Profesor ¿Lo Seduzco? [YoonMin] BTS

[NO HAY FELICIDAD]

—No recuerdo haber pasado por tu casa Hyung...—le contesto a mi hermano mayor, Jungkook mientras le ayudo cargando su mochila. —Vine por el camino del parque.

—Ahh... está bien, ya veré ese tema luego. —acomoda su cabello y cierra la puerta de la habitación del hospital, caminamos por los pasillos para ir hacía la salida de aquel lugar y él parece desesperado, quiere irse pronto.

Reacomodo mi suéter y mientras me muerdo el labio medito si debo preguntarle acerca de un tema que me carcome los nervios, suelto un suspiro y comienzo a hablar.

—Hyung, ¿es cierto lo que dijo mi padre? ¿Ese daño te lo causó Jimin-hyung? —detiene en seco sus pasos y bajo la mirada con pena, sintiéndome mal por preguntarle aquello, él me dedica solo un gesto despreocupado y sigue caminando ignorándome.

—Sólo recuerda y ten siempre en cuenta que Jimin es buena persona, y nos queremos demasiado.

¿Y por qué le lloraba a aquel otro chico?

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(1 DÍA DESPUÉS)

—¿No te apetece salir a pasear? —escucho la voz de Jimin detrás de mi oreja tomándome por sorpresa y doy un leve brinco de susto. —Podemos ir a pasear al centro comercial, luego al cine, después ir a cenar. ¿Te agrada la idea? —besa el lóbulo de mi oreja delicadamente y los vellos se me ponen de punta, sus nudillos acarician mis mejillas y sonríe. —¿Qué dices?

¿Por qué ese cambio de actitud tan repentino? Es perturbador y me hace dudar un poco sin embargo, me siento como un paranoico pensando en tanto y solamente asiento. —Estaré listo en unos 20 minutos, espérame en la sala.

Toma su chaqueta y sale de la habitación dedicándome una sonrisa, me cuestioné un poco el porqué de su cambio de actitud tan repentino pero simplemente me limité a pensar que se está volviendo rutina para mí el preocuparme de todo. Después del pequeño incidente que tuvimos, creo que puedo soportarle cualquier cosa. Su ira era demasiada y me dejó tan malherido que tuve que acabar en el hospital durante unos días, ahí notaron más heridas y recomendaron que fuese llevado a un psiquiatra. ¡En fin! Eso es otro tema. Peino mi cabello y me pongo colonia para bajar, en la sala está él con su móvil y al verme se pone de píe y sus pasos se acercan a mí.

—Pasaremos un gran día. —lo sigo diciendo, se v emuy extraño, parece realmente feliz.

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—Oh, en serio... tienes que probar esto, es riquísimo. —le digo conforme voy saboreando mi helado, ríe un poco y toma el barquillo de mis manos para lamerlo , pone expresión de alegría y sonríe igual que un niño de tres años con su golosina preferida.

—Mhmmm, debemos de comprar otro como éste. —saborea sus labios y me mira feliz. —¿Vamos?

—Vamos.

He de admitir que desde que hui de casa, no me había sentido tan feliz, es decir, ésta extraña sensación de tranquilidad, paz y alegría, me resulta tan irreal que pienso que en cualquier momento va a destruirse, no soy pesimista pero, tener un día feliz, podría decirse que no es de las cosas que suelan pasarme con tanta frecuencia por no decir que en realidad nunca tengo días felices. Besos sus labios cortamente porque él gira su rostro y me sonríe—El semáforo.

—Vale, no te distraigo. —me acomodo en mi lugar del auto y observo atentamente como las luces iluminan la ciudad, cierro los ojos y sin pensármelo dos veces me quedo dormido, quizá esto sea un nuevo inicio en el cuál podemos esperar de forma bella la fecha de nuestra boda.

[Todo se rompe]

—Jungkook... Ya llegamos, despierta . —le escucho llamarme y siento sus manos jalando de mi brazo para despertarme, le miro adormilado y él me acaricia el rostro.—No te duermas aún... debemos de hablar un poco.

