Victoria
Salir del gimnasio a las ocho de la mañana me da la mejor sensación: tengo el tiempo y la energía para todo.
En la tarde tendré una reunión con Sofia, mi representante, pero aún faltaba mucho para eso. Eso no me molestaba. Sin embargo, lo que sí me inquieta es que soy una persona de muy pocos amigos y por ende muchas veces no tengo quien pasar el rato. Lamentablemente, y contrario a los que muchos piensan, soy una modelo famosa bastante aburrida y simple.
No hay nadie en casa de mis papás, mi única amiga de verdad muy probablemente esté en la facultad, Ricardo trabajando, y mi novio también. En momentos como estos la única opción que tengo es volver a mi innecesariamente espacioso y vacío penthouse a dormir o buscar qué mirar en Netflix mientras espero por la reunión.
Suspiré cuando salí de la ducha y vi que apenas eran las diez de la mañana. Fui a mi cocina por unos snacks y me enterré bajo mis sabanas con la laptop encima.
"Que solitaria esta vida" - pensé.
El resto de mi mañana transcurrió mientras ojeaba mis miles de books fotográficos, respondiendo algunos mails, y mirando episodios de Grey's Anatomy.
Por suerte Jenny me escribió al medio día cuando salió de la facultad. Me mandó un sin fin de audios por Whatsapp contándome el último chisme sobre sus compañeros. ¡Finalmente mi día tenía algo de emoción! Al parecer Franco había estado cagando a Julia con Karen, su mejor amiga. Y eso no era todo. Julieta siempre lo supo pero se hacía la que no porque le gusta un pibe de su clase de derecho internacional. No conozco a ninguno, de hecho es la primera vez que Jenny me habla sobre ellos, pero escuchaba su relato fascinada.
—Que difícil es seguirte el rastro, boluda - se quejó - Te veo en todos lados pero al mismo tiempo no te veo, ¿me explico?
Cuando terminé de escuchar presioné el pequeño botón con el dibujo del micrófono y hablé:
—Ya sé, no me hagas sentir mal. ¿Hacemos algo mañana?
Lo mandé y mientras esperé por su respuesta me habló mi persona favorita en el mundo.
P: Amor, salgo tarde. Queres salir a cenar?
V: Hamburguesas, por favor.
P: La súper modelo que se mata entrenando quiere hamburguesas?
V: Sí.
P: Me encantas.
Mordí mi labio y sonreí.
...
— ¿Eso es lo que me van a pagar si acepto?
Pregunté asombrada mirando el acuerdo legal que Sofía me acababa de entregar. Mi agente asintió expectante por mi respuesta y Ricardo alternaba su mirada entre nosotras y su celular.
— La revista Déjá Vu tiene buena reputación. Son profesionales, respetuosos. Tienen al mejor equipo de fotógrafos, ya has trabajado con varios de ellos.
