en una de las mesas de comidas

— Opino que a Jo le luce el estar encinta — dijo Courtney — Se ve radiante.

— Todas las chicas embarazadas son así ¿Verdad?

— No. Debiste en verdad haber visto a mi prima Borah, la chica si que parecía más bien embarazada del anticristo o que se yo — se burló — No se veía ni un diez por ciento a como se ve Jo. Radiante y feliz a pesar de lo que ha pasado y que no es una cosa fácil. Además que a su lado tiene a Julián....noté que puede parecer algo antipático, cínico y malo, pero tiene un gran corazón. Otro deja a la chica tirada, y él, sonríe de lado cuando Jo le hace alguna pregunta estúpida, pienso que a veces se le sale el lado rubia. 

— Si... tienes razón.

— Oye Norman. Tengo una pregunta, tal vez te la tomes a mal o algo...

— Lanzala.

— Bueno. En París...no se, ¿ya tienes pareja?

— ¿Eh? ¡no! No tengo pareja. No lo sé, las francesas no vienen siendo mucho mi tipo.

— Ya veo

Luego de eso, ambos nos quedamos en silencio.

Proyecto: En busca de la chica ideal  #BrightAwards2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora