Llegaste tú 2 || Gemeliers

Capítulo 36.

Me renta mucho más que se abrace a mí mientras vemos una película, o que pasemos de la película y me la coma a besos, yo que sé.

Supongo que tiene su lógica, ¿no?

Y que ya tendremos tiempo para los encuentros familiares.

El timbre suena sacándome de mis pensamientos.

Dani: hola -saludo amable al repartidor

X: hombre -se ríe- ¿tú eres Dani?

Un chico alto y moreno, con mi edad quizás, o un año mayor, y que para mi sorpresa sabe como me llamo.

Dani: ¿nos conocemos? -pregunto confuso

X: que va -me entrega el pedido- pero a Sara sí que la conozco

Dani: ¿de qué conoces a Sara? -cuestiono

X: ella a mí también me conoce -coge el billete que le tiendo- me vine a Sevilla hace poco -informa dándome el cambio

Dani: ¿eres de Barcelona? -frunzo el ceño

X: soy de Madrid campeón -se monta en la moto de nuevo- disfruta de la comida -me dice antes de arrancar

¿Quién es éste tío?

Cierro la puerta de casa sin darle más importancia a lo que acaba de ocurrir y dejo la comida en la mesa.

A los pocos minutos suena el timbre de nuevo, y por la forma de llamar deduzco que es Sara.

Dani: ¿quién es? -bromeo mirando por la mirilla

Sí, es ella.

Veo como sonríe y se cruza de brazos.

Sara: le traigo un paquete -me sigue el rollo

Dani: ¿y qué contiene el paquete? -me hago el interesante

Sara: pues mira, un intento de buena novia bastante desastre y un poco pesada

Dani: ¿algo más? -vacilo divertido

Sara: sí, bueno... en la caja pone frágil, así que ten cuidado a la hora de tratarla porque necesita bastantes mimos -se toca el pelo

Me aparto de la mirilla.

Sonrío agachando la cabeza y sé que está diciendo toda la verdad.