—¿Hablar de qué? —le cuestiono casi al instante, él simplemente me indica que entremos a la casa y que ahí hablaremos. Algo me decía en mi interior que tanta felicidad y atenciones no podían ser tan perfectas. Dirigimos nuestros pasos al comedor y cada uno de nosotros toma una silla, ya no carga la misma sonrisa en el rostro y su expresión me da a entender que hasta está mortificado, suspira con aire cansado y solamente logra apoyar sus manos en la silla.

—Vamos a hablar de lo nuestro, Jungkook. —¿Lo nuestro? ¿Qué ocurre con nosotros? No tengo ni idea de lo que quiere decirme pero trato de no ponerme más tenso o nervioso.

—Eh... Jimin, se claro, no entiendo nada.,

—Pues... Ah, no sé cómo decirlo...—rasca su nuca nervioso y baja la mirada. —Y-yo conocí a alguien más...—Esper... ¿Qué cosa acaba de decirme? Siento un bajón en la presión arterial que es horrible y trato de controlar mis nervios, escuché mal, estoy seguro de que escuché mal.

—Jiminie, deja las bromas de un lado, no me gusta jugar con eso. — suelto una risilla llena de nervios y él vuelve a suspirar poniéndome más tenso. —Falta muy poco para nuestra boda. No puedes darte el lujo de hacerme bromas así.

Tengo una extraña sensación en el pecho, esto no está pasando.

—No son bromas, Jungkook, conocí a alguien más y...—parece que ni siquiera él puede asimilar lo que me va a decir, mis manos puños están apoyados sobre la mesa y me tiemblan los nudillos, sin embargo, finalmente deja de morder su labio inferior y toma de nuevo la palabra. —Quiero darle un fin definitivo a lo nuestro.

—¡No! —grito antes de que pueda seguir hablándome y me pongo de pie para acercarme a él y mirarlo directo a los ojos. — ¡Dime que es mentira! ¡Dímelo! T-tú no puedes dejarme solo. ¡No puedes!

—No puedo obligarme a quererte Jeon, simplemente esa otra persona se ha ganado ese pequeño lugar que te pertenecía. —¿Es en serio lo que me está diciendo?

¿Cómo ocurrió? ¿Cuándo? ¿Dónde? Mis lágrimas comienzan a asomarse por mi rostro y simplemente las dejo escapar, no voy a detenerlas.

—¡Quédate a mi lado! ¡Por favor! — empiezo a suplicarle entre lágrimas y me acerco para abrazarlo, él simplemente me evade y trata de apartarse pero se lo impido. —No me interesa que me golpees, no me importa que te acuestes con otros chicos. —me cuesta mantener un tono de voz decente porqué siento que el alma se me quema. — ¡Sólo pido que no me dejes! Por favor. —hago una súplica incesante que para él parece no importarle. —Puedes golpearme las veces que quieras y estaré bien ¡Juro que no voy a quejarme! —tiro del cuello de su camisa y pego mi rostro empapado de lágrimas, al suyo. —No puedo amar a otra personas que no seas tú.

Creo que la palabra dignidad no existe en mí.

—Lo siento Jeon, yo ya no quiero nada contigo. —me dice fríamente en cuánto me logra controlar y sus ojos penetran con rudeza mi mirada. —Nada.

No quiero nada contigo

No quiero nada contigo

No quiero nada contigo

No quiero nada contigo

No quiero nada contigo...

¿Ah sí?

—¡No voy a dejar que eso ocurra! —grito lleno de ira y le doy un fuerte empujón contra una de las paredes—Esa mala parte de mí, la que no razona, la que no piensa, esa es la parte qe está gritando justo ahora. —¡No soporté un sinfín de cosas para que ahora me mandes a la mierda! ¡Tú eres mío! —sus ojos me muestran una leve pizca de terror y pega su cuerpo a la pared. No puedo razonar con claridad debido a éste fuerte sentimiento de frustración que me consume de forma increíblemente rápida. —Las cosas no son así de fáciles, mi Jiminie. —mi mano derecha jala de la cajonera de la cocina y saco un cuchillo para dirigirlo cerca de su rostro. —Si no eres feliz conmigo, no puedes estar con nadie más.

¡CHAN CHAN CHAN!

No me maten y apiádense de mi alma en desgracia 7n7 no me acostumbro a la nueva escuela :( 

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