El embarazo de NamJoon || JinNam

Quédate a mi lado

<<La vida no es injusta, todo lo malo usualmente son pruebas y difícil o no debemos seguir, confiar en que al superarlas vamos hallar la verdadera razón de nuestra existencia, nuestro final feliz... El amor>>

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Jin estaba cumpliendo su promesa. Se hallaba sentado a un lado de la camilla en la cual descansaba inmóvil NamJoon. Pidiendo una y otra vez que por favor no lo alejaran de su lado.

Se sentía miserable por no haber podido evitar esa tensión, si tan solo hubiese hablado con sus padres desde antes no hubiese pasado eso, no hubiese recaído toda la tensión sobre su pobre NamJoonie.

No importaba cuanto le dijeran los muchachos que no era su culpa, Jin se estaba auto castigando por todos los sucesos recientes. Aún si Bang PD le aseguró que todo estaría excelente y le recalcó que NamJoon era un chico sumamente fuerte que no se daría por vencido tan rápido él seguía deprimiéndose, haciéndose sentir mal cada vez que sus ojos miraban a NamJoon postrado en esa maldita camilla de hospital con sábanas blancas, viendo ese apacible rostro sin ninguna expresión y su cuerpo necesitado de medicamentos para mantenerse estable aunque su consciencia no estuviera ahí.

Tomó su mano y le acarició los nudillos esperando que sucediera como en las películas, esas donde la persona en coma escucha los llantos del otro y siente los toques en su mano hasta que hace funcionar la propia y apretar la contraria llamando así la atención de la otra persona, pero sabía que eso no sucedería, no le servía de nada soñar en grande de esa forma si solo saldría lastimado al darse cuenta de que NamJoon estaría en cama un muy largo tiempo y le dolía.

Día tras día hacía el mismo recorrido. Pasaba toda la noche y casi todo el día en la habitación de NamJoon, salía del hospital para tomar una ducha en la casa, cambiarse de ropa y regresaba nuevamente al hospital sin dormir ni un poco, solamente tomaba un café de camino al lugar, llegando lo tiraba, entraba a la habitación de NamJoon y se sentaba a su lado hablándole a él y a su bebé para que supieran que estaba ahí, a veces lloraba, otras reía levemente recordándole a NamJoon que debía regresar y por momentos dormitaba sin soltar la mano del moreno.

Las enfermeras del lugar comenzaban a compadecer al chico y sentían mucha lastima por él. Era obvio que se veía deprimido, cansado e histérico, ni siquiera los chicos de Bangtan lograban que Jin se quedara a dormir a la casa.

No se había rasurado desde hacía casi un mes atrás, bajo sus ojos habían grandes bolsas moradas y su rostro estaba sumamente pálido, no estaba comiendo bien, la mayor parte del tiempo solamente bebía café para estar despierto y de esa forma permanecer al lado de NamJoon sin perderse ni un segundo por si despertaba y eso comenzaba a alterar a los demás.

Sus padres habían intentado hablar con él, pero debido a lo que sucedió antes ya no tenían una buena reputación con su hijo menor y nada de lo que ellos dijeran ayudaba porque para Jin no eran más que los idiotas que metieron a su pareja en un coma. Sabían que él tenía razón, si hubieran comprendido un poco más que lo que sucedió no era su culpa todo hubiera sido genial, pero no, tenían que haber hecho un escándalo...sí, se arrepentían.

—Jin-Hyung — La voz de JungKook se dejó escuchar en la habitación.

—¿Qué sucede?— Preguntó sin mirarlo, solamente miraba a NamJoon.

—Me preocupa, mucho, Hyung, debería dormir tan siquiera un par de horas seguidas... Comer un poco— Mencionó el menor acercándose a Jin, pero él no respondió nada en ningún momento.

Un silencio incómodo se formó en la habitación cuando JungKook se paró frente a Jin y lo miró fijamente.

—¿Por qué me ves así? — Cuestionó SeokJin.

—Porque estamos hartos, Hyung, no sé si comprenda que de nada le sirve vigilar a NamJoon y destruir su propia salud si Nam no va a despertar ahorita— Comentó y Jin lo miró seriamente —Me refiero a que, es ya bastante malo que NamJoon-Hyung esté encamillado... Sin moverse y sin que sepamos cuando va a despertar, imagínese qué tan malo sería si usted se pone igual de mal... está arriesgando mucho su salud y de nada nos sirve que se ponga así, necesitamos que sea fuerte porque nosotros igual queremos ser fuertes y sin nuestro líder usted es la mejor opción, sin embargo ahí está, demacrado, despeinado, barbón, pálido, ojeroso y delgado debido a sus malos cuidados que ha estado llevando por sólo procurar a NamJoon-Hyung— Dijo sin dejar de mirar a SeokJin —Y antes de que me diga que no lo entiendo quiero que sepa que sí lo hago, todos estamos igual de tristes que usted por nuestro Hyung, pero de nada sirve que nos pongamos mal... Todos intentamos ser fuertes y estar firmes para Nam-Hyung... Usted debe hacer lo mismo— Aclaró y Jin lo miró igual.

No sabía que decir, era cierto, evitaba verse en el baño porque ciertamente comenzaba a verse como un perdedor patético, vago y alcohólico de esos que se mostraban en las películas americanas, todo porque se sumergió demasiado en su propia miseria sin darse cuenta de a cuantas personas estaba arrastrando consigo en esos momentos.

Miró nuevamente a NamJoon y acarició su mejilla con cariño antes de darle un suave beso en la frente.

—No te voy a dejar NamJoon, no importa que pase, yo seguiré aquí — Susurró besando la mejilla del moreno y pasando una mano por el hinchado vientre de su inconsciente pareja— Cuando despiertes iremos los siete de viaje ... Prometo llevarte a una playa... Te daré uno de los mejores días de tu vida... Pero para que eso suceda tienes que volver NamJoon... Tienes que abrir tus ojos... Yo estaré aquí cuando decidas hacerlo, no quitaré mi mano... Aquí estaré, a tu lado, siempre — Susurró por último antes de sentarse y acariciar los nudillos del moreno.

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¡Actualización! Lo sé, me tardé un buen en actualizar pero al fin, aquí está en capítulo, espero que lo hayan disfrutado, no me maten, amenme y hasta pronto con el siguiente.

Trataré de hacerlo rápido. Ya saben que si les gustó no se les olvide comentar y votar ❤ los ama Matt.