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YoonGi

-Has estado incómodo desde que llegamos.- Jimin dijo tras de mí. El sonido de la puerta del balcón de mi habitación cerrándose me hizo saber que teníamos completa privacidad.

El viento soplaba fuerte, la frialdad de la noche se colaba a través de la tela de mi ropa. Las manos de Jimin se hallaban ahora sobre los costados de mi cintura, su barbilla reposaba tranquilamente sobre mi hombro derecho y su pecho estaba pegado por completo a mi espalda.

-¿Qué ocurre, pequeño?

-No es nada.- mentí.

-YoonGi...- dijo con ese tono de no te creo un carajo.

-No es nada, Park.- mi vista se dirigió hacia un pequeño automóvil negro que pasaba por la calle- De verdad, nada pasa. Estoy bien.

-Es por ese chico.- su voz se tornó grave, seria- Luca.

Me tensé al escuchar su nombre. Y cómo no hacerlo, apenas llevábamos treinta minutos en el lugar y el tipo ya me tenía los nervios al borde del colapso con sus miradas intensas y palabrería con doble sentido que solo él y yo podíamos entender.

-Tú le gustas.- no era pregunta.

Tomé una larga bocanada de aire y exhalé lentamente. Los brazos de Jimin ahora rodeando mi cintura por completo. Sus labios presionando delicadamente sobre la piel de mi cuello.

-Está asfixiandome, Jimin... Él... Él...

Lo sentí tensarse. Su respiración tornándose más pesada. Un gruñido atravesando su garganta.

-¿Te ha hecho daño?- y el tono de la pregunta sonaba jodidamente cabreado.

Negué con la cabeza.

-¿Debo ir a ponerlo en su lugar?

Suspiré.

-No es necesario, Jimin.

-Pero...

-La señora Elise y Gwen nos han invitado a cenar, ellas mueren por conocerte y probablemente lleguen en cualquier momento. No hagamos de esta noche una desagradable. ¿Vale?

Gwen y su madre habían salido al supermercado por algunas bebidas y snacks para después de la cena. Habían llamado algunos minutos atrás avisando que estaban atascadas en el tráfico y que tardarían un poco en llegar. Mientras tanto Jimin y yo habíamos estado todo el tiempo en la sala en compañía de Luca, pero el ambiente se sentía pesado. Él no dejaba de hablar estupideces sobre como él y yo la habíamos estado pasando bien estando juntos pues éramos amiguísimos. Llegó el punto en que empezó a preguntar sobre como Jimin y yo nos conocimos y cómo era nuestra relación. Jimin respondía sus preguntas tranquilamente, obviamente contando la versión aceptada por la sociedad. Esa en la que Jimin era el doctor de Hoon y nos conocimos en el hospital. En cambio yo apenas podía llevar el hilo de la conversación. Recordar las circunstancias reales en las que conocí a Jimin siempre me traía malos sobre mi vida anterior, por eso nunca se hablaba del tema. Y, a juzgar por la expresión en el rostro de Luca, sabía que Jimin le estaba contando una verdad a medias.

-¿Te gustó Jimin al instante?- me preguntó Luca con fingido interés minutos atrás cuando estuvimos los tres conversando.- ¿O te empezó a gustar cuando descubriste que tenía dinero?- dijo esto último en francés para que solo yo pudiera entender.

-Necesito ir al baño.- dije, levantándome del sofá repentinamente- Con permiso.

Con rapidez me dirigí al piso de mi habitación. Apenas escuché un preocupado ¿Pequeño,estás bien? Por parte de Jimin pero le ignoré y seguí mi camino. Sabía que había un baño en la primera planta, pero lo que yo necesitaba era estar solo y tomarme un respiro. Luca estaba actuando de esa forma que desconocía otra vez, tratandome de interesado, diciendo que solo estaba con Jimin por su plata. Jodido imbécil. Terminé en el balcón apoyado sobre la baranda, respirando con dificultad.

For Money... [JimSu] [YoonMin] (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora